Querido diario:
Nunca me he sentido distinta a las otras personas bajo ningún concepto, pero cuando veo a aquellos seres simplemente pierdo mi propia esencia, en otras palabras siento que me vuelvo otra persona. El día de ayer me encontraba limpiando mi habitación como siempre hago, todo parecía tan normal como siempre, de pronto, al mover uno de mis escasos muebles para limpiar el suelo debajo del mismo, veo algo que me hiela la sangre, ¡Un insecto! En MI CASA, un asqueroso insecto en mi casa, con histérica rapidez tomo la primer cosa de papel que veo, una revista, la enrollo y con fuerza golpeo al maldito bicho con ella, contemplo un segundo al animal sin vida, me levanto con la revista aun enrollada en mi mano derecha, me dirijo a mi patio, camino un par de pasos en el jardín, levanto la revista aun enrollada, y con un movimiento rápido de mi mano quito al molesto bicho del papel, sin mas teatro vuelvo a entrar en mi casa. El resto del día transcurre sin novedad, la misma rutina de siempre.
Al día siguiente, como todos los días realiza su rutina, a la cual esta tan acostumbrada y de cierto modo orgullosa de que nada la altere, de pronto, fugaz como un relámpago, cruza por su mente la idea de que algo esta mal, inconscientemente gira su cabeza buscando algo con la cabeza, sus pupilas se dilataron a una alarmante velocidad, sus neuronas se esforzaban por encontrar la fuente de aquel fugaz pero alarmante pensamiento; rememoraba cada segundo del día pero no encontraba la falla, se esforzó por rememorar el día anterior pero el resultado fue el mismo; del mismo desconocido lugar de donde vino el primer pensamiento, llego a su cerebro la respuesta, al parecer no recordaba haber hecho su cama esa mañana, es mas, no recordaba haberse levantado ni mucho menos haberse acostado la noche anterior; apenas la idea broto en su cabeza la desecho con la misma fluidez con la que apareció, mientras su cerebro cumplía aquella tarea, su mente dibujaba una infantil sonrisa en su humor, este a su vez, tenso los músculos necesarios para plasmar en su rostro el buen humor que sentía, en toda esa mañana esa sonrisa adorno su rostro sin irse ni por un segundo, en la tarde, se dispuso a realizar una tarea que llevaba posponiendo desde hacia días, armada con varios productos de limpieza, así como cepillos, guantes de hule, insecticidas casi tan variados como especies de insectos existen y una mascarilla para proteger sus fosas; durante mas de una hora se dedico a limpiar a fondo su sanitario, dejando cada azulejo mas limpio que uno nuevo, cuando finalmente considero no podia dejar mas limpio comenzó a guardar todos sus utensilios.
Ya estaba guardando los últimos utensilios cuando, de pronto y por pura casualidad vio por el rabillo del ojo algo que le revolvió el estomago, caminando por la pared del baño, en la esquina mas alejada de ella, iban una cucaracha y una mosca, la mujer con el sigilo de un gato, se acerco a esas pequeñas plagas con un potente insecticida en su mano izquierda; cuando estuvo a cierta distancia, aplico la mortífera sustancia sobre los diminutos seres, bastante satisfecha se volteo rumbo al cesto donde guardo los otros utensilios , pero, estando a unos pasos de salir, vio mas asquerosos bichos reptando por las paredes, esta vez salieron de esquinas opuestas, un ciempiés salió de un lado, mientras que del otro un milpiés paseaba tranquilo, el primero al ver al milpiés adopto una posición de ataque, intentando no ser detectado por su presa, la mujer no vio este curioso espectáculo pues salió corriendo hacia su cocina, mientras luchaba por no llorar y vomitar al mismo tiempo, estaba por regresar al baño con todo lo necesario para hacer una bomba química, todos los insecticidas habidos y por haber yacían entre sus brazos, cuando un ruido la detuvo, sin ninguna duda, eso que escuchaba eran los cantos de decenas, sino cientos de grillos, en armonía con la misma cantidad de cigarras, aquello fue demasiado para ella, arrojo todo lo que llevaba entre sus brazos, para inmediatamente despues salir corriendo, estaba abriendo la puerta de su casa con tanta fuerza que por poco arranca las bisagras del marco de la misma, no habia dado ni dos pasos cuando se detuvo tan abruptamente como habia empezado a correr, lo que veian sus ojos simplemente le helo la sangre, reptando hacia ella, atraidos hacia ella como si fuese un dulce olvidado por algun descuidado niño, vio un autentico ejercito de bichos, dificilmente podia distinguir cada especie, aunque tampoco era su deseo saber si veia a todas las especies existentes, habia hormigas, cucarachas, saltamontes, cochinillas, chinches, escarabajos, milpies, ciempies, ademas de que por los aires tambien aparecio un enjambre tan numeroso que tapaba el sol, habia abejas, abejorros, moscas, avispas, incluso mariposas y polillas, en pocas palabras no habia forma de saber cuantas especies invadian la casa.
En cuanto su mente pudo enlazar dos pensamientos coherentes entre si, se llevo las manos a la boca, intentando ahogar un llanto histérico que se apoderaba de ella, sin ningún indicio de parar en un futuro inmediato. La mujer estaba tan paralizada de terror, que cuando sintió a uno de esos seres paseando por su brazo era demasiado tarde, las hordas de insectos se peleaban entre si por un lugar por donde trepar, los bichos voladores igualmente se peleaban por un lugar donde aterrizar, el terror, asco e impotencia llegaron a un nivel intolerable, como pudo junto todo el aire que sus pulmones fueron capaces de soportar, fue entonces que grito con todas sus fuerzas, en ese momento los insectos empezaron a entrar en su boca, de pronto...
—¡Señorita despierte! Un policía sacudía a la mujer inconsciente.
—¿Q-que p-pas-paso? ¿D-donde, donde est-estoy? La pobre mujer estaba tan perpleja que solo alcanzaba a balbucear las palabras.
—Sus vecinos nos llamaron, decían que se escuchaban gritos inhumanos-. Le respondió el policía.
—La llevaremos a una evaluacion psiquiatrica. Concluyo el oficial.
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Relatos de terror
KorkuBreves relatos en los cuales usted lector, se sumergirá en lo profundo de la mente humana, y contemplara los horrores que esta es capaz de crear. Al final, se incluye una breve descripcion de la enfermedad tema de cada relato