Psicosis (Primera Parte)

Capítulo 6🖤

No he visto a David en todo el día, pero supongo que debe estar con la estúpida de Cassandra y la idea no me agrada mucho.

Pero antes de pasarme el día entero pensando en eso mejor llamo a la única persona que puede hacerme sentir bien en estos momentos...

1,2,3 intento

—Aló

—¿Deborah?

—Sabrina, hola - la verdad sí que parece emocionada—hace semanas que no sé nada de ti.

—Estaba un poco ocupada—miento—crees que nos podamos ver.

—Claro, te espero donde siempre.

Finaliza la llamada y me dirijo hacia la puerta, salgo y comienzo a caminar, el aire puro impacta sobre mi rostro y me hace pensar en muchas cosas (todas relacionadas con David) es increíble como han cambiado todo en estos dos años.

Siento que no es el mismo, y también siento que yo tampoco, lo necesito tanto que creí que ya es algo que va más allá de lo normal.

Camino, cada vez más rápido hasta que llego a mi destino, y ahí está Deborah, parada en la entrada de nuestro lugar secreto, nuestra cabaña, nuestro escondite, como diría Flor Salvador, nuestro Boulevard de los sueños rotos.

—Hola Brujita—siempre me llama así por las caricaturas de Sabrina la Brujita que veíamos de niñas

—Hola

—Y esa cara, no te ves nada bien, creo que es peor de lo que me imaginaba.

—Ni que lo digas—me pierdo mirando a la nada.

—Ven pasa, hablemos con calma.—pone su mano en mi espalda.

Entramos en la cabaña, y nos sentamos en el suelo, como en los viejos tiempos

—Mira - me muestra una botella de Jack Daniel's—pensé que sería útil

—Whisky¿en serio? - sonrió

—Si, ya sé que eres más de tequila, pero fue lo que pude robar del bar de papá.

—No importa—le quito la botella y doy un largo trago que quema.

—Entonces dime que te pasa.—se ve realmente preocupada por mí.

Por eso es mi mejor amiga

—David volvió—digo con dificultad

—Oh por Dios no lo puedo creer— Sí, Deborah lo sabe todo, porque una vez nos vio a David y a mi besándonos en las caballerizas de nuestros abuelos

—Sip —otro trago

—¿Y cómo estás?— me quita la botella y bebe, luego la pone a su lado

—Mal David tiene novia—solo de recordar me pongo de los nervios.

—¡En serio!—abre tanto los ojos que creí que se le iban a salir

—Mjm

—Mira Brujita esto ya de por sí está muy mal, creo que el hecho de que David tenga novia es lo mejor que pudo pasar—hace una pausa y bebe— ustedes son hermanos, un lazo muy fuerte, la hermandad es algo irrompible, y sabes que la de ustedes es doble.

—Lo sé, pero...

—Pero nada Sabrina —me interrumpe —son hermanos ya está, o quieres que te diga la verdadera palabra.

—No la digas por favor

—G E M E L O S

—Te dije que no lo dijeras—grito

—Lo necesitabas, a veces se te olvida

Me pongo rápido de pie, comienzo a agitarme, tengo ganas de romperlo todo, golpear a alguien

—Sabrina cálmate—me sostiene— mirame, inala, exala—hago lo que me ordena— Así, relájate.

_Pensé que me ibas a entender, eres mi mejor amiga, más que eso.

—Y te entiendo perfectamente, por eso voy a darte lo que necesitas, como siempre—me muestra un sobresito transparente con patillas- toma, te vas a relajar

—¿Qué son?— pregunto extrañada, las otras veces que nos hemos drogado no había visto nada así, son de colores.

—Metanfetaminas —se introduce una roja en la boca y luego da un trago a la botella de Whisky.

Yo hago lo mismo, de verdad lo necesito y en cuestiones de segundos me siento diferente, eufórica, feliz, sin ningún tipo de conexión con la vida real.

Deborah y yo comenzamos a saltar, a bailar hasta que nos tropezamos, y ella cae encima de mí, me mira fijamente y sin esperarlo me besa.

Es un poco extraño pues a pesar de las drogas y el alcohol nunca he besado a una chica, pero se siente bien, delicioso, perfecta mezcla de fresa y wisky.

Es una sensación nueva pero me gusta.

—¿Y bien? —me dice riéndose

—Raro, pero me gusta—sonrío—Oye una duda, ¿desde cuándo te gustan las chicas?

—Digamos que me gusta de todo—bebe de de la botella—soy una chica libre que disfruta de su sexualidad y los placeres de la vida—me guiña el ojo —que más da si es chica o chico y  como tú eres mi mejor amiga te tengo que consolar.

—Eres terrible Deborah Rebeca Howard

—Tú también prima, tú también.

Nota: no me maten ok!😔 También estoy en shock igual que ustedes.

Estoy súper inspirada y emocionada con esta historia que cada día se pone más buena😏🌚. Los amo infinitamente💘✨