Iba tranquilamente caminando por la calle, claro que, pasando desapercibida como de costumbre, no es bueno que se sepa sobre un villano, hoy en día, por desgracia, nos matan, ¿ por qué ? Ni yo lo sé, no hacemos nada malo, hacemos la justicia que no hacen los héroes y así nos pagan, matándonos.
Ver como , Bloody Queen se hace famosa por matarnos me parece injusto, nosotros por matar héroes nos toman por malos cuando hacemos lo mismo que ellos, ¿ qué hay de malo ? realmente no lo entiendo.
● ● ●
Iba pensando la menor de cabello rosa mientras paseaba por la calle, observando a los héroes y gente normal.
Paró de andar cuando vio a la heroína número 1 , Bloody Queen, habiendo atrapado uno más de los suyos y sonriendo como si nada.
Aquello en ella le ponía enferma, no soportaba ver como los héroes se hacían famosos haciendo daño a uno de los suyos.— . . . Los héroes solo ayudáis cuando os conviene. — murmuró Hanako, frunciendo el ceño levemente y apretando los puños con rabia.
Rápidamente se fue de allí, no soportaba ver esa escena, la heroína número 1, con una gran sonrisa en la cara y saludando a la gente, mientras uno de los suyos estaba tirado en el suelo, atado con cuerdas de sangre que Bloody Queen había hecho.
Juraba que algún día acabaría con ella, con todos los héroes, para que vieran cómo eran en realidad, unos egoístas que sólo ayudan cuando les apetece.
O bueno, eso pensaba ella y todos los demás con los que vivía, a ninguno les llegó la ayuda por parte de algún héroe después de haber estado pidiendola tantas veces.• • •
Hanako pasó por un callejón, que, a primera vista se ve todo sucio, medio abandonado, con alguna que otra persona borracha o que de por sí se ve que no están bien.
Ella sinceramente lo veía todo muy normal, total, lo veía todos los días.A la mitad del callejón se paró frente a una gran puerta de metal oxidada, y tocó a la puerta, haciendo así una especie de código secreto.
Entonces una chica de pequeña estatura se asomó a abrir la puerta, era muy bajita, como una niña de 5 años, pero ella tenía 22 años. Tenía piel vitiligo, su cabello era rizado y negro, estaba atado a una coleta,, sus ojos castaños y grandes, y su ropa no tenía nada de especial , una sudadera de color blanca junto con unos pantalones cortos color beige y unas botas marrones.
La expresión de aquella chica se mantuvo seria por unos segundos hasta que vio a Hanako, entonces se formó una leve sonrisa ,la tomó del brazo y la hizo pasar rápidamente.— ¡ Has tardado mucho en llegar, Hanako ! — se quejó la de menor estatura, haciendo un pequeño puchero y cruzándose de brazos.
— Lo sé, lo sé, lo siento Kaori. — dijo la pelirosa entre pequeñas risas, sentándose de un salto en el sofá.
— ¿ Por qué tardaste ? — cuestionó Kaori, sentándose al lado de la de mayor estatura mientras seguía con los brazos cruzados.
— uhm. . . Bueno, ya sabes, me entretuve viendo cosas. — dijo mientras sonreía, de forma totalmente falsa, le estaba doliendo realmente recordar aquella escena que vio hace un rato.
— Como sea, ¡ no vuelvas a tardar ! Masato se enfadará, y ya sabes que no le gusta salir a buscarnos por lo que puede pasar.
— Sí, lo sé. — suspiró y cerró los ojos por unos segundos, en eso sintió como picaban su mejilla y rápidamente abrió los ojos y miró hacia el lado del que había llamado su atención. — oh, ¡ Kata ! — gritó emocionada la chica, con un pequeño brillo en sus ojos mientras veía aquella chica rubia de pelo corto.
Aquella chica de pelo corto siempre llamó la atención de Hanako, sobre todo por su brazo derecho , ya que este era robótica, ella nunca le contó que le pasó, pero algún día acabaría averiguandolo.
Esa chica era bastante fuerte y bastante alta comparada con las demás, sus ojos eran rojos y rasgados, sólo tenía una expresión siempre y era una seria.
Su vestuario era bastante distinto a lo que se solía ver en las demás chicas.
Llevaba una camisa negra y un corset.
Los pantalones negros eran bastante anchos y llevaba dos pocket case, donde guardaba un par de cuchillos, y unas gran botas negras.— Masato quiere hablar contigo. — dijo en un tono tranquilo y algo frío.
— ¿ Ah ? , . . . — Hanako se quedó en silencio unos segundos.
— No puedo darte detalles, solo me ha dicho eso. Será mejor que no lo hagas esperar. — dijo Kata , para irse segundos después y dejar a Hanako con la palabra en la boca, esta suspiró y frunció un poco el ceño, levantándose a desgana y despidiéndose con la mano de Kaori.