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—¿Qué sucedió Cali?— me pregunta preocupad Simón.

Llegamos al hospital hace poco, Amira le marco a medio mundo junto a la ambulancia, mis hijos se quedaron en la guardería, ellos están bien junto con mi amiga la casa estaba lejos como para recibir el impacto, yo estaba en la sala de emergencia por varios cortes y pues Hache estaba en el quirófano.

—Solo salí y Hache se apareció de la nada, apenas le había quitado el seguro al coche y el carro estallo—sentenció.

—y ¿sabes a donde había ido?— niego— ¿Cómo sabía que tu carro iría a explotar?—dice mas para si mismo que preguntando.

—¡Mierda!—exclamo al tratar de acomodarme en la camilla, resulta que un vidrio se clavo en mi hombro, uno en mi ceja, no eran heridas tan graves como las de Hache.

—Se suspendió la reunión hasta que Hache y tú estén mejor—

—Ni siquiera me había preocupado por eso— dije sin vergüenza, no lo había pensado después que MI PROPIO AUTO explotara en mis narices, el trabajo era mi ultima prioridad en este momento.

—Bueno, eso lo veremos luego, ¿Cómo te sientes?— pregunto con un rostro que denotaba preocupación.

—Bien, me duele el cuerpo pero es mas por la caída del cuerpo de Hache sobre mi—tomo mi mano acariciándola con su pulgar.

—Cuando me llamo Amira sentí que te perdía, eres como mi hermana y no se que hubiera sido de mí—su voz se quiebra— temí por los niños así como por ti—siento mis ojos llorosos pero no cae ni una lagrima, decido acunar su rostro entre mis manos acercándolo a mi.

—Estoy aquí, puedes sentirme y tocarme, y aun así que no este, siempre te acompañare—finalizo dándole un beso en la mejilla, él hace lo mismo pero se para y me abraza con cuidado.

—Te amo— susurra.

Él amor que nosotros nos tenemos es de hermanos, él estuvo cuando necesitaba ayuda desde que lo conozco congeniamos y teníamos química, pero su amor hacia a mi no solo era de amigos, él sentía mas allá de eso, y con él dolor de mi alma le tuve que decir que no, no reacciono como yo lo esperaba, se rio y dijo que se lo esperaba, después de eso me invito a comer a los niños y a mi, pensé que se alejaría y no lo volvería a ver.

Este momento especial fue interrumpido por una enfermera.

—Disculpen que los interrumpa, pero el joven que vino con usted—me señalo— ya pueden visitarlo ¿quiere que la lleve con él?—asiento.

—Ya regreso—le aviso a Simón abrazándolo por ultima vez.

—No te preocupes, iré a buscar a los niños y Amira— me avisa dando un beso a mi mejilla de despedida.

Ambos salimos al mismo tiempo, hay sucesos que han quedado en mi cabeza, conozco mucho acerca de cada cartel mexicano, colombiano y hace dos años tuvimos el primer contacto con el italiano, por esa razón la ADE existe—Abogados De Elite—, nosotros somos una división del gobierno para hacer tratos con capos importantes.

Soy abogada pero cada uno que se encuentra en las instalaciones de la central sabe defenderse, sabemos manejar armas y todo lo que sea posible para defenderse, mucha gente cree que no existimos, pero somos algo así como los Hombres de Negro, solo agentes del gobierno saben lo que hacemos con los narcos y en muchos casos somos intermediarios de ellos con la policía.

Se quien es Hades Galiano, sus hermanos son como él , a excepción del que asesinaron, su historial estaba limpio; Hades es el que maneja todas las rutas en el continente americano y europeo. ¿Qué hacen italianos en México? Nadie lo sabe. Solo espero que todo acabe rápido.

El Ángel De La MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora