Aun no es tarde

Recuerdos dolorosos y una visita inesperada

Draco daba vueltas como loco en su casa, no podía estar tranquilo, leyó, releyó y volvió a leer la carta de su princesa, no podía creer lo que había pasado, después de tantos años, de tanta búsqueda sin éxito, de tantas lagrimas derramadas, después de su resignación ella apareció, así, de la nada... No entendía la mezcla de sentimientos que lo embargaban; por un lado odiaba esto y la odiaba a ella, volver después de 18 años sin una noticia suya, y decir que lo amaba así sin más, hacer que los sentimientos que creía que mantenía controlados volvieran a la superficie... Odiaba eso... Pero por otro lado... ¡Ella lo amaba! todavía lo amaba...

Las horas eran largas... no lograba concentrarse, se sentía exactamente igual que el día después de su cumpleaños pero 18 años atrás... el día más largo de su vida...

FLASH BACK

Era un día gris... uno de los peores de su vida... esa carta... maldita carta... si tan solo su padre no existiera... si tan solo él tuviera la fuerza para enfrentarlo y protegerla... pero esta era la mejor opción... ella estaría a salvo y él... bueno, él debía ser fuerte y asegurarse de que la persona que mas amaba estuviese bien... ya no tenía corazón, dudaba que alguien llegara a ser tan importante para él como Hermione... ella descongelo su corazón, le dio calor a su vida y lo animo a ser alguien más, a no ser un maldito mercenario, no... Él nunca sería lo que querían que sea, él iba a salir adelante, costara lo que costara, él llegaría a cumplir sus sueños y todo lo haría por ella, porque se lo prometió y porque nunca rompería una promesa que le haya hecho… Se casaría con Astoria y procuraría que el amor de su vida estuviese a salvo…

Se dirigió a su habitación, tenía que estar solo y desahogarse, sacar todo el dolor que lo embargaba, pero al abrir la puerta encontró a alguien sentado en su cama…

-¿Qué haces ahí sentada? ¿Quién eres?

-Perdón Draco… sé que no debería estar aquí, pero no sabía a dónde ir… ya te lo dijeron ¿verdad?- pregunto Astoria entre lágrimas y sollozando, se la notaba confundida. El muchacho solo la miro, entendía sus sentimientos pero sabía que ella no perdía tanto como él…

-Astoria, tranquila, te entiendo muy bien, estoy perdiendo mucho más que tú en esto, pero debemos hacerlo… Dean y Hermione nos entienden, y nosotros debemos protegerlos, sabemos lo que son capaces de hacer si no hacemos lo que nos dicen, pero tenemos que ser fuertes, esto no es un juego. Estamos protegiendo a quienes amamos…- Draco no podía seguir hablando, se le quebró la voz en la última frase y comenzó a llorar. La muchacha corrió a abrazarlo y lloraron juntos, necesitaban sacar todo ese dolor que tenían adentro, y pensaron que juntos iba a hacer mejor…

FIN DEL FLASHBACK

El peliblanco estaba aun ensimismado en sus recuerdos cuando una voz conocida lo despabiló

-PAAAAAAAPIIIIIIIII!!!!!!!!!!!!!!!!- Entro corriendo Scorpius y salto a los brazos de su padre- El abuelito gringrin te manda saludos, y la abuelita grasgras dice que el regalo te lo da cuando vayas a visitarlos con mami y con yo… Ahhh!! Y el tío Dean también te manda saludos por tu cumpleaños

-“Conmigo” campeón, se dice conmigo, está bien, cuando la veas dile que ire cuando deje de pelear con tu padre

-No pelearía tanto contigo si fueras más seguido a verlos, querido.- La voz de su mujer lo hizo voltear, y la encontró apoyada en el marco de la puerta. No podía negar que los años no hicieron más que embellecerla, su cabellos recogido en una media cola con las puntas onduladas, su figura igual a la que tenía cuando tenía 18, con alguna que otra marquita dejada por el embarazo, pero bella como siempre… Ella se había convertido en su confidente y mejor amiga en estos 18 años, y la amaba como se ama a una hermana pequeña, por lo que no encontraba mejor persona para contarle lo que sentía en ese mismo momento.