время играть~ (RusArg y UsArg) 2 Temporada

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Gringito ;)

Hey! Argentina, ¿tienes un momento para hablar?

Sep, ¿que pasa hermoso??

Quería.. Saber como estabas.

Estoy re bien, Rusia no es tan peligroso como Urrs en su mes.

Oh, bien, me alegro mucho.

Ehm, cuando termines ese mes

Quieres.. No se.

Ir conmigo a caminar por Georgia?

Es que el próximo mes hay muchos festejos y sería muy lindo si me acompañaras.

Dale!

Y bien termine el de Rusia te acompaño a los festejos.

Oh, good!

Te esperaré con ansias!

Argentina leyó lo último con ternura, no se lo esperaba a decir verdad, pero era obvio que aceptaría.

Visitar un lindo lugar donde podría hacer que el gringo le comprase cosas lindas y tenerlo como un bobo.

¿que podría ser mejor que eso? Aunque luego tendría que tener sexo con él, eso le causó una disimulada mueca de asco.

Sintió unos brazos rodear su cintura, miro hacía arriba casi por instinto agachando sus orejas, se encontró con el ruso que le miraba con una pequeña sonrisa.

- Hola rus.

- ¿por que aceptaste?

- me lo pidió de linda forma y no me podía negar. - le sonrió de respuesta.

- no quiero que hables con él, no quiero. - lo apretó un poco mientras hacía un berrinche.

- Rusia, no podes controlar con quien hablo, está mal.

- si, pero_

- nada. Puedo hablar con quien quiera, no tenes que ser tan tóxico.

- lo siento. - susurró escondiendo su rostro en el cuello del más bajo. - pero no me gusta que Usa te hable..

Argentina suspiró, si no se callaba iba a iniciar una pelea donde podría salir muy lastimado, y no quería que eso pasase.

Suspiró, y con su mano acarició la cabeza del más alto, el cual se removió un poco para poder besarle el cuello.

"Un par de días más argen, un par más" pensó mientras movia su cabeza a un lado, mientras sentía que empezaba a morder su delicado cuello.

Las manos de ruso subieron, tímidamente, por debajo de la remera del latino.

Que era suya, ya que el latino usaba su ropa con la excusa "para no desarmar su bolso".

Escuchó como el menor trago saliva, justo cuando tocó sus pequeños pezones.

Empezó a jugar con ellos, ver como el de mayor edad hacia hasta lo imposible para no jadear o gemir en alto. Aunque aún se mantenía serio, eso no le gustó mucho, pero no le dio mucha importancia.

Lo jaló hasta el sofá, fue despacio, no era un animal, y le sentó de si mismo.

Bajo su mano derecha, de mientras acariciaba el torso del menor, hasta su miembro.

Empezó a acariciarle encima del boxer, justo como Canadá le había dicho, escuchando como ahogaba un gemido. Oh shit, quería escuchar más de ese hermoso sonido.

Apretó con un poco de fuerza causándole un pequeño gemido al pequeño bicolor.

Argentina levantó la cabeza, miro hacía arriba mientras se mordia el labio.

Llegó a un punto donde Argentina se estremeció, el oso había mordido en el lugar indicado.

Ahora la mano del ruso había retirado la fina tela que separaba se mano del pene del portador del sol.

- Rus~! - gimio alto.

El Tricolor había tomado el falo con algo de fuerza, haciendo que duela, entendía que era brusco por el hecho de que era su mes... Pero ¿en serio? El hijo de puta siempre le apretaba con fuerza su preciada hombría.

El agarre se suaviso rápidamente, haciendo que el menor en altura disfrutara mucho más.

Empezó a gemir más alto, las manos y boca del ruso eran realmente maravillosas.

Mientras que las manos del argentino no sabían hacía donde ir, siempre le pasaba eso con las manos, y odiaba eso.

Pronto llegó al orgasmo, manchando la mano del ruso y la mesita ratonera delante de ellos.

Argentina quedó respirando algo entrecortado mientras miraba hacía arriba con las orejas agacharse.