La distancia necesaria
1
—¿Entonces ya no son novios? —preguntó Yesung con su voz de alcohólico, intentando bajo todos los medios verle la expresión a Hyukjae.
—¡Somos novios! Me corrió de su casa, no de su vida —respondió el rubio bastante indignado, apretando la botella de ron que habían comprado entre los dos.
Se encontraban en el bar de Amber. Faltaban minutos para la media noche y ellos ya estaban bastante pasados de copas. Decidieron no acompañar la botella con nada y tomársela a shots para que valiera la pena.
Luego de calentar sus gargantas con tanto alcohol, la conversación entre los dos parecía más fluida.
Amber iba y venía detrás de la barra, preparando los tragos que sus clientes le pedían, pero manteniendo siempre un ojo sobre sus amigos. Heechul, quien también se hallaba en el bar esa noche, platicaba con un chico al azar y, de igual forma, tenía la mirada pegada sobre ellos.
Ni Yesung ni Hyukjae les habían dicho nada de lo ocurrido, pues llegaron al local, de por sí, ya borrachos. Sin embargo, tanto Heechul como Amber sabían que no era ni medio normal ver a Hyukjae bebiendo entre semana a esas horas de la noche, ya no. Ahora tenía responsabilidades, y la última vez que se enteraron, él prefería pasar tiempo con su novio que irse de rumba.
—¿Puedo encenderlo? —Yesung le preguntó a Amber en cuanto tuvo oportunidad, mostrándole un cigarro hecho con un retazo de hoja de algún libro viejo. Ella aprovechó entonces la oportunidad para hacerle una discreta seña a Heechul indicándole que se acercara.
—Depende.
—¿De qué?
—¿Cuántos has fumado ya hoy?
—¿Qué te hace pensar que me he estado drogando durante todo el día? ¡Cielos!
Amber entornó los ojos, como si el aspecto de ambos no fuera ya muy delator. Le echó una mirada a Hyukjae, quien mantenía la cara enterrada en la barra y el puño cerrado a hierro en el cuello de la botella.
—Si lo dices por él, solo está borracho —mintió Yesung.
—Ambos apestan a hierba.
—Bueno ¿y?
—¿Qué sucedió, Yesung? —mientras ella preguntaba eso, Heechul movía el hombro de Hyukjae, intentando hacerlo reaccionar.
—¿Sabes qué? —preguntó fingiendo molestia. Se levantó de la silla y se aferró a la barra para no caer, pues el tambaleo de su cuerpo pudo mandarlo sin problemas al suelo —fumaré afuera. Cuiden a Hyuk ¿sí?
Yesung salió del bar luciendo tan miserable como meses atrás.
Antes de que Hyukjae conociera a Donghae, su vida estaba un poco más descarrilada, pero ni siquiera entonces bebía tanto, porque sabía el estado desagradable en el que su ex novio podía llegar a caer, y prefería mantenerse sobrio para cuidarlo.
—Hyuk... —Heechul volvió a moverlo, y solo cuando intentó quitarle la botella de ron, el rubio levantó la cabeza.
—¿Cómo llegué aquí? —musitó, perdido —Yesung... ¿me quedé dormido?
—Él salió a fumar. Pasa de la media noche, no es tan tarde, no te preocupes —le respondió acariciándole la espalda.
Amber salió de detrás de la barra y se sentó en el banquillo que antes Yesung ocupaba. Se fijó bien en el rostro desolado de su amigo, encontrando en el proceso rastros de profunda tristeza y amargura. Le acarició el cabello que caía sobre su frente y atoró algunos mechones detrás de su oreja. Hyukjae sonrió ante las caricias, recordando lo que Yesung le dijo esa mañana: había mucha gente en el mundo que aún lo quería.
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•Aquello que pudimos ser [Eunhae]•
FanfictionÉsta es la historia que va acerca del peso de la perfección, de una sonrisa atrevida, de un chico insolente y otro harto de su vida. Ésta es la historia de poemas que no se recitan; de palabras clave que se ahogan en la garganta antes de haber sido...