Capítulo 10: Happily

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Igual Ari tiene razón. Igual me está manipulando. No creo. Y porque no creo que pase. No debería confiar tanto en él, siempre me ha intentado hundir. Pero es que no tiene pinta de que sea eso. Solo hemos estado hablando. No sé... mejor me limito a lo que tenemos que hacer, que es limpiar. Por cierto, ¿dónde mierda está? Sí que tarda mucho.

-Hey! Ya he llegado

Aaaaagh. Su sonrisa es demasiado bonita. No puedo pensar bien

-Hola! Venga, empecemos, que no me gustaría quedarnos atrapados

Empezamos por la primera aula. Es tranquilo, solo limpiamos.

-Me gustan tus rizos- Por qué digo eso!

-Gracias, a ti te quedan muy bien las trenzas.

Terminamos de limpiar el aula, y pasamos a la siguiente

Esta tarareando. Es una locura, pero esa canción es mi favorita.

-'Cause we're on fire, we're on fire now

-'Cause we're onfire, we're on fire now- La he clavado. Pero es incomodo

-I don't care what people say when we're together!

-Oh I just wanna be de one who holds you when you sleep

-I just wanna be you and I forever- Mientras digo eso, me acerco a él

-I know youwanna leave

-So c'mon baby be with me

-So happily...

-Esa canción me recuerda a ti, ¿sabes?

-A caso sabes qué significa?

-No, ni idea

-Pues si lo supieras, no te recordaría a mi

- Yo creo que sí- Murmura él, aunque no le doy importancia. Estamos un rato más con ese pasillo, limpiando al ritmo de otras canciones que nos sabemos los dos. No cantamos nada bien, pero es divertido y así vamos más rápido.

Son las seis y subimos a la planta de arriba

-Eh, vamos a limpiar el laboratorio

-Espera, terminamos esta aula y ya

Terminamos el aula, y vamos al laboratorio

Estamos limpiando un rato, hasta que se pone a hablar de física, química y biología.

-Entonces, ¿haces el trabajo conmigo?

-No creo que sepa tanto como tú, te sabes todo el tema

-Bueno, mis padres me meten mucha caña. De verdad, se volvieron locos cuando descubrieron que me habían castigado. No me dejan ir a cocina hasta que saque otro sobresaliente. Ojal'no tuviera que obedecerles

-Primero, tenías que haber mentido, y segundo y más importante, no tienes por qué obedecerles. Sólo digo que alguna vez podrías plantarles cara

-No es que no lo haya pensado, pero...es complicado. ¿Me pasas el estropajo?

-Sí. Sé que es complicado...pero, ¿alguna vez les has contado cómo te sientes?

-No...no realmente. No hay comunicación

-A ver, para mi es fácil. Mis padres se preocupan por mí, y si notan que estoy algo enfadada, me preguntan

-Ese es el problema, no notan que estoy hasta que hago algo bien

Me quedo callada, porque, bueno, sí.

-Mira, no sé, pero nuestra relación es más intermitente que...bueno, los intermitentes. Y sé que nos vamos a volver a enfadar otra vez. Pero, esto va para que no te olvides de esto. - Le miro a los ojos- Grita. No gritar de voz, sino hazles ver que estás ahí. Porque estás ahí. Y que nunca más se les ocurra olvidarse. Existes, y ellos lo deben saber.

No dice nada más. Supongo que estará pensando. Espero que no se rape el pelo o algo así, es verdad que su pelo es precioso

Por la ventanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora