Capitulo 1 Tokio de Cristal

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DECISIONES

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Este no es un universo alterno, ni tampoco es post stars, es más bien algo que quedo en medio de ambos, un Universo Paralelo ¿y por qué motivo? sencillo, tomamos tantas decisiones en nuestras vidas que a veces nos preguntamos ¿Qué hubiera pasado de haber hecho esto o aquello?, cada decisión es un camino distinto, una brecha distinta a nuestro futuro, que en algún punto del infinito universo puede llevarse a acabo, tal vez conocer personas distintas, amores distintos, situaciones felices o tal vez trágicas. Pues bien, esta es la nueva idea loca que se nos ocurrió, recuerden todo tiene un motivo o razón de ser, esperamos que les guste, y les vuelvo a recordar, es un UNIVERSO PARALELO por lo cual habrá cosas o situaciones conocidas y novedosas, esperemos que les guste y lo disfruten tanto como nosotras al escribirlo.

Marina Acero y Marie Kim Winchester Kou.

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Capítulo 1

Tokio de Cristal

Caminaba entre los pasillos, pensativo; había regresado tiempo atrás a la tierra junto con sus hermanos. No sabía exactamente lo que sucedería, pero tenía deseos de estar junto a su amado bombón. De inicio fueron recibidos con los brazos abiertos, por todas sus amigas, incluso por Sailor Uranus. Había sido un agradable momento, más por poder ver a su amada bombón. La cual sin duda había cambiado mucho, aun cuando su belleza se había incrementado y había madurado, considerablemente. Lo que más llamaba su atención era su mirada apagada ¿Qué había sucedido? ¿a dónde se había ido toda esa alegría que solía caracterizarla? Su porte era elegante como debía ser el de la Neo Reina de Tokio de Cristal.

Cada que intentaba acercarse para platicar ella parecía evadirlo y como si de una sombra se tratara el Rey siempre se hacía presente en los momentos menos oportunos haciéndole perder cada una de las oportunidades para poder siquiera entablar conversación con ella. El reino de Black Moon había iniciado sus ataques y sin pensarlo dos veces defendió el reino como todo un guerrero. Se había convertido en líder de la guardia real, parecía ser un papel que conocía perfectamente bien como si ya antes lo hubiese sido, quizás debía agradecer la guerra con ellos, ya que gracias a eso por fin la oportunidad que había ansiado llego. Logró acercarse a su bombón, a la cual le había confesado los sentimientos que siempre había encerrado y así fue como iniciaron una relación clandestina.

Su mente divagaba en la conversación que habían sostenido la última vez. La esperaría en el lugar donde se veían cada que podían. Esa situación comenzaba a ser cansada y estaba dispuesto a terminar con todo eso. Sin darse cuenta una pequeña niña tropezó con él, esta comenzó a llorar, lo cual hizo que se agachará hasta quedar a su nivel.

—Pequeña Dama ¿te encuentras bien? —sonrió mientras la ayudaba a ponerse de pie.

—Si, pero mi vestido... —dijo con un puchero señalando su siempre impecable vestido manchado de tierra— mamá se va a enojar

—Tranquila Pequeña Dama te ayudare —sacudió la tierra del vestido con la mano—, pero no te has lastimado ¿verdad?

—No... —sonrió sutil y sonrojada— estoy bien iba a mis clases con Plut ¿a dónde ibas tu Fighter? ¿me llevas? —sonrió con aquel gesto que sabía que nadie le negaba nada.

—Iré a los jardines a tomar un poco de aire Pequeña Dama ¿le gustaría ser mi acompañante?

Asintió frenéticamente extendiendo su mano hacía él— A mamá también le gusta mucho ir, a papá casi no

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