Norman siempre parecía tierno, pero vaya sorpresa se llevó Ray al encontrarlo años después y descubrir que era demaciado sexy,cosa que no diría- no en voz alta al menos- aún así seguía teniendo esa expresión tierna de angel
lo que no sabía Ray era...
Aclaración: esto se sitúa luego del reencuentro de norman y los chicos, pero ellos tienen más de 15 -no quiero especificar edad -
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Narrador omnisciente
El albino soltó un suspiro pesado mientras se recargaba en su escritorio
— te la puso difícil. El azabache estaba frente a él, tenía una postura vaga - cómo era costumbre - con las manos en sus bolsillos, miraba la lechuza que posaba tranquilamente en la ventana
—lo sabías ?. Pregunto sin mirar al azabache, mantenía la cabeza baja dandole vueltas a las cosas que emma le había dicho
— si.
Dijo mientras subía su brazo y el ave se poso en su antebrazo y camino lentamente hasta el escritorio
— piensas lo mismo ?. El albino seguía en la misma posición mientras que Ray se sentó en la silla y la lechuza se colocaba en su regazo
— sabes cómo es Emma, si tiene la mínima posibilidad de llegar a un acuerdo que beneficie a ambas partes sin necesidad de sangre, hará todo lo posible para hacerlo. Su mano se deslizaba por el suave pelaje del ave
— no es lo que pregunte. Norman se dió la vuelta para que no evada el tema, quedó extrañado al ver que la silla estaba dándole la espalda — Ray ?
La silla se movió el azabache lo miraba con una sonrisa un poco escalofriante acariciaba lentamente las plumas del ave —al fin nos conocemos Norman o debería llamarlo Minerva ?
—…
—…
— tu expresión me recuerda a la vez que dijiste que eras espía de mamá, acaso . . . Tines algo que decir ?
El azabache mantuvo esa sonrisa, el albino sonrió, ambos mantenían mirada firme, así estuvieron unos dos minutos ,los más largos de sus vidas - o eso parecía -
— tch. El menor solo chasqueo la lengua y aparto la mirada — no me veas así, lo eh leído en libros, siempre quise intentarlo. Dijo con su expresión de siempre
Norman soltó una risa, mientras veía a Ray dar un par de vueltas con la silla, la lechuza voló hasta el hombro del albino
— te sientes un poco mejor ?
Norman sonrió — si, aún así no respondiste mi pregunta.
— tengo que decir lo ?
—no
El azabache se levanto fue hasta el albino, junto sus labios en un dulce tacto de tan solo unos segundos para luego irse
Norman sonrió
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