Parte única.

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01.

Fueron abandonados y olvidados, no hay otras palabras para describir su situación. Pues los padres de ambos parecieron olvidar su existencia e irse a sabrá Buda dónde.

(Dime, si pudiera abandonarlo todo. ¿Sería más fácil reír y vivir?)

Aunque en realidad, Megumi no se siente extrañado. De cierta forma, se lo esperó; así era su viejo, después de todo: Un hombre que depende económicamente de las mujeres.

No se siente extrañado ni decepcionado, no siente nada en realidad. Y parece ser, que no es el único que no se siente extrañado de su situación.

Pues Tsumiki solamente suspira y al instante sonríe, como acostumbrada. Y sin quitar su sonrisa se voltea hacia él y le pregunta, amable –: ¿Qué quiere de comer, Megumi?

Y por un microsegundo, su corazón le da una punzada. Ah.

02.

(Harás que mi corazón empiece a doler de nuevo).

Es la primera vez que le preguntan en, mucho tiempo, sobre lo que quiere comer. Eso, sí lo extrañó un poco.

Y Tsumiki en lugar de molestarse o impacientarse, vuelve a preguntar, calmada –. ¿Hay algo que Megumi quiera comer?

(Por favor no digas nada más).

-... No, nada en especial.

03.

(Dime, si pudiera abandonarlo todo, ¿sería capaz de vivir sin lágrimas?)

A veces Megumi se pregunta si realmente a su padre le importó antes de dejarlo a la deriva con Tsumiki. Y a veces, se preguntó si su mamá, lo amó.

Siempre en las noches, antes de dormir.

(Pero no puedo hacer eso).

Sin embargo, vivir preguntándose cosas como esas, no tiene sentido. Piensa al final, a modo de conclusión mientras aparta su mirada jade del techo del cuarto.

(Por favor, no me muestres nada más).

Y cuando parece que será otra noche donde el insomnio, la tristeza, el dolor, la oscuridad y las lágrimas no le dejarán dormir, Tsumiki toca la puerta. Preguntándole si yace despierto o no.

Y en esa noche, ambos terminan por dormir juntos, más no abrazados.

04.

(No importa qué tan cerca esté de ti, mi corazón es uno solo–)

Megumi a veces se pregunta, si la amabilidad de Tsumiki es verdadera y no actuada.

Sin embargo...

(Es cruel, es cruel).

Tsumiki siempre le sonríe, como una apuesta del sol.

05.

(Preferiría que tomaras mi cuerpo y lo destruyeras, lo hagas pedazos. Has lo que quieras con él).

Megumi duda, siempre lo hace. Y no puede evitar hacerlo.

(No importa cuánto grite y luche o mis párpados se hinchen, sólo abrázame sin soltarme).

Pero es que... La amabilidad, la sonrisa y el cariño de Tsumiki se sienten reales. Tan tangibles.

(Puedes detenerte ahora).

Que duele.

06.

(Dime, si mi deseo se hiciera realidad. Desearía las mismas cosas que tú... Pero no existe nada más para mí).

Si Megumi alguna vez deseó algo, tal vez era cuando fue más niño. Posiblemente conocer a una mamá inexistente y ausente.

Y también tal vez, un padre.

(Así que por favor quiero que vengas a mí).

¿Aunque eso importa todavía?

Es decir, Tsumiki está aquí con él.

¿No?

07.

(No importa cuánto me ames, mi corazón es uno solo– Detente, detente).

Pero, a veces, Megumi tiene miedo de que... Tsumiki pueda ver con sus chocolates cálidos y pacientes lo que el jade frío y dudoso es.

08.

(No seas amable conmigo, de todas manera no puedo entenderlo– Me duele, me duele).

Y en defensa, por miedo, Megumi comienza a crear un muro y tomar distancia. Cuando ambos están en secundaria.

(Dímelo con palabras. No sé lo que está pasando).

Y Tsumiki no entiende, ¿Por qué Megumi hace esto? ¿Por qué?

–Y solamente pasa que ella se molesta con él, y le arroja esa caja de leche. Dejándolo inmóvil en el pasillo–.

09.

(Y Megumi tal vez debió haberle dicho ese día:

No me dejes solo).

010.

(Es cruel, es cruel).

Debió haberla apreciado más.

(Preferiría que tomaras mi cuerpo y lo destruyeras. Lo hagas pedazos. Has lo que quieras con él).

¿Por qué una persona tan buena y amable como ella debía sufrir? Debió ser él y no ella.

(No importa cuánto grite y luche o mis párpados se hinchen).

Y esa noche, es la más amarga y fría que pudo pasar. Pues ahora sólo hay oscuridad y soledad.

(Sólo abrázame sin soltarme– Puedes detenerte ahora).

No hay nadie más en casa.

Megumi se siente desamparado, cual niño abandonado en el mundo.

011.

(Dime, si hay un corazón para mí).

Y tiempo más tarde, Megumi conoce a Yuuji y Nobara.

(¿Cómo puedo hacer para encontrarlo?)

Quienes a su manera, logran llegar a él. Y borrar su dolor y soledad de a poco.

(Sonríes un poco y me dices:

"Si eso es lo que estás buscando, está aquí").

Y Megumi Fushiguro... Resulta no ser tan frío como aparenta ser.

-Traumada Taisho

Son las putas 3 de la mañana, tengo sueño. Tengo una obsesión con los Fushiguro y quedé como payaso porque la madre de Megumi y Tsumiki no es la misma persona.

Sale se me cuidan, chao.

Kokoronashi  [Tsumiki & Megumi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora