Prólogo

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Mi madre estuvo muy feliz de tenerme, feliz de tener en su vientre a su futura hija, una niña, una princesa. Durante su embarazo sintió mucho dolor y el medico no supo porqué. Al parecer cuando yo aun en su vientre causaba que mi madre sonriera por mí, sentía un gran dolor y a su vez se lo provocaba a ella por estar en su cuerpo.

Sin embargo, cuando ella dejó de reír a causa de todo el dolor comenzó a sentirse bien, pero tuvo miedo, incluso el día de mi nacimiento ella no sonrió. Me miró con tristeza y por alguna razón sabía que esa tristeza no me haría daño y que sus lágrimas me harían bien, a pesar de que nadie, ni ella misma lo entendiera.

Es una maldición, si hago reír siento dolor y si hago llorar siento alivio, pero por alguna razón nunca he sentido felicidad. No hubo ningún médico que pudiera explicar mi situación y era obvio ya que no era una enfermedad, pero tampoco pudo ningún brujo o chamán encontrar las respuestas que necesitaba, cómo, cuándo y por qué. ¿Cómo surgió la maldición? ¿Cuándo podré ser feliz y deshacerme de esto? y ¿Por qué a mí? ¿Por qué yo? esto es un castigo que no merezco.

Mi nombre es Elizabeth y esta es mi maldición: a cambio de tu sonrisa yo sentiré dolor.

A cambio de tu sonrisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora