marinette es una chica normal bueno no tan normal porque ella es ladybug y se enterara de algo que le cambiara la vida para siempre.
Combatienso con nuevos aliados, descubriendo quienes son sus verdaderos amigos, etc.
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Fec...
- ¿Qué? – No lo podía creer, todo lo que había pasado hoy, todo lo que me habían dicho hoy era cierto.
- Lo sentimos, sé que teníamos que haberte dicho desde que pudiste entenderlo, pero no pudimos hacerlo. – Me estaba hablando mi ma ... sabine, no, es mamá, ella me cuido desde que soy una bebé al igual que Tom es mi papá.
- Yo necesito tiempo – dije parándome de la mesa, pero antes de irme los miré. – Me duele que me hayan mentido por tanto tiempo – los vi bajar la cabeza – pero ustedes son los que me criaron todos estos años y por eso siempre los voy a considerar mis padres, pero necesito salir a despejarme.
- Bien, pero ten cuidado – Me dice papá antes de irme.
- "Entonces era real, soy adoptada" – dije en mi cabeza, pero eso me llevo a mis recuerdos de hace unas horas.
"Usas un nombre falso tu y la que se esconde detrás de la máscara, aunque no me sorprende tu verdadera madre es exactamente igual, ella se esconde bajo un nombre falso y una identidad secreta como Supergirl." "Bien... nosotros te habíamos estado buscándote desde hace demasiados años, la verdad es que tú eres mi hija, tu vimos que darte en adopción hace 15 años.", pero también recuerdos de mi infancia, como mi fiesta de cumpleaños número diez, cuando me cantaban para dormirme, todos estos vinieron a mi como destellos mientras iba caminando sin darme cuenta hacia la casa de Alya.
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Al darme cuenta hacia donde me estaba dirigiendo me detengo para sacar mi teléfono y marcar al número de Alya.
[Llamada]
[Hola, Marinette]
[Alya, necesito hablar contigo]
[Claro, ven no te preocupes]
[Gracias estaré en unos minutos]
[Fin de la llamada]
Seguí caminando lentamente y cuando llegue, toque la puerta y espere a que Alya me abriera, pero ningún segundo después ella estaba frente mío y dándome un abrazo de esos que no quieres soltar nunca. Entramos para sentarnos en el sillón de la sala donde no sentamos frente a frente y Alya empezó a hablar.
