???:Mañana empieza... No puedo esperar.
He aquí, un rubio descansando en sus preciosos laureles, en sus nubes de algodón, sin ninguna preocupación, simplemente reposando su pequeño cuerpo sobre su colchón.
Mmm, y aquí podemos ver la entrada de un enemigo, aquel que destruirá lo que el rubio más aprecia, su sueño. Un irritante pi entra en escena, un demonio en forma de reloj, no espera tenemos a algo mucho peor es un molestoso despertador.
Su ruido irritante al rubio despertó, mas el más delirante a su enemigo aplastó.
Y así tres horas pasaron y un ojiazul por fin de su sueño se libró, tranquilamente, su reloj revisó y descubrió lo más atroz, tres horas de retraso el condenado acumuló y ahora mismo lo mataría el más grande dragón.
Corriendo con gran apuro el rubio se alistó era el día de la entrega de su nuevo perdedor, en un momento el llegó a la escena de una película de terror, pues un aura maligna allí se encontró, pues del gran dragón ya su ira explotó.
Dragón: ¡¡¡KITSUNE, LLEGAS TRES HORAS TARDE!!!, ¡Te dije que hoy era el día de ella incorporación de un nuevo miembro y tú qué haces, llegar retrasado, en su primer día además eso no es lo peor, si no que me hiciste perder el tiempo y el nuevo miembro se rehusó a formar parte de tu equipo!, No lo puedo creer, realmente eres un inconsciente, mereces la muerte en este instante.
Dragón ni siquiera sabía que decir, estaba tan enojado que la voz le temblaba y las palabras no podían salir de su boca, caminaba en círculos mientras se agarraba la cabeza, era claro a la vista de cualquiera que dragón estaba a punto de explotar. La intensión asesina se alcanzaba a sentir en todo el bosque y parte de la aldea. Realmente parecía ser el fin del rubio.
Pero, oh sorpresa, dragón a hablar nuevamente.
Dragón: Kitsune, por hoy no recibirás tu castigo- esto al parecer dragón lo decía con un tono de frustración en su voz, además de estar agarrándose fuertemente los brazos, al parecer conteniendose de lanzar a volar al rubio de un puñetazo- a lo que me refiero es que se te asigno una misión-Esto último dragón lo dijo más serio.-
El rubio al escuchar esas gloriosas palabras formó una gran sonrisa, nunca había estado tan agradecido en salir a una misión, pero, espera un momento por qué le habían dado una misión fuera de la aldea, si su equipo recién se había formado, y recientemente se había convertido en capitán, esto era muy extraño para el rubio.
Dragón: su misión consistirá en reconocimiento, nada más, alejense de las batallas, sólo tendrán que informar, le daré a su capitán los detalles, y como por su culpa el nuevo miembro no se les pudo unir tendrán que ir sólo ustedes tres, ya que no hay más anbus disponibles por el momento.
Así que era eso, mandaban a un equipo novato por falta de personal, el rubio entendió la situación y simplemente estiró la mano para recibir un pergamino con toda la información, lo leyó un momento y lo quemó, dejando solo un montón de ceniza dónde habían estado los anbus.
Ya fuera de la aldea los tres anbus se encontraban saltando sobre las ramas de algunos árboles, con rumbo desconocido para los dos subornidados.
En el pergamino recibido por el rubio decía expresamente que no dijera nada sobre la misión a los otros dos, además de en lo posible mantener los detalles al mínimo.
Sarū: taicho, ya llevamos casi cinco horas de viaje,sin descanso, podemos parar, además ya empieza a oscurecer, deberíamos hacer un campamento.
El rubio por fin había salido de sus pensamientos, se la había pasado imaginando, cómo se podría realizar la misión sin tener que sobre esforzarse, y además hacerla en el menor tiempo posible, pero cuando Sarū habló, recién se percató de que era verdad, habían estado como cinco horas sin descanso, además de acercarse el alba.
Kitsune: gōmen, no me dí cuenta, yosh, vamos a buscar un lugar donde acampar y descansar.
Los tres anbus empezaron a armar un pequeño campamento en una cueva, al fondo de un claro, un lugar perfecto. Una vez el campamento armado, y la fogata prendida, se sentaron alrededor de la fogata y Sarū empezó a hablar.
Sarū: eto, taicho, tengo una duda con respecto a la misión, y es: ¿¿¡¡¡ QUÉ ES LA MISIÓN!!!??.
El rubio simplemente suspiró y empezó a relatar una muy mínima parte de la misión.
Kitsune: eto, nuestra misión es la siguiente, al parecer, en la aldea de la niebla está a punto de ocurrir algo, no sabemos qué es, sólo nos encomendaron investigar el que podría pasar en Kiri, nada más.
Sarū: entonces ir, investigar, y salir, fácil, por la seriedad de dragón-sama, pensé que era algo muchísimo mas grande.
El Hyuga al parecer se relajó y soltó un suspiro, claramente había estado tenso e intranquilo todo el camino hasta el claro. Mientras que el otro anbu simplemente se quedaba a escuchar con mucha atención todo lo que sus compañeros decían, de hecho, ahora caigo en que el anbu no ha dicho palabra desde la presentación de miembros. Esto se debe a que este personaje es muy silencioso y respetuoso, mucho más que el japonés promedio.
Kitsune: mmmm, mañana partiremos a primera hora, así que vayan a dormir, yo haré guardia.
Remūru: taicho, dejé que haga hoy la guardia, usted a pesar de ser nuestro capitán sigue siendo un niño y necesita descansar al igual que Sarū.
Kitsune: ok, me salvaste, la verdad no quería hacerla, ahhh, me quitas un gran peso de encima, gracias me salvaste.
En ese instante el rubio se acostó, se acomodó y se durmió, los otros dos se quedaron casi con la boca abierta, habían imaginado que su capitán se restiría un poco más a la idea. Bueno al fin y al cabo no era de sorprenderse, su capitán era raro, era muy raro.