Capítulo 39

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Kurona apretó su agarre en yukina cortando con facilidad los músculos de la chica haciéndola gritar.

¤ yukina!

°• hasta nunca hada.

Cuando estaba por matar a yukina recibe un corte el la cara distrayendola y dándole tiempo suficiente de soltar a la chica.

°• maldito quien anda ahí?!

- que crees que le haces.. a yukina.

¤ hiei?!

La voz y mirada fría de hiei congelo en ambiente, por una parte kuwabara estaba feliz de que salvará a yukina pero por otra lo odiaba por qué él no fue capaz de hacerlo a tiempo además de que ahora hiei tenía en brazos a la chica.

°• otra sabandija, esto no cambia nada, todos morirán... [Que es esto..? Su poder.. va en aumento.. es como si no pudiera controlar su propia energía y está se escapara..]

Se quedó un momento viendo a hiei pero no comprendía lo que estaba pasando su energía estaba muy alterada y era una gran cantidad, no sabía si era a propósito o no podía controlarse pero sentía que en cualquier momento perdería el control de la situación.

¤ gracias al cielo hiei, llegaste en buen momento, para verme derrotar a este espíritu.

- más bien para salvarte el tracero, si algo más le pasará a yukina yo mismo te mataré.

¤ dices eso pero no pudiste salvarla cuando la tomaron de prisionera..-

Kuwabara se dió cuenta tarde de que nunca debió decir eso.. un aura oscura rodeo a hiei, su cabello cubrió sus ojos y se sentía el ambiente a muerte.. alguien iba a morir.

- como dices?

Tanto kurona como kuwabara sintieron su sangre congelar la mirada de hiei era odio, rencor y enfado puro.

- tal vez, sea cierto que no le ayude porque estaba comprometido con hacerlo.. pero no tienes derecho a decir nada cuando fue tan fácil llevársela como prisionera, dime en dónde estabas tú? Se supone que la protegerias pero no haz hecho nada para hacerlo.

Mientras hablaba el paisaje fue cambiando el cielo se oscureció, las nubes con relámpagos tocaban el suelo causando grandes destrozos por todos lados, las fuentes de agua cerca se volvieron oscuras y de ellas salían burbujas, algunos animales pequeños y espíritus débiles murieron por tal energía.

¤ o-oye hiei, tranquilo, lo importante es que yukina está bien no es así?

- nada está bien.. ya no puedo..

Kurona vio una oportunidad y sabiendo aún que se arriesgaba demasiado atacó a hiei discretamente.

°• [muere]

Sus hilos iban con gran rapidez hacía hiei pero antes de tocarlo el aura que hiei desprendía fue reemplaza por fuego negro incinerando en ataque de kurona; los hilos se quemaban llevando con rapidez la llama hacía la portadora, un poco más y terminaba hecha cenizas pero corto su ataque a tiempo llevándose solo quemaduras en los brazos.

- maldita sea, déjenme terminar de hablar... Eres tan irritante que podría matarte. 

°• no podrías tocarme ni aunque usarás todo tu poder.

- eso crees? Kuwabara aleja a yukina.

Hiei suelta a yukina y la empuja un poco en dirección de kuwabara para después sujetar su katana que estaba en la parte tracera de su cintura y colocarla frente a el.

El ambiente era muy tenso kurona hizo el primer ataque tratando de atravesar a hiei con sus hilos pero son cortados con rapidez además de recibir una cortada en la mejilla todo fue en un milisegundos, ni kuwabara ni yukina pudieron ver a hiei moverse pero la sangre ya bajaba del filo de su katana.

°• maldito.. habilidad de sangre.

Los hilos de sus manos fueron tomando un color carmesí, con eso volvió a atacar a hiei y este trato de cortarlos pero los hilos resistieron el contraataque de hiei logrando lastimarlo en todo el cuerpo creando cortes profundos de los que hiei no pudo defenderse; el último de los hilos mando a volar su katana cayendo cerca de kuwabara que estaba a una distancia segura de la pelea que se estaba desarrollando.
Sin su principal arma hiei cubrió sus manos de fuego negro y plantó ambas manos en el suelo para crear finas líneas de fuego por todo el campo de batalla, se levantó y con su rapidez natural aparece enfrente de kurona dándole un golpe en la cara que la destanteo pero no la mando al suelo ella responde con muchas puntas de telaraña juntas creando una lanza de gran tamaño por un segundo se vio que kurona atravesó a hiei en medio del cuerpo pero solo era una imagen residual que creo la gabardina de hiei; él se encontraba a espaldas de kurona, la pateó en la espalda moviendola de lugar y sacándole sangre, se recompuso del golpe y atacó pero hiei ya no estaba en ese lugar volvió a atacar por la espalda sujetando sus hombros y mandandola unos metros lejos de su lugar antiguo, ya en esa zona la golpeó hasta que volvió a derramar sangre para hacerlo unas cuatro veces más en cuestión de segundos. En el último ataque kurona logra esquivar el golpe de hiei para brindarle seis golpes en torso con toda su fuerza haciéndolo retroceder, con esa apertura creo una gran telaraña a sus espaldas en dónde atrapo a hiei impidiéndole moverse.

°• [Ay.. algo extraño con este espíritu, sus ataques.. pocisiones, velocidad y esa aura.. tengo la sensación de haberlo visto antes.. pero donde?]

A lo lejos apenas visible en un cúmulo de piedras está una persona observando la pelea, kurona logra darse cuenta de su presencia pero al estar tan lejos no sabía de quién se trataba.

°• [no tengo tiempo de pensar debo matarlo ahora]

Con una de sus telarañas enrredo el mango de la katana clavada en la tierra para arrojarla a hiei y atravesarle la cabeza pero hiei logra soltarse y con el antebrazo golpea el costado del filo de su katana para hacerla girar enfrente de él con rapidez asombrosa y sujetarla con la mano para cortar el resto de las telarañas liberandose.

- que empiece el segundo encuentro.

Hiei apoya su mano en la tierra para darse más impulso y cuando estaba frente a kurona este desaparece de su vista para atacar a un costado aunque los hilos de kurona le dijeron dónde iba a atacar no le dió tiempo reaccionar llevándose una herida desde el abdomen hasta la cara, dejando caer mucha sangre.

°• [no puedo perder ante un insignificante espíritu!]

Con sus hilos cierra la herida, para levantar todos los hilos que estaban en el suelo y encerrar a las tres personas en una jaula gigante.

°• no podrán salir de esa jaula. Mueran como ratas!

La jaula se comenzó a cerrar cada vez más, kuwabara saca su espada espíritu pero no podía cortar los hilos que parecían cuchillas afiladas pues si los tocaban en cualquier parte del cuerpo los cortaban incluso comenzaban a cortar secciones del suelo.
Hiei intento hacer lo mismo que kuwabara pero al entrar en contacto su espada con la jaula está se rompe dejando a hiei con el mango de su katana.

Te traeré de vuelta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora