Tres pequeños jugaban en el patio de la gran guardería en la cual pasaban la mayor parte de su día.Un pequeño castaño de solamente 2 años jugaba tranquilamente con un osito de peluche el cual había sido un regalo por parte del pelinegro por sus recién cumplidos dos años.
El pelinegro miraba atentó al pequeño sentado en el pasto, pues desde que aquel niño había llegado a la guardería, se había convertido en una obsesión el cuidarlo.
Con solamente 4 años, se sentía algo maduro que los demás pequeños que rondaban por el lugar, y sus padres siempre le habían resaltado lo inteligente que el pequeño de ojos violetas era.
Vio a la lejanía como un peli-blanco de ojos verdes se acercaba hacia ellos con algo entre sus pequeñas manos.
Peli-blanco que al igual que el contaba con tan solo 4 años, solamente que este era muy travieso.
- Hola Veg, y Rub - Saludó alegré pero con una sonrisa maliciosa en su rostro.
- Hola Willy.. que traes ahí? - Saludo y cuestionó el pequeño de cabellos negros al ver cómo su amigo tomaba asiento en el pasto, junto a ellos.
- W-wi..w-willy! - Balbuceo con emoción el pequeño Rubén, debido que a su corta edad pocas palabras era capaz de formular.
- Oh~ esto? - *Dijo el peli-blanco mientras señalaba con la mirada sus manos unidas, a lo que el pelinegro asintió algo desconfiado. - Es solo un pequeño amiguito que le quería enseñar a Rub.
Finalizo el menor a la par que abría lentamente sus manos unidas y dejaba a la vista una verde y algo pegajosa rana, la cual acercaba insistentemente a en castaño junto a el.
El pequeño de ojos ámbar sostuvo con fuerza el osito de peluche entre sus brazos, a lo que minutos después un fuerte llanto llegó a los oídos de ambos chicos.
- Oh no.. - Musito el pelinegro levantándose del pasto para después cargar al castaño quien agitaba sus manos hacia el en cuanto vio que se levantaba del pasto.
Lo levanto del pasto junto a su osito y lo abrazo contra su pequeño, acariciando levemente su cabello mientras lo mecía entre sus brazos.
- Ya.. ya pequeño, no pasa nada - Intentaba calmar el llanto del bebé que se aferraba a su pecho sin detener sus lagrimas. - Willy.. será mejor que te lleves a ese animal a otro lado - regañó el pequeño pelinegro mientras seguía acunando al castaño en sus brazos.
Sin rechistar al ver lo que había ocasionado, el peli-blanco bajo la cabeza y rápidamente se dirigió por dónde había llegado para devolver a el animalito a su hábitat natural.
Unas preocupadas voces se dirigieron hacia el pelinegro quien estaba logrando con demasiado éxito calmar al castaño entre sus brazos.
- Que ha pasado Sam? - Preguntó con delicadeza casi susurro una de las cuidadoras de aquella guardería, mientras veía a el pequeño castaño quedarse dormido en los brazos del de ojos violetas.
- Willy ha traído una rana para mostrarnos a Rub y a mi, pero al parecer a Rub no le ha gustado la idea y al ver a la rana se ha puesto a llorar - Respondió con tranquilidad y fluidez el pequeño pelinegro.
A las cuidadoras todavía les sorprendía que aquel niño a su corta edad fuera capaz de hablar sin trabajo ni dificultad.
Tal vez era porque se la pasaba horas pegado a los libros de literatura en la pequeña biblioteca que tenían en el lugar.
Muy pocas veces leyendo solo, que eran las escasas horas que dormía el pequeño Rubén, ya que todo el tiempo se quedaba junto al oji-violeta para escuchar lo que leía.
De alguna forma aunque no entendiera la lectura por su corta edad, la voz del pequeño Samuel lograba mantenerlo tranquilo.
Cosa que cuando Samuel se despistaba, Willy lo llevaba a “Expediciones” por todo el patio.
El castaño se divertía con ambos a su forma, aunque aveces el peli-blanco logrará hacer llorar al pequeño con sus travesuras.
Las cuidadoras los llevaron adentro, para que Samuel pudiera depositar a el bebé en su cuna.
Que al intentar hacerlo el castaño se removió inquieto en la cuna apunto de llorar y pidiendo con sus bracitos estar cerca de Samuel de nuevo.
- Creo que tú también deberás tomar una siesta Sam - Dijo la Rubia que los cuidaba con una sonrisa divertida.
- Está bien.. tengo algo de sueño de todos modos - Dijo tomando un banquito y subiendo a la cuna para acurrucarse junto al menor.
No era la primera vez que lo hacía, ya muchas veces había dormido con el pequeño Rub, cuando el no quería que se fuera de su lado.
A los pocos minutos ambos dormían plácidamente en la gran cuna del castaño, cuando un pequeño peli-blanco entro a la habitación con una pequeña flor en su manita.
- Perdón Rub.. no fue mi intención - Se disculpó entre susurros, aunque el menor estuviera dormido, ya luego lo haría cuando se despertará.
La cuidadora lo observaba desde el marco de la puerta y al ver como el pequeño colocaba la flor sobre el cuerpecito de Rubén se acercó y susurro.
- Quieres tomar una siesta también Willy? - Preguntó cariñosa a lo que el rubio acepto gustoso y acercó el banquito de madera para poder subir con ayuda de la cuidadora a la gran cuna.
Acurrucándose contra el cuerpo de Rub y Sam, para minutos más tarde dormir por igual.
La rubia rió divertida y conmovida por la ternura de aquellos inseparables 3 chicos.
Vaya tardecita....
Hola chicos!! Que tal??Aquí les traigo el primer capítulo de este ruwigetta Month.
Cómo les comenté en la introducción la idea me vino de Instagram y pues.. aquí está.
Si, voy a terminar el rubegetta month de noviembre.
Solo denme un poco de tiempo que ahora ando en exámenes, pero para la próxima semana estaré completamente libre y trataré de escribir lo más que pueda!.
Y bueno sin nada más que decir, espero que les haya gustado.
Recuerden votar, si les ha gustado el capitulo y seguirme para no perderse de Absolutamente nada.
Bueno.. los quiero!!
Hasta la próxima.
Un besazo 😘
Chao chao ( ◜‿◝ )♡
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♡˖Ruwigetta Month˖♡
Hayran KurguPequeños one shots de la vida de estos tres niños, siendo amigos o pareja.