The Last Note

Vacío

Desde que tengo memoria, eh sentido cada emoción que un humano ordinario, y normal debería tener, solo que jamás me eh arrepentido de algo, literalmente no se que es eso, y muchas personas dicen que si haces cosas malas tu "conciencia" va a cargar con ese peso, pero muy a mi pesar yo no siento eso, no es como dicen que en las noches vas a tener pesadillas de eso. Para mi no es así, yo eh hecho cosas malas, según para la sociedad, pero no siento más que adrenalina pasar por mi cuerpo, y me pregunto que hacer a continuación es lo único que siento.

Puedo sentir amor, tristeza, enojo incluso, pero empatía, y arrepentimiento nunca ah estado en mi, ni una sola vez. Todo lo que hago esta totalmente justificado y por ello no tengo ningún pesar.

Muchas personas inferiores han dicho que "esta mal arrebatar una vida, sea cual sea su especie sin distinción alguna, esta mal, la violencia no es la respuesta", para mi todo eso son simples palabras de personas que no tienen el valor, de verse al espejo cada mañana después de cometer algo así; me pregunto saben por que las personas van a la iglesia, no es por buen samaritano, tal cosa como la amabilidad, y la bondad, no existe en un mundo como el nuestro, eso es simplemente para no sentirnos tan mal con nosotros mismos por nuestras acciones, y es así no hay más que eso. Todo es una fachada para la sociedad, cada persona antes de salir o mucho antes incluso, se ponen una mascara que le enseñan al mundo, y su verdadero ser se queda adentro, intentando salir; esas personas solo alargan lo inevitable, tal vez un día malo, una molesta picazón, y toda esa personalidad creada se desmorona cual si fuera un muro de concreto viejo.

Pero creo que ya eh dicho muchas verdades por ahora, solo estoy intentando mostrarles lo que en realidad es el mundo donde vivimos, no es un cuento de hadas, tampoco el infierno, claro que no, pero no es un lugar donde camines por la calle y te sientas seguro eso es todo.

Podemos ver como un adolescente rodando los 16 se alista para ir a la escuela, este chico tiene el cabello oscuro, como una noche perfecta llena de oscuridad, lo tiene en forma de fleco, se puede ver que le queda muy bien el corte de cabello, ojos cafés penetrantes como si de un animal se tratase, tratando de descubrir que es lo que uno trama, piel clara y tan tersa, tan casi perfecta, labios rojizos tan expuestos, tan frágiles que podrías darle un beso de repente y nadie podría detenerte, su torso parece ser diseñado por los mismos ángeles, tiene un cuerpo tonificado, pero no llegando a ser exagerado, sin embargo, esa casi perfección se ve manchada por cicatrices en la espalda de ese joven, si no estuviéramos en paz, pensaría uno que fue a la guerra por la magnitud de las cicatrices del chico, manos delicadas como si de un pianista se tratase, y piernas tonificadas, podría tratarse por el ejercicio que hace el chico. 

El adolescente se pone un pantalón negro entubado, el cual remarca bien sus muy tonificadas piernas, y su dicha regalada por dios, como muchas chicas han dicho por la escuela, después se pone una camisa pegada blanca, junto con una casaca negra, y unos mocasines negros, junto con un reloj BVLGARI, y un cinturón negro el cual le queda perfectamente al conjunto que esta usando actualmente.

Después de vestirse y hacer su rutina diaria en el baño, empieza a bajar las escaleras y ve a su padre tomando una taza de café caliente acompañado de una rebanada de pan. El hombre en cuestión tiene el pelo negro, unos ojos verdosos, su piel es parecida a la de su hijo solo que un poco más quemada, su estatura ah de rondar por el 1.80 de estatura. 

- Hola.

- Hola, ya desayunaste ???

- Aun no, pero se me hace tarde para la escuela.

- Pero aun falta media hora.

- Ya sabes lo que dicen al que madruga dios lo ayuda, (Con una sonrisa en la cara, y dirigiéndose hacia la puerta).

- Bueno pero no llegues tarde a la casa.

- Si esta bien papa, te lo prometo no voy a llegar tarde a la casa.

Se puede ver como el adolescente empieza a abrir la puerta y sale por la misma, después de eso cierra la puerta de su casa y se encamina rumbo hacia su escuela; de camino hacia su escuela se encuentra con una señora de la tercera edad la cual esta cruzando la calle con bolsas de frutas, y demás cosas.

- Señora déjeme ayudarle con eso, (Cargando una de las bolsas de la señora y agarrando el brazo de dicha persona).

- Gracias jovencito, ya no hay caballeros como tu hijo, (Dando le una tierna sonrisa).

- No se preocupe señora, es mi deber como ciudadano y no me quita en nada ayudarle señora, por favor si me ve pasar no se contenga y pídame ayuda ok.

- Gracias jovencito de verdad te lo agradezco, ve toma un caramelo, (Dando le un caramelo de cajeta).

- Gracias señora (Sonriendo).

Después de ayudarle a la señora se puede ver como el adolescente se esta retirando, pero si eres muy perceptivo, puedes ver como en su cara se denota una mirada de asco, y molestia.

- (Suspiro), tengo que mantener las apariencias, entre más me vean mejor.

- Pero bueno saque algo bueno de eso al menos (Sacando el dulce de la señora, quita la envoltura y lo come, y la basura del dulce lo tira como si nada al piso sin que nadie se diera cuenta).

El chico sigue avanzando hacia su escuela y se puede escuchar mucho ruido.