I told the stars about you~ 🥀 (Ray x ___) One Shots [The promised Neverland]

🌠Cliché🌠

Estaba sentada en mi banca, ocultando mi cara pálida entre mis brazos mientras me acostaba en la madera de esta misma frente a mí.

Hacía frío, el invierno estaba amenazando con llegar, congelando mi piel. Mi largo cabello cubriendo toda mi espalda y hombros, hacia que lograra protegerme del frío.

Estaba tan aburrida, esperando a que todos llegaran al salón. Yo solo me perdía en mis pensamientos mientras escuchaba el tick tack del reloj una y otra vez, pero era cómo si el tiempo no pasara para mí. 

Lo vi pasar una vez más por el pasillo, junto a sus amigos; Emma y Norman. 

Se dirigían a su clase y pasaron con velocidad, pero para mí, fue un espectáculo. Ver su cabello negro y su mirada sumergida en su libro, sabiendo que jamás volvería a verme de nuevo. No me importaba mucho, yo seguía amándolo desde lejos. 

No podía evitar recordar nuestra historia cada que en mi mirada él gobernaba.

Era mi primer día en la escuela, estaba tan perdida en el gran instituto. No tenía a nadie, no tenía amigos ahí. Todos eran extraños para mí. Solo trataba de buscar mi salón, equivocándome cada que creía haberlo encontrado. 

Entré a una de aquellas aulas, con la esperanza de que fuera la mía. Las indicaciones en la escuela eran realmente malas como para que yo las comprendiera. 

Estaba vacío, solo había alguien ahí. Era un azabache, con media cara cubierta por su flequillo y totalmente centrado en un libro. Él volteó a verme y sentí como si el mundo se detuviera en ese preciso momento. Sus orbes parecían un cielo estrellado, solo quería perderme en ellos; eran tan hermosos que los quería ver todo el día.

Él notó que estaba totalmente perdida, que no sabía cuál era mi rumbo. Entonces, dejó su libro en su banca y se levantó, quedando frente a mí. Yo solo quise desaparecer en ese momento.

Antes pensaba que el amor a primera vista no existía, pero yo ya me estaba volviendo loca por él en ese momento. No quería enamorarme, pero ya había caído por los encantos de ese azabache. Por sus ojitos soñadores, sentía que moría.

"Hey" fue lo que él me dijo y yo le contesté un "Hola". 

Tenía tantas ganas de decirle, "¿Cuál es tu nombre? Quiero saberlo todo de ti.", Aunque al final, mi timidez hizo que me detuviera en aquel diminuto y  tímido saludo.

Solo pude volver a ver a esos hermosos ojos, que ahora eran acompañados de una sonrisa que detenía el tiempo a mi alrededor. Sentí que todo era precioso en ese momento, sabía que me había enamorado, se sentía como un torbellino de emociones, el cuál ya no sería capaz de controlar.

Él fue tan amable conmigo, mostrándome la escuela, guiándome por toda esta y finalmente llevándome hasta donde estaba mi salón. Desde ese día no logré dejar de pensar en él.