Cuando menos lo esperaba

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Han pasado tres años desde que me fui de EcoModa, no puedo creer que este de vuelta en Bogotá.

Aló, Daniel hermano... si llegué bien gracias... emm estoy desempacando aún...y tú cómo estás? listo para mañana?

Eran las 12 del medio día y las campanas de la iglesia comenzaban a sonar para anunciar la entrada de la novia. Daniel, pulcro como siempre esperaba impaciente el momento de dar el sí.

Marcela llegó a la fiesta del matrimonio de su hermano, ella lucía un hermoso vestido negro que le formaba una sexy figura. Esa noche estaba sola en medio de la multitud, pero se sentía observada, sentía la mirada penetrante de alguien, mas no lograba identificar de quién.

Desea algún trago, le preguntó uno de los meseros quien al retirarse le cerró un ojo un tanto coqueto, él era evidentemente más joven que ella, pero Marcela sentía que lo conocía de algún lado, pero no lograba recordar de donde.

Cuando salí a fumar un cigarro, vi que estaba ese atrevido mesero fumando con otra chica.

Marcela. De dónde lo conozco? Se nota que es alguien origen humilde, así que es muy probable que lo esté confundiendo con otra persona, yo jamás, en ninguna circunstancia habría socializado con alguien así.

Mientras fumaba con Vanessa noté que esa mujer me miraba. Cómo olvidarla? probablemente ella no me recuerde, pero desde aquel incidente en la comisaría, cuando la invité a rumbear, nunca dejé que pensar en su cara toda bella, recuerdo que me dijo que aceptaría mi invitación,  pero desde esa noche nunca más la vi, así que ahora es mi oportunidad y no la pienso dejar pasar.

Marcela. Mientras me dirigía al baño, sentí que alguien me tomó del brazo, cuando miré noté que era él, me retiró de mi camino y me llevó hacia un rincón apartado que al parecer la gente ignoraba su existencia, si bien no conocía a ese hombre, tenía algo que me llamaba a seguirlo, sentía que lo conocía, pero aún no recuerdo de dónde.

X. Veo que ya se olvidó de mi, le dijo mirándola fijamente a los ojos.

Marcela. Yo a usted no lo conozco, le pido que me suelte, le dijo ella un poco nerviosa.

X. Claro que menconoce, tal vez no lo recuerda, pero usted me debe una salida, yo jamás lo olvide, es decir, jamas olvide su rostro, le dijo mientras se acercaba a ella.

Marcela. Yo creo que me confundes, porque llegué recién esta mañana, no tengo como haberte conocido.

X. No, es que yo te pienso y te veo en mis sueños desde mucho antes,  hace aproximadamente tres años que nos conocimos, tú estabas con una rubia y yo con mis amigos, no sé si lo recuerdas terminamos en una comisaría, desde ese momento te transformaste en la mujer más hermosa que jamás había visto y que jamás volví a ver, hasta ahora.

Marcela recordó aquel día y a ese joven de ojos irritados, por el gas pimienta que le había rociado, ese recuerdo le provocó una leve sonrisa.

X. Veo que ya me recordó, por cierto, me llamo Rubén. Marcela, respondió ella.

Rubén. Marcela, me muero de ganas de comerte la boca, le dijo a centímetros de sus labios.

Marcela. Qué esperas? le dijo ella, mientras tomaba la iniciativa.

Se besaron apasionadamente,  hace mucho tiempo que Marcela no besaba de esa manera, tan desenfrenada,  tan entregada, sus respiraciones comenzaron a agitarse, ambos querían más, pero había mucha gente, los podrían descubrir y eso a ella no le convenía, sería un escándalo, la hermana del novio con un mesero de la boda.

Marcela. Esperame en el estacionamiento, le dijo al oído.

Marcela fue al baño e intentó refrescarse, pero no lo consiguió, sentía como si el agua se evaporara antes de tocar su piel, se miró al espejo, se puso un poco de perfume y se fue camino al estacionamiento. Cuando llegó lo vio parado en la entrada, le tomó la mano y lo guió hasta su auto.

Una vez dentro, dieron rienda suelta a la pasión, se besaron como si sus labios hubiesen sido creados para encajar, se tocaban con desesperación, disfrutaron de un sexo salvaje, ambos quedaron exhaustos, pero satisfechos.

Rubén. Marcela, yo no soy estúpido, yo sé que no soy un hombre que tú consideres para algo más que lo que acaba de pasar, pero si quieres buscarme algún día ya sabes mi nombre y donde vivo, solo basta que preguntes por mí.

Él le da un último beso y regresa a la boda.

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⏰ Última actualización: Feb 26, 2021 ⏰

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