el pequeño castaño puso los ojos en blanco, ¿cuántas veces había escuchado esas tontas tres palabras? tal vez casi todo el día, ¡pero no podían culparlo! estaba taaan, pero taaan aburrido que no le quedaba otra opción.
- por favor, yuta~. - rogó por milésima veces y la respuesta seguía siendo la misma.
- ahora no, bebé. - ugh, ahí estaba otra vez. odiaba esas tres estúpidas palabras, las odiaba con todo su pequeño ser, odiaba tanto tener que esperar, odiaba tanto que yuta estuviera tan ocupado hoy. - ¿por qué no~? - alargó la palabra mientras se cruzaba de brazos, removiéndose en el sillón donde estaba sentado, frunció el ceño cuando yuta tardó en responder, así que hizo un sonidito en forma de queja.
- ya te dije la razón, mark. - habló el japonés mirando los papeles que tenía en sus manos, el más bajito iba a responder cuando el asistente de yuta lo interrumpió tocando la puerta y adentrándose a la oficina.
su novio se levantó de su escritorio preguntándole al otro chico si todo estaba listo, a lo cual el chico que sostenía un portapapeles le respondió con un asentimiento. mark bufó, según por lo que había escuchado, yuta hoy tenía una importantísima -importante una mierda- reunión. ¡esto no era justo! estaba tan enojado con yuta y con el mundo, quería patalear y llorar hasta que alguien cumpliera su capricho. pero ¿cuál es el capricho de mark? él quería ser jodido, como nunca antes, todo su ser estaba consumido en necesidad, de pies a cabeza, mentiría si dijera que con solo una mirada de su señor, el pequeño estaría tan excitado, pero aquí estaba, una simple reunión era más importante que él. salió de sus pensamientos cuando vió a yuta aflojar el nudo de su corbata para rehacer este de nuevo, creyó que de su pequeña boquita comenzaba a caer saliva. maldición tenía que hacer algo, esto tenía que parar ya o iba a explotar.
- mark. - llamó el mayor. - vuelvo en aproximadamente una hora ¿bien? - mark asintió. - quiero que te comportes ¿okay? - habló con seriedad mientras organizaba algunos papeles, eso es ¡ya tenía un plan! - deseame suerte. - besó su frente y se fue por la puerta de la oficina.
- ¿comportarme? bien. - hablo para si mismo, espero solo unos minutos verificando que su novio no hubiera olvidado algo, se puso de pie y salió de la oficina también, oh yuta, esperemos no te lleves una sorpresa.
❕🦷 ❌
el mayor salió de la gran oficina para "explorar" la empresa de su novio, pero realmente estaba en busca de alguien, la persona que más odiaba su amado novio en toda este patético edificio, suh youngho, no entendía porque el odio hacia el estadounidense, si era muy agradable y carismático. daba pequeños saltitos al caminar, llegando rápidamente a su destino -que afortunadamente se encontraba justo al frente de la sala de conferencias donde su novio se encontraba, vaya conveniencia- se adentro al cubículo donde el más alto trabaja, como un rayo cubrió los ojos del más alto haciendo que este esbozará una sonrisa y entablaran una conversación, podía sentir una mirada penetrandolo desde lejos, le había pedido a youngho que le trajera una bebida así que esperaba sentado, en la silla del señor suh, meneaba levemente sus caderas haciendo que la silla girará junto a él, como quisiera que fuera el regazo de su señor.
youngho volvió junto con sus bebidas y pensó que era justo el momento de enloquecer a nakamoto un poquito. se levantó con entusiasmo tomando su bebida entre sus manos pero oopsie está se derramó sobre la camisa costosa del estadounidense frente a él, fingiendo estar avergonzado frente al hombre, aunque éste le decía que no se preocupara, tomó una servilleta -bastante delgada- y empezó a limpiar la camisa de youngho que había empapado todo el abdomen de la prenda, subiendo y bajando su mano por el abdomen del hombre, llenando sus manos del líquido, llevo una de estas hacía su boca y limpió sus dedos con su lengua, escuchó la puerta de la sala de conferencias abrirse observó a todos los inversionistas salir, pero solo podía sentir la mirada de yuta quemando su nunca, que cada vez se volvía más pero más intensa, hasta que sintió una mano rodear su brazo con fuerza, sin dejarlo despedirse de youngho fue tirado del brazo con fuerza, oh realmente estaba en problemas.