Capítulo 16

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Capítulo 16 ...

Dos años después, palacio de Topkapi ...

George, es mejor empezar por las campañas militares ... los ingleses de esa forma ya no intervendrán o amenazara al imperio otomano y ruso.

Ya entiendo porque el sultán Umut te tiene un gran aprecio, eres muy inteligente en lo que haces, Albert.

Gracias ... está mañana te vi con la sultana Feride, siento que te atrae mucho.

¿A mi? No ... es sólo que tengo que cuidar de ella, así lo ordenó el sultán. 

Creo que hay algo más entre ustedes dos.   

Quien te viera, diría que eres muy mayor ... ja ja ja.

No cambies de conversación, George. La barba es una obligación, sino los pashas no me respetarían ja ja ja.

¡Ay, William! La felicidad toco tu puerta ... 

Lo dices por Aysel, yo la quiero mucho ... fue mi camino en el desierto. 

El sultán Umut está feliz que su hermana se haya casado contigo.

Aysel se enamoró de mi dos veces, la primera cuando era Albert y ahora como Enver. Su amor es verdadero y eso me hace feliz, quiero corresponder por completo a su amor. Recuerdo que ese día entro a mi habitación ...

Flashback:

Un año atrás, aposentos:

¡¿Sultana?! Preguntó Albert con asombro al ver a la sultana Aysel entrar a sus aposentos 

Dime la verdad, ahora mismo.

Sultana, no sé a qué se refiere

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Sultana, no sé a qué se refiere. 

Eres William, tengo la esperanza que seas tú. Dijo la sultana Aysel acercándose a Albert

Me confunde, sultana ... no sé quién es William, es muy tarde es mejor que se retire o los aghas van a pensar mal sobre esto.  

Tus gestos son similares al de él, te veo y me imagino que eres William.

No llore por favor, no me gusta verla sufrir.

Enver, sé que es algo raro lo que voy a decir ... pero a veces siento que eres William, la primera vez que te vi, imagine que tú eras él. Susurro Aysel rompiendo en llanto 

¿Lo extrañas? Preguntó Albert abrazando a Aysel

Fue mi primer amor,  no fue correspondido ... pero fue quien entro a mi corazón. Aun no eh podido superar su muerte, todos los días sueño con él ¡Lo amo! 

Hace poco ... ese tal William o Albert empezó a sentir cosas por usted. Susurro Albert acariciando el rostro de Aysel

Dime que eres tú, por favor. 

Si la vida lo permiteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora