HERMOSO ENGAÑO

Lance

Después del el proceso trasladaron a Lance al castillo, un día y medio paso, la espera consumía de ansiedad al pequeño Alaric, que no se separaba para nada de su papá, Hunk siempre le llevaba de comer e incluso Pidge llevaba su computadora con la cual se entretenía el pequeño, sorprendiéndola por su inteligencia, entendiendo algunas cosas de física avanzada y aritmética, jugando con él algunos juegos, Shiro platicaba con él de temas variados, con Keith entrenaba y con Koran escuchaba sus múltiples historias, con la única que no hablaba era con la princesa Allura.

El niño no entendía por que no lo quería, no ha echo nada malo, que el recuerde, incluso una vez que se la encontró cuando decidió salir unos minutos de la habitación se disculpo, no sabia por que disculpaba, pero lo hizo, aunque no funciono, la princesa solo lo miro seria y después se fue, Alaric se ofendió, papi le enseño que no contestarle a alguien es de personas groseras. 

El pequeño ahora se encontraba acostado junto a su papi, según el horario del castillo era hora de descansar, Alaric estaba dormido plácidamente, cuando sintió que alguien lo movía. El pequeño, se despertó somnoliento, se restregó sus puñitos en los ojos, pero unas suaves manos lo detuvieron.

-Ya te he dicho que no hagas eso-

Alaric dejo el sueño atrás y miro a través de la oscuridad esos ojos azules que tanto le gustaban.

-¿Papi?-

-Hola amiguito-

-PAPI-el pequeño se echo sobre Lance, ambos cayeron en la cama mientras el moreno reía y le repartía besos en la cara del pequeño, en algún punto del cálido abrazo el pequeño se separo- ¿Aun me quieres?- pregunto preocupado.

-Claro que si mi pequeño- le puso un mechón e pelo detrás de su oreja- no importa si mis recuerdos antes de ti fueran falsos, todo lo que viví contigo fue completamente real- 

-Papi- el pequeño rodeo, o intento rodear, la cintura de Lance mientras lagrimas salían de sus ojitos- tenia miedo de que ya no me quisieras-

-Eso jamás tesoro, te amo mucho- Le beso su coronilla.

Se quedaron completamente en silencio, hasta que una duda surgió en la cabeza del pequeño.

-¿Que pasara con papá?-

Lance solo dejo salir un suspiro.

-En este momento tesoro, estoy enojado con tu padre, pero ten en mente que no es por ti ¿ok?- le beso la frente.

-Ok-

-Bueno, debemos dormir, mañana será un día muy raro-

El niño asintió y se acurruco cerca de su papi que sin dudarlo lo abrazo cerca de su pecho, o si, mañana será un día extraño.

Ala mañana siguiente todos se despertaron y se dirigieron a la cocina, pero se quedaron pasmados al ver a un Lance muy feliz bailando mientras serbia comida, o bueno, lo que parecía comida.

-Hey chicos-

-¿Lance?-pregunto Shiro. 

-El mismo, recuperar recuerdos me dio hambre ¿quieren?-

-LANCE- Hunk y Pidge se abalanzaron sobre él, aunque Hunk intentaba aguantar las ganas de llorar al igual que Pidge.

-Oye tranquilo grandote, soy yo-

-No puedo creerlo, es bueno que seas tu otra vez- dijo Pidge separándose.

-Si, a mi también me alegra ser yo...¿Por que esas caras largas?- dirigió su miradas a los otros cuatro integrantes del equipo Voltron.