Kim Taehyung vive en un mundo donde todo a su alrededor son distintos tonos grises. Es uno de los "mono", así le llaman a este tipo de personas. Y él nunca pensó que encontraría a su "probe" tan rápido, tampoco si quería hacerlo.
Historia basada en...
Habían pasado un par de horas en las cuales el, ahora, rubio solo se miraba a si mismo en el espejo mientras pensaba, definitivamente no se iba a quedar ahí. Había intentado abrir la puerta pero la chica la había dejado con llave. Creía que eran aproximadamente las dos de la mañana o por ahí ya que ahora por la ventana se veía todo oscuro, pero igualmente no tenía sueño.
La chica le había dejado una polera en un lado de la habitación antes de salir así que se la puso porque empezaba a hacer algo de frío. Se acercó a la ventanita para cerrarla pero estaba atascada.
—Ciérrate cosa —dijo intentando moverla—.
La intentó mover por un minuto más, pero seguía atascada, iba a regresar a la silla cuando pensó en algo. Espera. Se giró a hacia la ventana y después a la silla, miró todo el cuarto, estaba oscuro y no parecían haber cámaras por lo que nadie estaba vigilando lo que hacía. Igualmente tocó un par de veces la puerta para ver si venía alguien, pero no escuchó nada así que supuso que no había nadie. ¿Y si...? Llevó la silla enfrente de la ventana y sacó su mano, el espacio era algo pequeño, pero sí podía salir por el ahora que tenía la silla para apoyarse.
Intentaba no hacer ruido, se suponía que quien sea que cuidaba ese lugar estaba durmiendo pero igual no quería arriesgarse. Se apoyó con los brazos en el borde de la ventanita y se impulsó intentando levantar sus piernas.
—Mierda —susurró cuando al lograr salir se cortó un poco el tobillo con el borde de la ventana—. No hay nadie —se dijo a si mismo mirando en todas direcciones—.
El lugar estaba todo oscuro pero no era porque era de madrugada, de hecho aunque el rubio no fuera consciente de eso eran las seis y media de la mañana y la luz que él vio cuando estaba dentro el cuarto era de los locales de al lado.
Caminó por la primera calle que se encontró ahí, tenía la capucha de la polera puesta pero sabía que si no se apuraba igualmente lo podían encontrar. Llevaba las manos en los bolsillos, no podía correr en caso que lo vieran porque le dolía un poco todavía el pie y aparte seguro había bastante gente ahí que lo empezaría a seguir.
Ni si quiera sabía dónde estaba, no parecía un lugar cercano al que él vivía, era muy diferente, en algún punto de la calle empezó a escuchar música y un poco más lejos pudo ver luces como si hubiera una fiesta o algo parecido. Empezó a caminar un poco más rápido mientras seguía mirando al piso hasta que vio unos zapatos que no eran suyos cuando se chocó contra alguien y cayó sentado al suelo.
—Hey ¿qué haces aquí niño? —escuchó que la persona con la que se chocó le preguntó—.
Antes de levantar completamente la mirada vio como cuatro personas más se acercaban.
Estoy jodido.
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El día anterior se les había hecho muy tarde para seguir buscando a Taehyung, Jungkook estaba más angustiado porque sabía que si algo le pasaba sería su culpa pero al menos ahora que habían visto las cintas de seguridad del hotel y pudieron ver como el carro se los llevaba, sabían un poco más de el lugar en el que se podría encontrar.
