"We're caught in the fire, say oh
We're about to explode
Carry your world
I'll carry your world"
"Show me the way, Lord
'Cause I am about to explode"
Atlas de Coldplay.
¿Qué demonios estoy haciendo con mi vida? ¿qué camino tenía que tomar? ¿qué debía de hacer? ¿qué estaba bien y qué estaba mal? Sabía que, con frecuencia, a pesar de las dificultades y las decisiones, siempre volvía a tomar este camino en donde estaba ahora desde que conocía a Eloy, Bruno y Marina, sin embargo, algo de mí me pedía dudar o pensar un poco más del camino a tomar, porqué quería ser mejor persona, y para eso, tenía que pensar de forma seguida. Tenía que analizar con frecuencia mis decisiones, tenía que razonar y elegir de buena manera, y también para eso tenía que estar sola.
Por eso, me encontraba en la misma habitación en donde había despertado, pensando.
Pensando en mi vida en la tierra, en sus cosas buenas o malas, y, a pesar que muchas veces fui infeliz, dejé muchos pendientes; como una charla seria y clara con Gabriel, enfrentar a mi madre, y mejorar en mis estudios, por otra parte, con los blodies, aunque me negara admitirlo, aunque al final comencé a odiarlo, sentía un aprecio hacia Kaleb, que, al haber desaparecido sin dar explicaciones, me hacía sentir mal, además, aun no comprendía aquella especie.
Nunca tuve una conversación larga y clara con ellos, lo único que sabía era por respuestas vagas y por lo que se encendió en mí cuando probé sangre por primera vez, y sólo eso. La otra opción es estar con ellos, sin embargo, había algo que no me convencía de todo, y eso me limitaba a seguir mi camino.
—Alanney, ¿estás ahí?
El llamado por parte de Bruno me puso alerta, a pesar de que había sido a la distancia, sabía que pronto me encontraría. Y junto a él, más pasos se oían, haciéndome saber que no venía solo. Sin embargo, yo no quería verlo ni quería ver a nadie, porque aún me encontraba pensando. Aún estaba procesando todo, aún tenía cosas que aclarar.
Solté un suspiro cuando la puerta de la habitación fue abierta, y comencé a escuchar pasos acercándose, pero no sabía quiénes eran, hasta que alcé la vista y me topé con Bruno, Marina y Eloy, provocando que sonriera.
—Claro que está aquí —mencionó Marina, colocando sus manos cruzadas en su pecho, mirándome burlona—. ¿A dónde más iría?
Y tenía razón. No había muchos lugares que recorrer, y eso era un tanto decepcionante, la verdad era que no sabía que esperaba ver cuando estuviera aquí. Tal vez era que aún no miraba algo más, tal vez esto era la entrada de sus verdaderas tierras o algo por el estilo. No lo sabía con exactitud.
Por eso solté un suspiro melancólica, dejando de observarlos y contemplar sus ropas perfectas; Bruno, a pesar que siempre portaba una camisa blanca y pantalón negro, siempre se miraba bien, por parte de Eloy, usaba una camisa color celeste al estilo de Bruno con pantalones negros y Marina tenía un largo vestido de color blanco, de una tela transparente que hacía que se observará con exactitud que había debajo de esas telas, pero ella no parecía verse incómoda y ninguno de los hombres la miraban de forma mormosa, es más, parecían no tomarle importancia. Mientras que yo, aún seguía con la misma ropa que agarré del armario de Marina hace varios días.
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2 | 𝐸𝓃 𝑒𝓁 𝒶𝒷𝒾𝓈𝓂𝑜 𝒹𝑒𝓁 𝑜𝒸é𝒶𝓃𝑜.
FantasyEl océano es muy profundo. Tanto, que ningún ser humano sabe exactamente que hay en sus lugares más oscuros. ¿Será probable que haya vida ahí abajo? ¿Especies increíbles, con poderes alucinantes? Quizás, es probable que esa vida tenga un reino y una...