El secreto del Titanic

Capitulo 20. Sola como jamás he estado

¿Pero que estoy haciendo? Empujé a Call apartándolo de mi.

- NO VUELVAS A BESARME JAMAS!!!

- Rosse... crei que...

- No puedo, no puedo.... de verdad que todavía no puedo darte mi corazón entero a ti, y no es justo para ti.

- Me conformo con lo que me des...

- Pero yo no, debo darte mi amor solo a ti.

Sonó su movil, contestó y tras un rato vi como la cara de Call cambiaba a un semblante demasiado serio, triste....

- ¿Donde está? ¿Que ha dicho el doctor? - fueron las frases que necesité para centrarme en la conversación.

- Vale, salgo ahora para ahi.

- ¿Que ha pasado?

- Mi padre... ha sufrido un accidente, está en cama... no me han dado demasiados detalles, esta estable... pero poco más se. Parto ahora mismo.

- Voy contigo – dije a lo que la cara de mi amigo se iluminó.

- Vale. Prepara tu equipaje, unos días tardaremos. No vamos muy lejos, solo a unos 200km de distancia.

- Ok. - dije entando en mi habitación a meter unas cuantas prendas de las que Call me había comprado en una maleta que también me había comprado... Una vez terminé fui a comunicárselo a mi hermano y mi amiga.... Que me dijeron que me comunicase con ellos una vez llegase de nuevo, que pasarían los días en un hotel. Muy a pesar de lo que Call les rogó para que se quedasen hasta que volviésemos, no aceptaron. Nos marchamos los cuatro a la vez de la casa, dejando la gran mansión vacía.

El viaje fue bastante silencioso, Call se veía bastante preocupado por la salud de su padre. Yo con mi delirios mentales, a los cuales ahora había que añadir a Call, que no sabía que sentía por el. No se cuanto tardamos, porque me quedé dormida y Call me despertó al detener el coche.

Abrí los ojos lentamente, la claridad me molestaba demasiado. Entonces me di cuenta de que Call estaría ansioso por saber de su padre, y yo remoloneando... me levanté del asiento de un salto y cogí las maletas rápidamente, hasta que mi amigo me las sacó, llevándolas el. Seguí a Call sin rechistar, sin observar la maravillosa casa casi, por la velocidad que mi amigo llevaba.

Salió un señor a nuestro encuentro el cual cogió las maletas y al cual mi amigo le encomendó llevarme hasta mi habitación. El se dirigió a ver a su padre, despidiéndose de mi con un beso en mi frente. El mayordomo me acompañó y despidiendose me dejo sola, debatiendome en que hacer.... las personas con clase, como lo era la familia de Call, no visitaban las habitaciones sin ser invitadas... y yo no sabía ni donde eran, ni mucho menos si sería una grata sorpresa presentarme. Asique me senté, viendo pasar dos horas en la cama. Hasta que unos golpes en la puerta me hiceron levantarme

- Call – dije alegre- ¿como está?

- Bastante bien, se calló por las escaleras, tiene un pie fracturado... nada importante.

- Me alegro. - dije sinceramente.

- ¿Tienes hambre? - dijo Call cogiendome de la mano.

- Si.

- Pues vamos a comer entonces. Luego te presentaré a mi padre.

- Vale.

Comimos, felices, recordando anécdotas del instituto, luego paseamos por los jardines de la casa, y pude admirar la hermosa casa, creo que a este paso cada una de las que conozco me gusta más. Paseamos por un estanque, el cual inevitablemente me recordó a Jack y su primer beso, su declaración de amor.... de hace tantos años. Reprimí mis lágrimas y intenté seguir la conversación de Call sin que este se diese cuenta de nada. Las horas pasaron sin darme cuenta, de pronto vi como el sol se estaba poniendo y Call me abrazó desde atrás, apoyándose en mi cuello, vimos el maravilloso adiós del astro sol por ese día.

- Vamos a que conozcas a mi padre.

- Vamos – dije mientras sentía un escalofrío.

- ¿Tienes frío? - dijo Call sintiéndolo.

- No, ha sido un acto reflejo solamente.

Recorrimos en silencio los pasillos de la enorme casa, solo adornados nuestros pasos por miradas y sonrisas, cogidos de la mano.

- Padre – dijo una vez tocó la puerta y un hombre con voz cansada no dijo que pasásemos.

- Hijo.- dijo incorporándose en la cama hasta sentarse.- sonrió y luego me miró como estudiándome.- ¿Quien es la señorita?

- Rosse, mi amiga Rosse.

- Acercate señorita – me dijo con voz autoritaria.

Hice caso, y estuvo un buen rato mirándome, de vez en cuando miraba a Call que tampoco entendía que hacía su padre. De repente escuche de nuevo su voz, pero era mas ruda que la que había escuchado antes.

- HAS TRAIDO AL ENEMIGO A MI CASA!!!!

- Padre, ¿que dices? ¿te has vuelto loco?

Yo instintivamente di un paso atrás, empezaba a darme miedo ese hombre que estaba en cama.

- Ella es, es la hija de Caroline, la nieta de Mary, la bisnieta de Rosse....

- Padre ¿que dice?

- Preguntaselo a ella, solo con la mirada me dice que si.. ¿no es cierto?

- Yo... ¿que tienen que ver ustedes con todo eso?

- Rosse, ¿es cierto? - me preguntó Call mirándome con odio.

- Si... me han contado algo asi... pero no se...

- MIERDA!!

- ¿Que pasa? - dije acercándome a él, pero mi amigo salió corriendo de la habitación dejandome sola, llena de miedo, solo me enteré que unos hombres me cogían por los brazos y me encerraban bajo llave en la habitación que me habían asignado. Lloré de rabia, de impotencia... de no saber que pasaría, tenía miedo.... Vi como Call se marchaba en su coche dejándome sola, sola como jamás había estado.

A todos los que la leeis, espero que papa noel os haya traido muchos regalos y que os guste mucho el capitulo. Espero vuestros votos y comentarios. Besossss

Os quiero

*SuSy*