Narra Taehyung
Las cosas se pusieron complicadas cuando faltaron pocos días para viajar. Hoseok seguía sin salir del hospital y los doctores dijeron que llevaría un par de semanas más para ser dado de alta. Vi la decepción y tristeza cruzar por el rostro de Hobi y no iba a permitir que volviera a sufrir.
Esa misma tarde fui a hablar con los directores de la universidad y pude convencerlos de quedarme junto con Hoseok hasta que se recupere y así poder viajar los dos juntos para no dejarle solo en estos momentos difíciles.
Ellos luego de hablar seriamente con los reclutadores lograron extender nuestro tiempo hasta que Hoseok pudiera viajar. Les agradecí inmensamente porque fueron nuestra salvación y ahora Hoseok no se quedaría solo por mucho tiempo. Sería un gran error dejarlo, ahora su peor enemigo es él mismo y tengo que ayudar a que cambie esa manera de pensar.
Lo bueno es que una psicóloga iba por varias horas a hablar con él para ayudarlo a superar todo lo que vivió. También recuerdo cuando los padres de JongSuk llegaron al cuarto y Hoseok me hizo quedar allí. Ellos se disculparon por haberlo demandado sin averiguar bien las cosas. Dijeron que nunca se les ocurrió que su hijo fuera semejante monstruo y que estaban un poco agradecidos por haber hecho justicia por todas las personas que lastimó.
Creo que desde esa larga charla llena de llanto y disculpas, Hoseok se sintió mejor emocionalmente. Ayudó demasiado que ellos hayan dicho que lo mejor que hizo fue cobrar cada golpe y dolor que le causó, porque si él hubiese seguido con vida, ellos seguirían sin saber todo el mal que hizo y él lo continuaría haciendo. Dejaron en claro que como padres sentían un gran dolor, pero que no hubiesen sido capaces de perdonarlo si hubiese sobrevivido.
Fue una charla larga, Hoseok aceptó las disculpas y también les agradeció que hayan ido a hablar con él. Ninguno guardó rencores y todos encontraron tranquilidad luego de ello. Hasta el último momento en el que estuve estuvo relajado y yo tenía aquella mirada llena de terror.
Pero también había momentos en los que el terror le inundaba al seguir viendo a JongSuk dentro de la habitación. Era difícil verle de esa manera, tratando de huir de algo que ni siquiera estaba allí, algo que era producto de su mente lastimada. Tenían que sedarlo porque trataba de salir corriendo y se hacía daño quitándose los cables que estaban conectados a su cuerpo.
Los chicos solían asustarse cuando eso pasaba hasta que supieron encontrar la manera de calmarlo. Cuando sucedía aquello cuando estaba conmigo solía abrazarle suavemente, ocultaba su rostro en mi pecho y le cantaba alguna de las canciones que compusimos juntos. Se calmaba rápidamente y ya no tenían que sedarlo para poder calmarlo.
Nuestros padres se enteraron cuando el caso llegó a Gwangju. Tuvimos que recibirlos y nos ganamos varios golpes de parte de nuestras mamás. No dejamos que ellos fueran a visitarlo y de alguna manera logramos enviarlos de vuelta. Creo que solo querían asegurarse de que estuviésemos bien.
La mamá de Hoseok mandó de regreso a su esposo para que volviera al trabajo y ella se quedó en nuestro departamento preparando comida para mí cuando los chicos tuvieron que irse a Estados Unidos. Cuando ellos también quisieron quedarse no se los permití porque hubiese sido una molestia para los reclutadores y estaríamos abusando de su solidaridad.
La mamá de Hoseok se ofreció a quedarse para cocinarme cada que llegara del hospital y para cuando Hoseok saliera. No negué su ayuda porque pasaba todo el tiempo dentro del hospital y no hubiese tenido tiempo de hacerme algo de comer. Ella me llevaba el desayuno y el almuerzo, también lo hacía para Hoseok, pero se lo daba en la boca, como si fuese un bebé.
