Quédate conmigo

Parte 42: Arrepentido

- ¿Estás lista? 

Asentiste enérgicamente alejándote de él para comenzar a caminar. Al ponerse a tu altura tomó tu mano la cual apretaste. 

Al cabo de unos 10 minutos estabais en el lugar acordado. Observasteis a vuestro alrededor, Kakashi se alejó un poco de ti para examinar mejor el lugar. Mirabas su espalda cuando te percataste de algo. 

Una pequeña línea que distorsionaba el ambiente. 

Te acercaste a ese lugar captando la atención del peli plata. 

- ¿Qué ocurre? 

- A pesar de ser un genio en tu campo, sigues teniendo los mismos errores que cuando eras un crío, ¿eh Itachi? - Preguntaste observando como esa línea distorsionaba desaparecía, pero a su vez esa cúpula que estaba impidiéndote ver algo se comenzó a disipar dejando ver dos individuos con capas características y su rostro cubierto por un sombrero de flecos. 

Uno de ellos retiró el sombrero dejándote ver esos ojos rojos. 

- Veo que no has olvidado mis puntos débiles. 

- Me cuesta creer que todavía tengas los mismos puntos débiles que antes. Igual solo has querido probar que me acordaba de esos puntos débiles. Igual solo querías probar que sería yo quién te encontrara. 

- Puede ser. - Comentó de lo más tranquilo llevando su vista hacia la persona que había a tu lado. - Parece que no has venido sola. 

- Sería demasiado estúpido por mi parte venir en mi condición a reunirme con dos akatsukis completamente sola. 

- Sigo siendo el mismo, ¿acaso no confías en mí? 

- Sabes que no es eso. Aunque sigas siendo el mismo han pasado muchos años, las cosas han cambiado, aunque no nos gusten. Así que permíteme desconfiar. 

- (...) es inteligente, es obvio que no iba a venir sola y más teniendo en cuenta su delicado estado, aunque creo que no es tan delicado ahora. 

Intervino su compañero que aún portaba su sombrero. Miraste detenidamente a aquel hombre mientras descubría su rostro dejando ver su cabello anaranjado y sus ojos tan especiales.

- Rinnengan. - Pronunció Kakashi mientras se acercaba a ti mostrando la tensión en su cuerpo al ver el peligro que suponía ese descubrimiento. 

- Relájate Kakashi, no hemos venido aquí a pelear. - Se defendió el Uchiha mostrando una mirada llena de seriedad. 

- Aun así, es comprensible que esté tan tenso, Itachi. No todos los días se ven estos ojos, pero te doy mi palabra de que no os haremos nada. Estamos aquí solo para hablar. - Aclaró el otro compañero akatsuki. 

- ¿Y nos quedaremos tranquilos porque nos has dado tu palabra? - Preguntó frunciendo el ceño cosa que a pesar de que no la viste pudiste percibirlo. 

- Lo entenderás más tarde. Ahora mismo no tengo ganas de enfrentarme a vosotros porque sé cómo puede terminar la cosa. 

- ¿Y cómo puede terminar? - Hablaste después de todo este tiempo observando la situación. 

- Mal para nosotros. - Esa respuesta te dejó bastante impresionada, pero no solo a ti sino también a tu compañero. Y antes de que pudierais hablar de nuevo la voz del desconocido volvió a hacerse escuchar. - Antes de explicaros eso déjame que me presente. Soy el líder de akatsuki, mi nombre es Pain. 

El silencio se hizo entre vosotros durante unos segundos hasta que decidiste romperlo. 

- Pain, me gustaría queme explicases el motivo por el cual has organizado esta reunión.