Entierrame

Capítulo1

Desperté de nuevo en la habitación, han pasado 4 semanas desde que llegué aquí, exactamente 28 días, aunque al principio fue difícil contarlos, después de un par me di cuenta que me dan de comer una vez al día, así que ahora se exactamente cuanto tiempo pasa.

Al principio creí que fueron 3 comidas el primer día y que el tiempo se me pasaba muy lento porque tenía miedo y me sentía culpable pero ahora sé que que esos días no fueron tan interminables, por lo menos no tanto como lo son ahora.

Sigo sin saber como pasó, me he cansado de preguntármelo, también deje de preguntarme que es lo que quieren de mi, porque ya lo sé, simplemente me cuesta admitirlo, tengo miedo. 

Por las noches escucho que algunas chicas a mi alrededor lloran, otras gritan, y aunque muchas de ellas sólo se quedan en silencio, al final de la noche agradezco que todas se callen y me dejen pensar mejor.

No estoy segura de porqué nadie habla conmigo, muchas veces intente hablar con el hombre musculoso que entra a dejarme comida pero el simplemente me ignora, supongo que se canso de escucharme rogar que me deje ir. Lo intenté de todas las formas que se me ocurrieron, ofrecerle dinero, amenazarlo, coquetearle y hasta darle lastima al no poder dejar de llorar, aunque claro esta que esa forma no se me dificulto en absoluto y fue la más real, aun así a él no le importo y se fue sin decir una palabra.

Entiendo exactamente que es lo que está pasando pero me sigo preguntando porqué no lo hacen ya, para que esperar tanto, no es que deseé que suceda pero pasar tanto tiempo encerrada me está volviendo loca, y más porque lo único que me acompaña es el miedo y la culpa.

Algunas noches escucho a un par de hombres hablar sobre mí afuera del cuarto, la mayoría del tiempo no entiendo lo que dicen pero escuchar las voces me reconforta. Después me doy cuenta que están planeando que hacer conmigo y me doy lastima, no ha pasado tanto tiempo y ya estoy trastornada, aunque supongo que no le puedo echar toda la culpa a lo que sucede, puede que ya lo estaba un poco antes de que me trajeran aquí.

Todos los días despierto pensando en que ese será el día en que salga de ahí, siempre me lo imagino de forma diferente, una vez me decían que todo era una broma y me sacaban porque no lo había descubierto, en otra el hombre musculoso de la comida se apiadaba de mi y me sacaba, la que más se repite es la de la policía, toda una misión de rescate para chicas secuestradas que terminaba en éxito. Mientras el tiempo pasa la única forma de salir que crea mi mente es la muerte y claro está que mi imaginación no me deja descansar nunca desde que esa idea apareció.

Siempre me gustó la soledad, todos los días trataba de encontrar un ratito a solas para descansar del ajetreo diario pero ahora ya no puedo más.

Mis pensamientos ya no son míos, por lo menos ya no los distingo.

Son una nube de ideas y oraciones que pasan demasiado rápido por lo que no puedo entenderlas, o quizá pasan demasiado lento, aun no lo sé, es una neblina en mi mente que no me deja pensar, descansar o planear. Ahora sólo dejo que los días pasen y espero que lo que me espere no sea tan grave o por lo menos dure poco.