UNA HISTORIA MÁS 💛FREE Y SHU❤️

YANDERE

Era un chico guapo, todo un papucho de su salón, con buenas calificaciones y siempre recibiendo cartas de chicas interesadas en él, sabia cómo tratar con ella para no tener una relación, puesto que ninguna le interesaba.

Guiñaba el ojo para todas sus compañeras y amigas, todas suspirando por él.

Camino a casa iba acompañado por dos chicas una en cada brazo, vivían cerca de él y podía acompañarlas para que no les pasará nada malo, quién sabe algún asesino suelto por las calles.

No obstante alguien los seguía dos calles atrás, se mantenía escondido tras una casa, sus ojos mostraban tanto odio como amor, odio por las "zorras" que lo acompañaban y amor por ese chico tan guapo que era su crush.

Soltó un largo suspiro y cerro los ojos, se recargo en la pared, abrazo una foto fuertemente contra su pecho, después se dispuso a seguirlos de nuevo, llegó la noche y ya sabía dónde vivían las dos "enemigas", también sabía dónde vivía su amor, de tanto seguirlo sabía todos sus horarios.

Se levantó temprano para cepillarse su cabello, tenía que llegar puntual puesto que era el galán de el colegio, las chicas que acompaño a casa eran sus pretendientes principales, eran lindas chicas con grandes "proporciones" y su vista estaba en él.

Estaba por ponerse su camisa cuando vio que alguien lo veía desde un poste, se escondió rápido al notar la presencia, si, no estaba loco sentía que alguien lo seguía y hasta revisaba su basura, que loco, omitió lo visto y se acabó de alistar para irse al colegio.

Al estar caminando sentía lo mismo, volteo a ver y no vio a nadie, apresuró el paso y llegó al colegio, de nuevo los halagos y saludos para el chico más guapo, ya estaba acostumbrado, le encantaba ser el centro de atención.

Sus dos pretendientes llegaron de nuevo junto a él y se las llevo dentro del salón.

De nuevo tomando la clase sentía esa mirada, volteo su mirada y vio a un peculiar chico que escribía algo nervioso, ese albino que le interesó al primer vistazo, sonrió y siguió su trabajo, debió ser eso, un chico común y corriente que se enamoró de él como todos en el salón

El almuerzo llegó y lo busco con la mirada para ver si estaba ahí, ¡Lo encontró! Estaban casi unas bancas tras de el, tomando un juguito de caja de manzana, ahora que se daba cuenta nunca lo había notado.

Era un chico albino, con un suéter blanco esponjoso que cubría todo su brazo hasta sus manos y más abajo de su cintura, un pantalón de mezclilla que combinaba con sus botas, se veía tan lindo con ese suéter más grande que él, tal vez lo invitaría a salir algún día.

Mientras tanto el albino pensaba en como acabar con sus "enemigas" mientras tomaba su jugo, hoy en este día saldrían tarde y podía ser el momento perfecto para acabar con ellas si se pegaban de nuevo a su rubio encantador.

Dejo su jugo y se fue sin probar bocado, tomo su mochila, se metió al baño de chicos y se encerró en uno, su respiración se volvió agitada mientras abría su mochila y sacaba una foto de ese rubio que correspondía al nombre de Free.

Dió un beso a la foto mientras se sonrojaba y sacaba pequeños gemidos, reviso la cámara que traia y vio cada foto que tomo de Free.

Su espalda resbaló por la pared y abrazaba la foto.

¿?: ~Free~– su voz se escuchó agitada pero feliz– Acabaré con esas chicas, como que me llamo Kurenai Shu

El rubio ya salía del colegio con las dos chicas en brazos, la calle no tenía algunas luces y estaba oscuro, las chicas temblaron por el escalofrío que recorrió su cuerpo, de pronto escucharon como algún objeto rozaba la pared, como si una tijera fuera resguñando esa pared.