El Caliz De Fuego

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POV JEAN

-Ya era 30 de octubre por ende el colegio estaba muy emocionado ya que hoy llegarían las escuelas que participarian en el torneo de lso 3 magos, yo no me encontraba emocionada en lo absoluto pero obviamente tenía curiosidad al respecto -- Yo en este momento me encuentro en mi habitación preparándome para bajar a cenar cuando de repente entró Draco junto al resto de los chicos abriendo de portazo y sobre exaltandome -

-Vamooos Jean, no queremos llegar tarde a la cena. -

-Pues bajen ustedes, yo iré después - dije de mala gana pues no me iba a apurar solo por eso -

-Corazón vamos, sabes que yo no iré sin ti - camino hasta mi y me abrazo por la cintura mientras yo aún le daba la espalda y me seguía viendo al espejo - Por favor - me habló al oído cosa que hizo que la piel se pusiera de gallina -

-Bien, bien vamos - el tomo mi mano emocionado y bajamos al G.C el cual ya estaba lleno cosa que era extraño porque aún era relativamente temprano para que la cena iniciará -

Y entonces, desde la última fi la, en la que estaban todos los profesores, Dumbledore gritó:

-¡Ajá! ¡Si no me equivoco, se acercan los representantes de Beauxbatons!

-¿Por dónde? -preguntaron muchos con impaciencia, mirando en diferentes direcciones.

-¡Por allí! -gritó uno de sexto, señalando hacia el bosque.
Una cosa larga, mucho más larga que una escoba (y, de hecho, que cien escobas), se acercaba al castillo por el cielo azul oscuro, haciéndose cada vez más grande.

-¡Es un dragón! -gritó uno de los de primero, perdiendo los estribos por completo.

-No seas idiota... ¡es una casa volante! -le dijo Dennis Creevey un pequeño Gryffindor hermano de Colin Creevey.

La suposición de Dennis estaba más cerca de la realidad. Cuando la gigantesca forma negra pasó por encima de las copas de los árboles del bosque prohibido casi rozándolas, y la luz que provenía del castillo la iluminó, vieron que se trataba de un carruaje colosal, de color azul pálido y del tamaño de una casa grande, que volaba hacia ellos tirado por una docena de caballos alados de color tostado pero con la crin y la cola blancas, cada uno del tamaño de un elefante.
Las tres filas delanteras de alumnos se echaron para atrás cuando el carruaje descendió precipitadamente y aterrizó a tremenda velocidad.
Entonces golpearon el suelo los cascos de los caballos, que eran más grandes que platos, metiendo tal ruido que Longbottom dio un salto y pisó a un alumno de Slytherin de quinto curso el cual casi le lanza un Crucio.

Un segundo más tarde el carruaje se posó en tierra, rebotando sobre las enormes ruedas, mientras los caballos sacudían su enorme cabeza y movían unos grandes ojos rojos.

Antes de que la puerta del carruaje se abriera, vi que llevaba un escudo: dos varitas mágicas doradas cruzadas, con tres estrellas que surgían de cada una.
Una muchacha vestida con un uniforme hermoso de color azul pálido saltó del carruaje al suelo, hizo una inclinación, buscó con las manos durante un momento algo en el suelo del carruaje y desplegó una escalerilla dorada.

Respetuosamente, retrocedió un paso. Entonces logre ver un zapato negro brillante, con tacón alto, que salía del interior del carruaje. Era un zapato del mismo tamaño que un trineo infantil. Al zapato le siguió, casi inmediatamente, la mujer más grande que había visto nunca.
Las dimensiones del carruaje y de los caballos quedaron inmediatamente explicadas. Algunos ahogaron un grito pero las serpientes nos mantuvimos en un respetuoso silencio.

En toda mi vida, sólo había visto una persona tan gigantesca como aquella mujer, y ése era el Guardabosques. Parecía que eran exactamente igual de altos. pero aun así aquella mujer -que ahora observaba desde el pie de la escalerilla a la multitud, que a su vez la miraba atónita a ella- parecía aún más grande. Al dar unos pasos entró de lleno en la zona iluminada por la luz del vestíbulo, y ésta reveló un hermoso rostro de piel morena, unos ojos cristalinos grandes y negros, y una nariz afilada.
Llevaba el pelo recogido por detrás, en la base del cuello, en un moño reluciente. Sus ropas eran de satén negro, y una multitud de cuentas de ópalo brillaban alrededor de la garganta y en sus gruesos dedos.

A veces no te soporto, pero te amo.. 🐍💚( Draco Malfoy) (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora