Una familia ( dilucxkaeya )

Una revisión con honestidad

Eran las 19:15hs de un Martes cualquiera y Kaeya se había hecho daño en una misión de reconocimiento, nada especial, solo una herida en su torso. Cómo Kaeya no tenía con quien más quedarse en lo que se recuperaba, tomó "prestada" la casa de Diluc.
Albedo, alquimista, y Bárbara, una curandera, ayudaban a Kaeya con su tratamiento en una de las salas de estudio del viñedo mientras Diluc y algunas criadas vigilaban todo.

Al cabo de un tiempo de empezar el tratamiento y de hacer las preguntas habituales, ¿Te duele? ¿Como te despertaste hoy? ¿Crees poder soportar un día más de medicamentos?, Mr. Diluc mandó a las criadas a sus puestos mientras el aparentaba irse, ¿Aparentaba? Si, exactamente eso, Diluc quería ver que era capaz de decir Kaeya de él en su ausencia.
Albedo y Bárbara sabían que estaba ahí, pero Kaeya no, puesto a que Diluc estaba parado al lado de la puerta la cual estaba del lado contrario a la vista de la pobre lisiada.

Y empezó.
Albedo no es tonto y sabía que buscaba Diluc con todo esto, así que se propuso ser un poco de ayuda y hacer las preguntas pertinentes para llegar a la conversación de interés del pelirrojo.

Albedo: ¿Pensaste alguna vez en declararte?

De acuerdo, tal vez eso fue demasiado directo viniendo de Albedo era de esperarse.

Kaeya: ¿De que hablas? ¿De quien?

Bárbara, que no tiene un pelo de tonta y le encanta hacer felices a todos, decidió seguir el juego.

Bárbara: Bueno, creemos que es obvio que lo quieres, ¿No Albedo?

Albedo: Si, pero si prefieres no hablar de ello está bien.

Kaeya: .... ¿Sabian que me gusta cantar?

Bárbara: ¿Cantar? ¡Es genial! ¿Te sabes alguna? Yo me se muchas

Bárbara es tan fácil de distraer que Diluc casi empieza a reírse, pero Albedo no es el mismo caso.

Albedo: ¿Ah si? ¿A quien le cantas?

Kaeya: Hay un par de niños en el orfanato que quiero mucho, los suelo visitar a diario y me encanta cantarles algo, se ven realmente felices cuando estamos juntos

Albedo: ¿Sabias que hay un hechizo para hacer clones de una misma persona? ¿Por qué no nos cantas algo en lo que esperamos los resultados? Así podrías mostrarnos tu talento

Albedo es como una serpiente cuando de desmentir se trata, ataca sin piedad y con sutileza. Bárbara por su lado estaba realmente emocionada con la idea

Bárbara: Espera, ¿Por que queremos más Kaeyas? ¿Con uno no es suficiente?

Albedo: Sí si quieres solamente cantar, pero apuesto a que nuestro amigo también sabe tocar varios instrumentos ¿No? Así podria darnos un espectáculo completo.

Bárbara: ¿Y los instrumentos?

Albedo: Alquimia.

Kaeya que en realidad no mentía aceptó gustoso de la oferta, aunque algo le parecía realmente sospechoso de todo esto, pero tienendo en cuenta que es Albedo... ¿Qué más dá?
Y así tan pronto como se hicieron los instrumentos un grupo de Kaeyas apareció, pero todos los clones debían tener los ojos vendados o según Albedo pasaría un -no sé qué- y Kaeya podría enloquecer.

Bárbara: OH! Canta algo con el corazón, aprovecha y liberate de todo! Dejar ir todo en una canción es lo que más amo

Kaeya: ¿Que debería cantar?

Albedo: Lo que quieras, algo que creas o que no te deje dormir

Y así, Kaeya empezó a cantar "Tu falta de querer" de Mon Laferte, una cantante no tan popular en la ciudad.