Estás libre está noche [Michaeng GiP]

Capitulo IX

En el trayecto a mi departamento me quede dormida, Bambam me despertó suavemente cuando llegamos, adormilada le di un beso y baje de su auto. Al entrar a mi habitación pudo mas mi curiosidad que mi cansancio, así que encendí la laptop y mientras tanto me puse mi pijama. Una vez conectada a internet me metí a Google quizá encontraría alguna información de ella, con los dedos un poco temblorosos tecleé su nombre, aparecieron varias paginas, entre a una donde estaba una especie de biografía.

Son Chae-young nació el  23 de abril de 1991 en Seúl, Corea del Sur. Hija del matrimonio Son conformado por su madre Momo una de los mejores y mas prestigiadas neurocirujanas de Corea del sur, y su otra madre Dahyun reconocida pintora. Su hermano mayor es jugador profesional de futbol americano, forma parte del equipo de pieles rojas de Washington. Su hermana menor acaba de graduarse de una prestigiada escuela de diseño de modas de Paris. Chaeyoung es egresada de la universidad de Harvard donde curso Administración de empresas, cuenta con una maestría en Economía de la misma. Actualmente es dueña de una pequeña cadena de hoteles que inicio con el Rose imperial de la ciudad de Nueva Jersey. Desde temprana edad mostro su inquietud por las chicas, ganándose a pulso en la preparatoria y en la universidad la fama de conquistadora que ahora la ha llevado a ser considerada la soltera mas codiciada del medio en el que se desenvuelve. Es socia y vicepresidenta de la fundación que inicio hace 15 años su padre la cual se dedica a ayudar a personas con enfermedades.

Eche un vistazo en otras paginas y en una de sociales, había fotos de la boda de su hermano, me sorprendió ver que estaba casado con una de las modelos mas importantes del país Yeri, y donde casi me caigo de la mesa fue cuando mi mente proceso que su hermana es nada mas y nada menos que Son Katerina la nueva diseñadora a la que estábamos organizando el evento del lanzamiento de su linea de ropa y que seria el jueves de la semana siguiente precisamente en uno de los salones del hotel Rose Imperial. 

Me lleve las manos a la cabeza, sin poder dar crédito a que ella fuera la dueña del hotel donde me citaba, no solo era cliente de mi novio sino que su hermana era cliente de la agencia, parecía ser una chica ejemplar, a excepción de su forma de playgirl "algún defecto debería de tener, nadie es perfecto" me dije en voz alta, no podía ser cierto lo que me estaba pasando, toparme con una desconocida que resulto tener mas lazos conmigo que los que jamás imagine parecía que el destino se empeñaba en complicarme la vida.

Esa noche casi no pude dormir, tenia demasiadas dudas en mi cabeza y debía reconocer que una gran parte de mi iba a extrañar esos encuentros pero me quedaba claro que ya no podían ser, no cuando ella conocía a Bambam y cuando yo había comprobado que tenia a alguien en su vida, cualquiera que fuera la relacion que llevaran, una cosa era tener la sospecha y otra muy diferente corroborarlo de primera mano, además Somi era una buena chica, hasta podríamos ser amigas.

Al día siguiente llegue muy temprano a la oficina, tenia que mantener mi mente ocupada lo mas que pudiera o me volvería loca. Como a la media hora llego Rose que se sorprendió de verme ahí a esa hora. A medio día me llamo Nayeon para contarme que había peleado con Jaeyoung al parecer su relacion se estaba acabando de apoco me llamo muchísimo la atención algo que me dijo "ahora entiendo que todo debe ser equilibrado, ni puro amor ni pro sexo, el deseo no es suficiente, si no hay amor en algún momento se termina la pasión"

Me quede pensando en sus palabras y tenia razón, yo tenia el amor de Bambam y la pasión de Chaeyoung, ambos me daban el equilibrio, pero separados la balanza se inclinaba hacia alguno de los lados, que difíciles son las relaciones humanas. Los días me habían pasado volando, a pesar de que no dormía mucho y sentía la necesidad de llamar a Chaeyoung pero ahora no podría resistir que su celular me mandara a buzón, además ella no daba ninguna señal de querer estar conmigo y yo no iba a rogarle ahora que ambas sabíamos quienes éramos en realidad.