Recuerdo ese día nublado que avisaba una tormenta por el atardecer, ese día en el que vi como tú cabello se hacía cada vez más corto, pasando esas tijeras por ese cabello lacio increíblemente suave de un color negro que reflejaba esa belleza asiática que ya no se veía en estos días.
Recuerdo cómo ví a Sasha y a Hanji ayudándote. Sasha comiendo un rico pan preparado por las manos de su chef favorito, Niccolo. Y a Hanji pensando en voz alta las ideas de cortes para realizar, dando las ideas un tanto extravagantes que te daba miedo que te hiciera.
Al final escogiste un simple corte que de largo... no tenía mucho, pero, resaltaba ese rostro que tanto amaba ver y ya no me arrepiento de haberte mencionado que te lo cortaras antes.Estaba increíblemente anonadado viendo entre la puerta entrecerrada esos dedos delgados, blancos y largos como acomodaban ese cabello perfectamente cortado. Esos instantes en el que me llenaba de júbilo el alma tu risa cálida, dando aires de felicidad que contagiaban a cualquiera que pasara al lado.
Corte donde me dejaba ver con claridad gran parte de tu hermoso cuello.Todo lo que pasaba vagamente por mi mente se fue desvaneciendo hasta que llegó ese viejo amigo de cabellos dorados...
— ¡Hola Eren! Te estaba buscando, ¿dónde estabas?
Interrumpió completamente mis pensamientos, haciendo que yo entrará en razón donde estaba y que estaba haciendo.
— ¿Qué estás viendo? — Preguntó el chico de cabellos dorados como el oro con un tono de alegría y curiosidad.
— ¿M-mande? Solo pasaba por a...— Fue interrumpido mientras contestaba la pregunta que su amigo le había hecho hace pocos instantes por ver a la chica de quien estaba completamente embobado levantarse de su silla lista para salir de su habitación.
— ¿Qué pasa? — Ve pasar a Mikasa a través de la puerta. — Ah, ahí viene Mika... — Se dió cuenta de lo que estaba sucediendo, además de notar la mirada de Eren completamente perdida en ella. — ¿¡Eren!? ¡Ya viene Mikasa! Actúa natural — Después platicaría con él, ahora no era momento de dejarlo en ridículo.
— Hola chicos— Salió Mikasa con su nuevo corte aún más corto que el anterior.
— ¡Hola Mikasa! ¡Te ves espectacularmente hermosa! ¿Porqué no nos dijiste que te lo ibas a cortar?— Añadió Armin.
— Eh... era una pequeña sorpresa para ustedes, ahora que vamos a Marley tengo que tener mayor movilidad y mi cabello estorbaba, estaba volviendo a crecer mucho ¿no creen? — Dijo esto volteando a ver a Eren.
— ¡Eren! — Armin le dió un pequeño codazo, seguía sin reaccionar y dudaba que había escuchado lo que estaban hablando.
— Ah... te ves bien, te queda mejor este corte — Añadió Eren esperando no verse nervioso.
— Gracias... chicos me tengo que retirar, voy a acabar unas cosas con Jean y Sasha, nos vemos luego. — Se fue tranquilamente mientras pronunciaba esas palabras.
— Hasta luego Mikasa — Era momento de descubrir lo que Eren pensaba.Armin jaló del brazo a Eren y lo llevó al final del pasillo, ese final que era demasiado obscuro, perfecto para confesar unos cuantos secretos...
— No me mientas, ¿estabas espiándola verdad? — Soltó Armin
— Dios, que directo, ¿no podrías haber sido un poco más discreto? Y no, no la estaba espiando, te digo que solo estaba pasando por ahí.
— Mhm... y entonces explícame que hacías parado tan tranquilamente con una leve sonrisa y un brillo increíblemente claro mientras la veías, de seguro ni te diste cuenta de la manera en la que estaba tu cara — Dijo Armin en un tono un tanto burlón, aprovechando que hace mucho no hablaban así, ya que el tiempo que pasaban juntos últimamente solo hablaban de la guerra y discutiendo.
— Solo cállate, no es nada, quería ver si estaba segura, es la persona que más necesitamos ahora, tiene que estar en perfecto estado para la batalla... — Fue interrumpido.
— ¿Podrías dejar de poner el pretexto de la guerra para todo? ¿No tienes confianza conmigo acaso? — Vaya que fue duro decir eso, ya no había tanta confianza entre ellos dos como antes.
— Es importante para mi, al igual que tú, pero eso no significa que te tenga que contar todo ¿no crees? Nos vemos— Se retiró con demasiada tranquilidad, ya nada le importaba y no estaba de humor para discutir.Armin quedó pensando en todo lo que acababa de ocurrir, repitiendo esa imagen perfectamente marcada de Eren viéndola, se dió cuenta de que fue lo mejor no soltarle el típico "¿Te gusta verdad?" Quien sabe hasta donde podría llegar esa platica tan efímera que acababan de tener.
— Ahora que lo pienso yo también tendría que cortarme el cabello — Pensó mientras se dirigía a pasear, no tenía nada que hacer y justamente había terminado de hacer su trabajo y deberes.
Me pregunto si Eren en serio la amará de otra manera... aunque si es así es un pésimo momento. Entiendo perfectamente que a Mikasa ni siquiera hay que prestarle tanta atención para darse cuenta lo fiel que eran los sentimientos que recorrían su cuerpo y alma al solo verlo.
Nunca hemos hablado de el tema del amor, espero que en algún momento Eren y yo podamos hablar como antes.
Quiero saber cómo él ve a Mikasa, y he llegado a la conclusión que la ve como yo creo gracias a todas las historias de romance que he leído, y lo describen como un sentimiento demasiado hermoso, como si te levantaras, comieras, hasta respiraras solo por esa persona que alumbra todos tus días y calienta tu corazón.
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Fantasies - Eremika One Shots
Fanfiction¿Qué se sentirá tener un sentimiento de amor correspondido y no poder cumplirse por lo que está escrito? Que el pecho duela, las lágrimas recorran las mejillas, el no poder ver los ojos del otro, duele, hasta el alma. Esta historia trata sobre One...