Por unos instantes de mi vida no supe, perdí el conocimiento hasta despertarme amarrada en una silla con varios hombres armados a mi lado y un señor bastante mayor al frente de mí, no podía hablar, estaba amordazada en que momento me había metido en esto.
-dans la chanteuse señorita – hablo el hombre de gafas- sabes por qué estás aquí- negué era lo único que podía hacer- veamos te acuerdas de una fiesta que estuviste la hace una semana atrás estuviste bailando con un chico, llevaba una chamarra negra...- mi cara cambio de expresión, como no lo iba saber ese día estaba con mi novio o eso era lo que él me hacía creer, mis ojos me picaban sé que estaba a punto de llorar, tenía una semana sin saber de el, después de lo que ocurrió en el bar...
-vea niña no sé qué vio el patrón en ti, pero hoy te vas con el. entendido? te daremos una faja no preguntes que lleva solo la entregaras a el entendido- uno de los hombres que estaba atrás me quito la mordaza y así solté un quejido al igual que las ataduras- no sé de qué hablan! – Salí corriendo y también un grito en el momento de una orden, alguien me tomo por detrás poniéndome contra la pared y un susurro- si te portas mal la pagaras – unas lágrimas emanaron pasando por mis mejillas y una pierna estaba en el medio de las mías mientras un celular a mi oído lo pusieron y esa voz... me desespero y empecé a llorar....
-jonh...- entre sollozos era lo único que decía- princesa que pasa? ¿Tranquila te van a traer conmigo porque estas así? – su voz se notaba de los más tranquilo o eso dejo de serlo hasta que le dije – me dijeron que si me portaba mal me iban a castigar y me tienen en una posición muy in....- aquella voz dulce se puso dura – dile que me pongan en alta voz – entre lloridos les dije y así lo hicieron –me escuchan ... - todos aquellos respondieron – bien... vean gran hijueputas, buenos para nada, si le tocan un pelo a mi princesa los mato y antes de eso lo castro yo mismo. ¡Así que la suelten ya! – patrón se iba a escapar – como no se iba a escapar con el tremendo susto malparíos! Me la traen sana y salva sin ningún rasguño...- la llamada se colgó y el hombre que me tenía contra la pared me soltó mientras todos estaban pálidos como si aquellas palabras los hubieran matado en vida, tome la faja y me la puse calmándome Salí del baño y el hombre de gafas le dijo al que me tenía amarrada me llevase y así fue, un carro Chevrolet Electric Pickup negro hasta sus vidrios.
El viaje fue largo
Bastante. Y solo los recuerdos de esa noche me invadían tras la impotencia de volver a verlo
Después de 8hrs en carro, llegamos y entramos a un garaje exclusivamente grande y allí lo vi, su traje negro que lo hacía ver jodidamente atractivo con su expresión dura, hasta que baje del carro me sentía muy apenada y emocionada ya que lo llevaba no era adecuado, me secuestraron en toalla, sonrió de lado maliciosamente para así tomarme de la cintura y levantar mi mentón – que traes debajo de la toalla – con mis mejillas más rojas que un tomate solo pude contestar- no se me dijeron que te lo entregaran – pude ver como sus ojos se fijaron en el hombre que me trajo – después hablo contigo – mientras el chico suplicaba por su vida otros se lo llevaron arrastras.
-qué hay de mí? - le pregunte y volvió su expresión amable que solo solía tener conmigo – de ti... me encargo yo- me tomo en sus brazos llevándome a una habitación cerrando la puerta la cama tenía sábanas blancas revolcadas y mi pensamiento se hacía preguntas tal vez él estuvo con otra? ¿en este mismo cuarto ... baje mi mirada y él lo noto- que te pasa princesa – no lo mire y solo apretaba mi toalla – has... traído a otras aquí?... –apreté mis ojos y escuché una risita tomándome de la cintura besando mis labios para luego tomar mi mentón y verme- no te traería un lugar donde otras han estado – abrí los ojos lentamente – te creo...
Realmente lo hacia, su cara no demostraba ninguna mentira, el me soltó y me quite la toalla al frente de este, me sentía muy apenada ya que no dejaba de verme y sonreír – aquí tienes la faja- me la quite y así, me puse rápidamente la toalla nuevamente – tenía una linda vista – hizo un pequeño puchero, no estaba desnuda estaba en ropa interior para ser clara nunca había estado con él, vi como agarraba la faja y la rompía un poco viéndose un polvo rosado – bien...- la guardo en una mochila mientras estaba sentada en el borde de la cama.
-tenía miedo no volver a verte- el suspiro y acaricio mi mejilla – nena sabes que no me pasara nada, si no, no estuviese en donde estoy- tenía razón él era chico más joven quien se había vuelto mafioso- pero si te pasa algo yo... no sé qué haría – suspiro y me tumbo levemente a la cama besándome, abriendo mis piernas y acomodándose entre estas haciendo el beso un poco más caluroso- mmh – me sentía extraña y sonidos escapaban de mi boca con tan solo aquel beso mientras movía este un poco su cadera, pero abruptamente unos gritos y disparos acabaron con aquella escena nos separamos mientras uno de sus escoltas entro – patrón se nos metieron! – mierda..- escuche salir de su boca, le tiro el bolso donde estaba la faja y a mi me agarro de la mano – tenemos que correr –
¡Estaba volviendo a pasar, pero esta vez no me soltaba tal vez tenía miedo, aunque era imposible que alguien como él tuviese miedo, en la multitud de gente que corría nuestras manos se deslizaron – princesa! – puede oír – John – grite, pero nadie me contesto, pero igual debía salir de aquella zona corrí hasta llegar una casita de madera y me quede quieta, desde cuando era prófuga de la justicia
Claro que lo sabes desde ese día lo fui...
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En que momento
أدب المراهقينUn día eres una persona normal y ahora eres un prófuga y secuestrada? que es esto!