Después del Arte

Adiós

—¿Por qué nos nos cuentan lo que sucedió? Todo esto no se ve bien, ¿Qué tanta mierda pasó en estos días? —Ethan Reed cuestiona.

Todos se encuentran en la casa Sky, donde se reúnen todos los viejos padres, así como sus jóvenes hijos, quienes mantienen una distancia real entre ellos, cuando, hace poco estaban comportándose como hermanos.

Blue se pone de pie y camina hacia los varones frente a ella, tiene puestas unas gafas contra el sol, para ocultar lo hinchado de sus ojos al haber estado llorando toda la noche.

—Hemos criado bien... lo hicimos —dice ella, en general—. Si ustedes guardaban tanta mierda dentro, no es culpa nuestra porque ¡Todos! ofrecimos nuestros oídos, nuestros brazos y todo lo del mundo para que crecieran bien, fuertes y seguros, ¿Qué demonios les sucede?

—No quería ser escritor —murmura Alessandro y Blue ríe secamente, antes de realizar un ademán agresivo.

—¡¿Y eso qué mierda me importa?! ¡Te habría apoyado hasta en el fin del mundo, Alessandro! Esa mierda no tiene nada que ver con todo lo que hiciste... y quién sabe qué me ocultas —señala. Poe la toma por detrás, en un intento de calmarla entre sus brazos.

—Enzo, ¿Nos dices qué sucede con todos? —cuestiona Angelo, seriamente.

—Enzo ni siquiera sabe cómo centrar su emociones, ¿Qué crees que le estás pidiendo, tío? —Blake cuestiona—. No puede mantenerse estable él solo, ¿Qué versión crees que nos va a decir? —ríe, burlesco.

—Avery... Ambrose, ¿Ustedes dos...?

—Me voy a mudar de casa. No voy a vivir más con los chicos —Ambrose suelta y Avery intenta extender su mano, para tomar la mano del que acaba de hablar. Jown y Heers se observan y Franco enmudece.

—¿Qué significa eso? —Rin es quien cuestiona a ambos—, ¿Qué es todo esto?

Era difícil de decir. 

Angelo y Violet se han marchado a Italia hace unas horas, cuando los mejores amigos, los siete del arte, se habían dado a golpes en medio del aeropuerto. Entonces, ¿Qué había pasado?

Tal vez fueron los besos que Valentino y Avery estaban intercambiando la última vez, o ese momento en el cual Enzo los vio follando en la habitación, cuando iba a pedirle al artista que le perdonara y le diera la oportunidad de más. Incluso, podría ser Violet, una menor de edad gritando con desespero en un baño de una discoteca de mala muerte, con un drogado Alessandro entre sus brazos y cuando la música ensordecía. Incluso podría ser ellos mismos, ese momento en el cual Avery hizo lo impensable y quebró de una forma muy cruel su relación con Ambrose.

Los únicos que aún pueden apoyarse entre miradas, son Stefano y Blake.

Aunque... no entre todos. Enzo había hechos cosas inimaginables la última vez, despreciado así la amistad de Blake y creando un conflicto entre ambos. Avery incluso había pedido disculpas, Violet estaba asustada entre todo lo que se venía sobre ella. Valentino había intentado ayudar a Ambrose, ganándose así el desprecio de Avery.

Podían ver cómo todo se venía abajo una vez más.

Pero... esos hechos son una historia oculta, que podría saberse alguna vez, o nunca.

—Nos vamos a separar —dicta Blake, en general de sus amigos—. Creo que, nadie está preparado para hablar de ello y respeto sus decisiones. Nos hemos hecho mucho daño en los últimos días y lo mejor es distancia.

—Coincido con Blake —Stefano dice—. Nos hemos comportado muy inmaduros y tal vez, la distancia es lo necesario para sanar nuestras heridas. Ustedes no han tenido nada que ver en ello, papá, tíos.

Lo mejor era cerrar los capítulos y que cada uno se marchase a casa.

Entonces, ¿Qué clase de final era aquel?

Uno abierto, uno un poco secreto, uno realmente malo y con tantas preguntas.

*

FINAL

Sí, este es el final. Sé que ha quedado demasiado abierto, demasiadas cosas sin resolver, pero planeo escribirlas en el futuro. Por ahora, ustedes protagonizan a los padres, sin saber qué realmente pasó, con muchas preguntas ... pero el secreto de los siete quedará hasta que sus heridas sanen. 

Y, ¿Quién sabe? Tal vez, en un futuro puedan acercarse y reencontrarse.