Una Potter, ¿o no?|Draco Malfoy

Primer año

Era un extraño día en Privet Drive pues de un día para otro, empezaron a llegar unas extrañas cartas a la casa de los Dursley, y eso no era lo raro, por supuesto, lo raro era que como destinatarios de todas esas cartas eran Aurore y Harry Potter pues no tenían más familia a parte de ellos.

Así que cansados de tantas cartas Vernon Dursley decidieron que se irían unos días a una casa en una piedra en medio del mar, el señor y la señora Dursley dormirían en una cama doble que había en el piso de arriba, Dudley Dursley, el hijo del matrimonio dormiría en el sofá de la pequeña sala que tenía la casa y los hermanos Potter los sobrinos de dicho matrimonio, dormirían en el suelo al lado de su primo. 

Esa misma noche los mellizos cumplirían finalmente los once años, esperaron pacientemente a que llegara las doce de la noche, cuando el reloj de muñeca de su primo empezó a pitar indicando las doce, soplaron las "velas" de la tarta que dibujaron en el arenoso suelo.

De repente, se escuchó un fuerte golpe en la puerta de la casa y dicho objeto se cayó, alarmados el señor y la señora Dursley bajaron asustados, el primero con una escopeta en la mano, apareció un hombre parecido a un gigante, pero no podía serlo pues era más pequeños que aquellas gigantescas criaturas.

Dicho hombre, se llamaba Rubeus Hagrid, venía del colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, los mellizos no sabían nada sobre aquel colegio y furioso Hagrid les explicó su historia, momentos después se giró hacía a los Dursley dispuesto a enfrentarlos por ocultarles eso a sus sobrinos y de tal enfado Dudley Dursley terminó con una cola de cerdo.

Al día siguiente, Harry y Aurore estaban en el Callejon Diagon comprando sus útiles escolares junto a Hagrid para poder ir a Hogwarts, mientras ellos fueron a comprar sus varitas en Ollivanders, Hagrid fue a comprarles unos pequeños regalos por su cumpleaños. La varita de Harry resultó ser de madera de acebo, núcleo de cola de fénix y mide 28 centímetros al contrario la varita de Aurore resultó ser de madera de abeto, núcleo de fibra de corazón de dragon y mide 12 centímetros.

Al cabo de un rato Hagrid volvió con una hermosa lechuza color blanca y otra color marrón claro, con unas cuantas plumas blancas y lo característico de esta lechuza es que tenía el pico rojo. 

Los mellizos volvieron a la casa de los Dursleys, y enseguida subieron a su habitación a ojear todo lo nuevo que tenían, mientras leían un libro de lo que parecía ser la Historia de la Magia, Harry vio un nombre que le gustó tanto que se lo puso a su lechuza, Hedwig. Al contrario de él, Aurore le puso Rubí a la suya por su extravagante pico.

Pasados los días, ya había llegado el 1 de septiembre, por lo que los mellizos ya con sus baúles listos se pusieron en camino a la estación de King Cross. Después de preguntarle a un guardia donde se hallaba el andén nueve y tres cuartos y que este se riera de los niños, encontraron a una alegre familia pelirroja, que inmediatamente los ayudaron a cruzar el andén.

Ya dentro del Expreso, se acomodaron en un compartimento vacío, al cabo de un rato se acerco el menor de los varones de la familia pelirroja, se presentaron y en menos de un minuto se hicieron amigos.

Después de muchas risas y de chocolatinas, se acercó una niña con los pelos revueltos preguntando por el sapo de Neville, también se presentaron con esta niña pero no les cayó tan bien.

Al llegar a Hogwarts, después de que las puertas del Gran Comedor se hubieran abierto y del discurso de la profesora McGonagall, empezaron con la selección, resulta que esa niña del tren de nombre Hermione Granger quedó en Gryffindor, después de unos pocos niños le tocó el turno a Harry, el también quedó seleccionado en Gryffindor y Ron también. A los minutos le tocó el turno a la pequeña Potter, ella quedó seleccionada en Slytherin.
Todo el mundo estaba confundido, ¿cómo una Potter podía estar en Slytherin? Los meses pasaron y los cuatro amigos encontraron la piedra filosofal, Aurore y Harry se enfrentaron al profesor Quirell, quien a la vez tenía en la parte posterior de su cabeza a Lord Voldemort, una semana después Harry y Aurore despertaron en la enfermería y el profesor Dumbledore les explico que la piedra había sido destruida.

FIN DEL PRIMER AÑO