Sentimientos ilícitos

Cap. 1

Disclaimer: Boku no hero es propiedad de Kōhei Horikoshi, el esposo de Hajime Isayama (canónicamente no se sabe, pero en mi cabeza sison), y de su respectiva casa animadora [Bones]. Este fic es sin fines de lucro.

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Advertencias: OoC, Poquito drama.

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Aizawa Shota se mantenía cruzado de brazos, escuchando y poniendo atención esporádicamente a la palabrería burocrática del director. El resto de sus compañeros, aunque trataban de ocultarlo, también comenzaban a aburrirse, pero no les quedaba de otra más que escuchar si no querían que su salario disminuyera otra vez, misteriosamente.

-Ahora discutiremos el presupuesto asignado a los robots –Nedzu alzó sus brazos, entusiasmado.

Sus colegas asintieron con la seriedad necesaria, tomando los papeles para darles el visto bueno a los números que Nedzu se había esforzado en detallar. Menos mal que el presupuesto era constante, así que al menos, cada quincena respiraban tranquilos.

Un detalle que agradecían todos.

El director a veces era malo, pero no siempre.

La reunión continuó sin contratiempos, hasta que el secretario de Nedzu entró e interrumpió otra de las pláticas sin sentido que solía soltar Nedzu, diciéndole que era la llamada que estaba esperando.

Nedzu se disculpo y salió, dejando solos a los profesores.

Sin más, Aizawa comenzó a revisar los mensajes de su celular en un intento para no escuchar e ignorar los berrinches y quejidos que gritaba Mic a los cuatro vientos cuando ya estaba aburrido.

Gracias a eso, no le quedo de otra más que sumergirse en el contenido de su celular. Una acción de la que se arrepintió cuando encontró un mensaje de suplica por parte de una desconocida con la que se había acostado hace algunos meses.

-Eraser, que galán. No sabía que tenias novia –soltó Mic, curioseando el mensaje que había recibido su amigo-. Ese "no me interesa" hasta a mi me dolió.

Aizawa rodó sus ojos.

-Todavía no se cómo sobrevives sin tener tanto sexo –mencionó Midnight, causando un fuerte sonrojo en los rostros de Trece, Ectoplasm y Vlad.

-No es algo que realmente me interese.

Midnight bufó y Shota se limitó a encogerse de hombros.

Porque era cierto, las relaciones sexuales poco le importaban. No le veía lo relevante a ese acto más allá de un momentáneo placer ocasional.

Es decir, no le veía nada de malo pasar un buen rato con un buen polvo, pero continuar con algo más... Ugh, un escalofrío aterrador recorrió su espina vertebral con solo el pensar en compartir su vida con alguien. Ese no era, ni seria su estilo.

Para su sorpresa y malestar, sus queridos compañeros comenzaron a discutir su extraña forma de vida. Después de todo, la mayoría aun no concebía que en el mundo existieran criaturas que no le dieran importancia al amor y al sexo.

Shota volvió a rodar sus ojos con más fastidio. Y es que explicar su sexualidad con peras y manzanas no entraba dentro de sus planes.

Era más fácil ignorar a los ignorantes que tenía como amigos.

-Ey, dejen a mi amigo que el célibe en paz –soltó el rubio.

Y por esos momentos, Aizawa maldecía el sistema educativo. Un sistema educativo que apenas te exponía los puntos que abarcaban la sexualidad humana. Un sistema que básicamente les gritaba que lo más importante era el amor... el amor heterosexual.