¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
♧𝑙𝑎 𝑝𝑎𝑟𝑡𝑖𝑑𝑎 𝑒𝑠𝑡𝑎́ 𝑝𝑜𝑟 𝑖𝑛𝑖𝑐𝑖𝑎𝑟..♧
-Escalera de color.. cinco hermosas cartas de corazones- Sonrío de lado-.
Todos tiraron sus cartas a la mesa, maldiciendo con malhumor, menos uno el cual carraspeó cuando se percató, que le estaban acercando las fichas y algún que otro billete apostado al supuesto ganador, llamando la atención de todos en la mesa.
-Todavía no he mostrado mi juego- Recordó con arrogancia-.
-¿Acaso puedes superar mi juego...Kim?- Dijo riendo incrédulo, provocando risas en sus acompañantes que lo respaldaban-.
Se aclaró la garganta.
-Diez, Jota, Reina, Rey y un As todos de diamante... una escalera real- Los que presenciaban la partida soltaron un jadeo, algunos acercándose a verificar la mano- Es una lástima Seungri, pero todo es mío-.
Suelta una carcajada que le causa escalofríos a más de uno en la habitación, mirando a Seungri con pena completamente fingida.
-Mierda, a quien engaño solo es una lástima para tu billetera ¿no?- Se burló, riendo al ver como Seungri apretaba los puños con furia-.
Kim Taehyung, ese soy yo, sucesor al Imperio Kim la mafia más grande de Corea del Sur. Con mis 25 años solo me hago cargo del comercio de sustancias tóxicas, que engloba la fabricación, distribución, venta, control de mercados y reciclaje de estupefacientes, nada muy complicado.
El póker es solo un pasatiempo es unos de mis hobbys, además de juguetear con mi novio.
El cual está entrando por la puerta en este mismo instante.
-Hola amor- Se agachó a besarme y lo agarré de la cintura sentándolo en mi regazo, acariciando sus muslos con cariño-.
-Hola nene- Susurré, besando tras su oreja-.
-Este no es un lugar para una prostituta como tú, Jeon- La voz de Seungri me hizo rodar los ojos-.
-¿Entonces que hace tu madre aquí Choi?- Dijo con una de sus hermosas y perfiladas cejas alzada-.
Si, lo saqué de un prostíbulo, pero en teoría nunca fue una prostituta. Su papá lo entregó para saldar una gigantesca deuda y subastaron su virginidad al mejor postor ¿que quien fue? fue Kim Taehyung y no me arrepiento. Aunque al principio mi plan era devolverlo, no pude evitar enamorarme de esos ojitos redonditos o esos labios de cereza con los que se come mi pene y ni hablar de ese culo que se carga o esa cinturita que cabe perfectamente en mis dos manos. Entro al prostíbulo como Jeon Jungkook y salió como Kim Jungkook el príncipe del imperio Kim, mi príncipe, mi bebé, mi bombón, mi chiquito... ¡Contrólate Kim Taehyung! se ordenó mentalmente el pelinegro.
-No quiero volver a escuchar que te refieras de esa forma a mi yerno- Dijo con altanería, el canoso de mi papá-.
El es el Rey del Imperio y si Jungkook es el Príncipe suena raro, pero es porque no tengo ningún título... mi papá no me quiere dar uno. Yo seré el futuro Rey, aunque no me sorprendería que lo fuera Jungkook mi papá lo quiere más a él que a mi.