BORN FOR THIS | Ataque a los titanes

Capítulo 10: Se Escucha Un Latido

Armin, Mikasa, Connie, Jean y Ayumi se reunieron en una de las salas del edificio junto al resto de sus compañeros. Al parecer, allí estaban seguros por el momento, así que se detuvieron para pensar en un plan. El rubio fue el primero en pensar algo, pero necesitaban armas para realizarlo, así que Jean, Marco y algunos de sus compañeros, fueron a buscarlas en otra sala. Mientras tanto, el resto les esperó y Ayumi se sentó junto a Connie, Reiner, Berthold y Annie, aunque la rubia notó que estos tres últimos estaban algo incómodos.

—No os preocupéis —les dijo Connie ya que al parecer se había dado cuenta al igual que Ayumi de que sus compañeros estaban algo preocupados—. Este titán es más fuerte de lo normal —dijo refiriéndose al titán anormal que atacaba a los otros titanes—. No podrán tomar el edificio mientras ande desbocado por ahí fuera.

—¿Exactamente, cuanto sabemos acerca de ese titán? —preguntó Reiner.

—No mucho —le respondió Ayumi—. Sólo sabemos que ignora a los humanos y que ataca a los otros titanes.

—Tienes razón, no es mucho —afirmó el rubio.

—Ah... Lo discutiremos cuando estemos a salvo —dijo Connie.

—Cierto, Connie —le dijo Reiner—. Lo primero es salir vivos de aquí.

En ese momento, Jean, Marco y algunos de sus compañeros que fueron a buscar las armas que guardaba la policía militar en ese edificio, aparecieron cargados con varias cajas.

—¡Ya las tenemos! —exclamó Jean—. ¡Son armas de la policía militar! Estaban cubiertas de polvo.

Todos se levantaron y fueron a ayudar a sus compañeros. Cogieron las cajas y empezaron a sacar los rifles que contenían para limpiarlos y comprobar que funcionaran.
Seguidamente, se reunieron alrededor de Armin para oír su plan.

—¿Nos bastará con tan solo unas balas de rifle? —preguntó Jean no muy convencido mientras cargaba uno de los rifles—. ¿Servirán de algo estas armas contra los titanes para derrotarlos?

—Siempre serán mejor que no hacer nada —le respondió Armin—. Aunque haya ocho titanes de clase 3 y 4 a bajo en el depósito de gas, no es muy descabellado que podamos cegarles con nuestra potencia de fuego. Primero, usaremos nuestro ascensor para bajar un gran número de nosotros hasta la cámara central. Luego, concentraremos todo nuestro fuego en la cara de los titanes al unísono. Les cegaremos. Y entonces, llegará el momento clave que lo decidirá todo. Ocho de nosotros ocultos en las vigas del techo caerán en picado para atacar sus puntos débiles aprovechando que están ciegos. En otras palabras, si seguimos el plan, nos lo jugaremos todo a un solo ataque desesperado. Nuestras vidas dependerán de ese ataque. La idea es que ocho de nosotros maten a los ocho titanes de forma simultánea. Y obviamente esos ocho tienen que ser los más capacitados física y militarmente. Por lo tanto, Ayumi, Mikasa, Sasha, Reiner, Annie, Berthold, Jean y Connie, tendréis que ser los ocho que se encargarán de matar a los titanes. Cargareis con el peso de las vidas de todos. Lo siento.

—No hay problema —le dijo Reiner orgulloso.

—Podremos hacerlo —le apoyó Ayumi.

—Si uno de nosotros falla, estaremos todos muertos —comentó Annie—. El riesgo es el mismo.

—Pero yo no soy ningún experto —recalcó Armin—. ¿Seguro que mi plan es la mejor opción que tenemos?

—Es nuestra única opción —le respondió Marco—. No tenemos tiempo y es el único plan que se nos ha ocurrido. Ahora solo queda entregarnos a fondo.

—Tranquilo, confía en ti mismo —le dijo Mikasa al rubio para tratar de tranquilizarlo—. Siempre has tenido la habilidad de hayar soluciones. Esa habilidad nos salvó a Eren y a mí en el pasado.