Suayeon One shots (G!P)

Cafetería pt. 2

—te amo Siyeon, me gustas mucho...sobre todo tu trasero.

—jajaja vamos SuA.—se alejo un poco de la más baja separándose y logrando librarse del agarre de esta.— la broma fue graciosa enserio, por un momento me lo creí.

—No es una broma Siyeon.— el rostro de SuA era serio, estaba molesta por el comentario.—te estoy hablando enserio.

—Espera tengo que cerrar.—Siyeon no quiso seguir con la conversación así que decidió que su huida más rápida de la cocina sería no darle importancia al tema.— hoy las ventas estuvieron bien pero supongo que habrá días mejores ¿No crees?

—Siyeon.—siguió a la chica con la mirada al ver cómo está salia por la puerta de la cocina y se dirigía a colocar el cartel de cerrado en la entrada.

—claro que aún tengo que terminar de preparar los cupcakes para mañana, estoy segura de que mañana se venderán.—saco un pañuelo húmedo comenzando con su labor de limpiar las mesas, en este caso la mesa que SuA había ocupado.

—Siyeon.

—¿Crees que es mejor el glaseado de limón o de fresa porque para mí los dos saben igu...

—¡Siyeon!—grito al empujar a la chica contra una pared cerca de su mesa.—¡Me gustas!¡Tu eres quien me gusta!

—S-suA....y-yo...—los labios de SuA no la dejaron hablar, un beso la silencio.

Los labios de SuA eran cálidos y suaves, aún con restos del sabor a chocolate en estos, era como saborear un dulce, se estaba derritiendo en su boca. Al principio se resistió tan solo por unos segundos hasta que finalmente se dejó llevar por estos, sus muñecas dejaron de forcejear y prefirió sostenerse de los brazos de la otra castaña que la estaba haciendo caer en una maravilla con ese beso.

—Escucha Siyeon, e-en verdad me gustas mucho, eres una chica maravillosa, siempre me escuchas, me haces reír, eres la mejor persona que eh conocido, haces tantas cosas que parecen sencillas pero no lo son, eres trabajadora y eres muy positiva incluso si estás tú sola.—el corazón de SuA brincaba por todos lados, velozmente.— se que puedo parecer una pervertida y que probablemente no te guste mi actitud...pero desde que ví tu trasero no pude evitar dejar de verte, era como si fueras un imán para mí... lamento si te incómodo pero no creo poder callarme más, disfruto de venir aquí solo por ti, me encantas y necesito estar cerca de ti, por eso me gustas Siyeon, me gustas demasiado.

—SuA...—no tenía palabras, todo había caído de golpe, no sabía que podía responder, se sentía mareada por el beso y conmovida con las dulces palabras. Pudo sentir como su estómago se revolvió como un remolino de mariposas dentro de ella.

— Lo siento en verdad, se que soy una pervertida pero enserio, enserio...me gustas mucho.— sus miradas se cruzaron y nuevamente compartieron un beso, uno más subido de tono.

Sus lenguas se cruzaban, dentro y fuera de sus bocas, Siyeon sentía como el músculo viscoso se retorcía dentro de su boca, y no podía evitar gemir y jadear al sentir su boca siendo dominada por la más baja. Ya hacía rato que a Siyeon se le había olvidado todo lo anterior.

Disfrutaba de ese fogoso beso, Siyeon nunca fue buena en las relaciones o besando pero está vez se sentía como si fuera una experta, o por lo menos lo era SuA ya que era como si estuvieran bailando y ella fuera quien la guiará en ese beso dónde sus lenguas eran quienes danzaban.

Ambas ahora estaban bien abrazadas y sujetas, SuA no iba a permitir que Siyeon escapara tan fácilmente de sus manos.

Una de estas lentamente bajo por todo un costado del cuerpo de la mesera hasta que su mano se detuvo sobre su muslo, una mano más grande que la suya fue donde la detuvo, Siyeon había detenido su mano ya que sabía a dónde iba a llegar y también rompió aquel beso recuperando un poco la compostura.