Supe que las cosas habían avanzado un poco cuando Hoseok sonrió por una broma que me hizo su madre. Verlo volver a sonreír fue la mayor recompensa que me pudo haber dado la vida. Fue como volver a nacer y lloré como un niño, no me avergüenzo por ello.
Solía ir a caminar cuando él tenía la cita con la psicóloga y como eran por largas horas solo regresaba por la noche para despedirme y hacerlo dormir. Era lindo verle descansar tranquilamente, sin temor o sin algún recuerdo de ese maldito.
Cuando Hoseok salga y pueda caminar sin problema lo llevaría a la tumba de él, solo allí podría cerrar ciclo. Creo que sigue viéndolo porque alguna parte de su cerebro no acepta que está muerto y no lo procesa. Pienso que servirá confirmarle que él ya no volvería a hacerle daño, nunca más.
Empecé a cantarle a cada momento porque eso le mantenía centrado y decía que le gustaba escucharme. También le llevaba nuevas canciones que los chicos mandaban desde California. Ellos también se grababan y los videos se los indicaba a Hoseok para que recuerde que tiene más amigos esperando por él para tener un nuevo comienzo.
(...)
No sé qué pasó pero Hoseok dejó de hablar totalmente de un momento a otro. Lo poco que había empezado a decir días atrás ahora era nada. Recuerdo que la noche anterior me agradeció por cantarle mi nueva composición, pero cuando llegué en la mañana me informaron que tuvieron que sedarlo porque tuvo un ataque muy irracional en la madrugada.
Al entrar a su habitación y verlo pálido, con su vista perdida y sin moverse me confirmó que algo le había afectado demasiado. Lo único que me confirmaba que estaba vivo era la máquina que monitoreaba su pulso. Traté de hablar con él, pero no obtuve ninguna respuesta. Quise saber la razón que le hizo tener una recaída de ese nivel, pero no hubo nada de su parte.
Tuve que llamar a la psicóloga para que revisara su estado y por suerte ella llegó poco tiempo después. Yo salí de la habitación para darles su espacio y dejar que la psicóloga haga bien su trabajo y trate de arreglar un poco las cosas.
Pensé en irme a caminar un poco y liberar el estrés porque estaba cansado mentalmente y también necesitaba mis momentos para poner en orden mis emociones que estaban muy inestables. Pero la psicóloga salió de la habitación y me pidió que entrara porque Hoseok me necesitaba.
Sin dudarlo entré y mi pecho se presionó cuando vi a Hoseok llorar. Me acerqué a su lado y no me dio tiempo a nada cuando me abrazó por la cintura. Inmediatamente le devolví el abrazo y empecé a dejar besos en su cabello para reconfortarlo. La psicóloga dijo algo de ayuda emocional mutua antes de irse y nos dejó a los dos solos.
No conversamos nada, pero estuvimos abrazándonos hasta que su mamá llegó con la comida del almuerzo. No quise separarme de él, porque era la primera vez en todo este tiempo que él tomaba la iniciativa y eso me alegraba mucho.
La psicóloga dijo que tendría miedo al contacto físico y que sería difícil para él ser afectivo de nuevo. Pero lo que era raro es que siempre aceptó mis abrazos, caricias y cercanía, nunca huyó o se asustó, eso le calmaba, pero siempre era yo quien lo hacía primero, pero esa vez fue él.
Aquel día todo en mi interior volvió a calmarse con su acción. Tuve paz emocional mientras lo abrazaba, me sentía reconfortado y con ganas de jamás volver a soltarlo. Así es, me sentía en el cielo y aquel sentimiento era maravilloso.
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Una mala decisión [VHOPE/VOPE]
Fanfiction"Si hay algo que me caracteriza, es que siempre tomo buenas decisiones que me llevan directamente a un buen resultado. Pero no sé qué me pasó aquella noche. Tengo 21 años y estudio danza en la universidad de artes de Corea del Sur. Soy sociable y mi...