Capítulo 10

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Cuando llegue a la guarida Slade me esperaba en el área de caga, apague el motor, me quite el casco y baje de la motocicleta comenzando a acercarme a él, tomo mi rostro entre sus manos y vio algunos de los golpes que recibí en la pelea, la movió hacia la derecha y luego a la izquierda, sus ojos se entrecerraron un poco, pero después sonrió levemente

-Lograste derribarlo tu solo, bien hecho- dijo, al igual que él sonreí levemente- actuaste conforme la situación sucedió y todo salió perfecto, ahora solo falta una parte Robin- asentí levemente y mire por un lado de el hacia la puerta que había

-En donde esta?- pregunte y quito sus manos de mi rostro dejando una de ellas en mi hombro, comenzó a guiarme hacia otra parte inferior de la guarida, había un par de puertas de acero nos detuvimos enfrente de una de ellas, a un lado había un panel Slade ingreso un código y la puerta se abrió, la habitación estaba iluminada por una sola luz en el centro donde estaba el señor Gólubev atado a un silla de metal y una venda en sus ojos, estaba completamente amordazado meciéndose a un lado a otro intentando liberarse.

Slade puso sus manos en mis hombros haciendo una ligera presión en ellos, se acerco a uno de mi oídos y susurro

-Consigue la información Robin, sabes lo que tienes que tienes que hacer- respire hondo y deje salir el aire y asentí- muy bien- ambos entramos a la habitación en uno de los extremos del lugar había una mesa con varios artefactos, Slade se puso su mascara y yo mi antifaz, vi los objetos que había ante mí,pensando en que hacer primero. 



Había llegado ya el momento decisivo, Robin debía obtener la información del señor Gólubev, será difícil hacerlo hablar por lo cual a Robin le llevara tiempo y si es que esta mintiendo lo descubriré con facilidad pues su expresión y sus movimientos me lo dirán por si solos, pero si no esta mintiendo resultara benefactor, tanto para él como para mi. 

Se detuvo unos momentos mirando la mesa y los artefactos acaso dudaba, volteo a ver al hombre y nuevamente fijo su vista en la mesa, al fin su mano se movió y tomo un par de pinzas y se dirigió hacia él, las colgó en su cinturón y le retiro la venda de los ojos y la mordaza que tenia en la boca

-КТО ТЫ, ЧЕРТЫ?(QUIÉN MIERDA ERES TÚ?) КТО ВЫ ДУМАЕТЕ, ЧТО ВЫ ХОТИТЕ СДЕЛАТЬ ЭТО СО МНЕ? (QUIÉN TE CREES QUE ERES COMO PARA HACERME ESTO?)- grito, Robin tomo las pinzas y las acerco a uno de los dedos del hombre

-Где ты спрятал оружие? (¿Dónde ocultaste las armas?)- la mirada de Gólubev reflejaba ira y enojo hacia él, sus respiraciones eran pesadas- Esta bien no contestes, intente pedírtelo amablemente, no lo volveré a hacer- tomo las pinzas de su cinturón y las coloco en dos de sus uñas- Contestaras mi pregunta amablemente o tendré que sacártela-  aplico presión en una de las pinzas y halo levemente de ella sacándole un quejido        (me aburrí de usar traductor)

-Púdrete- dijo Robin soltó un suspiro y jalo la pinza arrancando una de sus uñas, se escucho un grito de dolor de su parte, dejo caer aquel pedazo al suelo, sujeto la otra y repitió la pregunta, esta vez no dijo nada solo lo vio con enojo, arranco la otra y la dejo caer,  termino de arrancar todas sus uñas de manos y pies, lo único que salieron de él fueron groserías y gritos. Tomo ambas pinzas y las dejo en la mesa manchándola un poco de sangre, agarro la tableta y movió un par de cosas en ella y volvió a acercarse 

-Si no quieres cooperar esta bien, veras tengo algo interesante que mostrarte. Reconoces estos números de cuentas- le mostro la pantalla y los ojos de Gólubev se abrieron de par en par

-IMPOSIBLE!!! ESO ES MENTIRA!!- gritaba e intentaba en vano soltarse

-No es mentira, tengo acceso a todas tus cuentas y valla que es mucho dinero seria una lastima que desapareciera- toco la pantalla unas veces- al parecer tu cuenta en Inglaterra de 7.6 millones de dólares ha desaparecido, también 760mil euros fueron donados a causas sin futuro que generoso de su parte hacer eso

-MALDITO BASTARDO CUANDO SALGA DE AQUI DESEARAS ESTAR MUERTO!!- amenazo pero Robin continuaba en la tableta

-Estos si que es interesante, un condominio en Londres valuado aproximadamente en 3 millones de euros junto con un fondo bancario de casi el triple del valor del condominio, a nombre de Zara Gólubev- Robin sonrió y le volvió a mostrar la table 

-SI HACES ALGO CON ESO, JURO QUE

-No estas en posición para poder amenazarme, Zara que lindo nombre, es tu hija cierto... tiene que catorce años- podía ver como los nudillos del hombre se tornaban blancos de tan fuerte que apretaba sus puños- seria una lastima que algo le sucediera no lo crees, hace un año  tuvo problemas con drogas seria algo terrible que la encontraran muerta por una sobredosis en un baño publico- nuevamente esa sonrisa apareció en su rostro- es tu decisión o me dices lo que quiero o tu pierdes todo

La habitación se quedo en un sepulcral silencio llenando por las agitadas respiraciones de Gólubev quien mantenía la cabeza baja mirando fijamente el suelo, Robin lo miraba atentamente en la espera de su respuesta desviándola en momentos hacia mi, no podría decir si confió aun en él la técnica que uso es la adecuada con el pues el poder es algo importante para ellos y odian perderlo

-Las armas están en el puerto de Múrmansk, sector 8C tercer almacén, el señor Nóvikov era el comprador ofreció la suma de 17 millones por ellas- lo había conseguido

-Muchas gracias por tu colaboración- se alejo de él y dejo la tablet en la mesa, me volteo a ver con una sonrisa triunfante, una de sus manos comenzó a rozar algunas de las herramienta que se encontraban frente a él, lo miraba con duda y algo de desconfianza tendría que encontrar otra manera de probar su confianza, estaba a punto de caminar hacia él cuando vio que tomo un cuchillo, un par de clavos y un martillo

-Pero por otro lado tu no lo estas, me lastimaste e hiciste que perdiera la paciencia, además- se puso de cuclillas e inclino un poco su cabeza- no puede haber testigos-  no esperaba que dijera eso, clavo el cuchillo en uno de sus muslos y lo removió aun estando clavado sacando alaridos de dolor, una sonrisa se formo debajo de mi rostro, saco el cuchillo cambiándolo por el martillo golpeo la zona, la sangre salpicaba y se escuchaba el crujir del hueso, realizo lo mismo con la otra pierna, los clavos los clavo en sus hombros y rodillas, su rostro lo dejo irreconocible de tantos cortes que realizo en este, su lengua y uno de sus ojos los atravesó con unos clavos, el sujeto estaba muerto-pase la prueba- se acerco a mi parte de su traje estaba manchado con sangre y mi sonrisa continuaba intacta

-Así es Robin, felicidades lo conseguiste eres el mejor aprendiz que alguien pudiese pedir



Síndrome de Estocolmo o amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora