-¡¡QUE HACES TU ABRAZANDO A MI HERMANA!!-Gritó Jake. Drake y yo nos caímos de la cama del susto.
Ya era de mañana...Esperen. ¡Ya era de mañana!
-¿Qué hora es?-Pregunté alarmada.
-¡Faltan diez minutos para las nueve!-Respondió Jake.-Cam, vístete y vete de este hotel lo antes posible. Yo soy el que se va con los tipos, no puedo permitir que tú seas parte de esto. Y tú tipo-
-Drake- Interrumpí.
-Si él mismo, te tienes que ir de aquí.-Dijo Jake.
-Oye, oye. No voy a dejar que tu solo vallas a ese lugar. ¿Entiendes?- Afirmé.
-¿De qué están hablando?-Preguntó Drake.
-De nada que te importe.-Respondió Jake.
-Oye no seas tan malo con él, solo hiso una pregunta-dije.
-Pues respóndele tú. Pero ahora no porque te tienes que ir. Él también. Yo también.-Respondió Jake mientras agarraba una chaqueta negra de cuero, que quedaba perfecta para la ocasión.
-¡Váyanse ya!- Dijo Jake mientras cerraba con brusquedad la puerta.
-¡Jake!-grité. Como lo suponía no me hiso ni el menor caso.
-¿Me creerías si te dijera que te ves muy linda por las mañanas? Claro, claro, ese no es el caso. Tenemos que irnos. No le quiero caer peor a tu hermano de lo que le caigo.-Dijo Drake con una pequeña sonrisa en su rostro, agarrándome de la mano, y llevándome hacia la puerta.-Te tengo que llevar lejos de aquí... ya que me tengo que ir y tu igual... ¡Vamos!
-¿Qué los dos?-pregunté.
-Sí, ¿Por qué? ¿A dónde vas a ir si no?-respondió.
-Está bien, vamos...-acepté al fin.
Drake me llevo hasta su auto, la verdad es que era más bonito de cerca, y se veía que cada pieza costaba una fortuna.
-Sube. ¿O quieres que lo haga por ti?-dijo pronunciando una breve sonrisa.
-Yo puedo sola gracias.-respondí. Sentía un calor muy fuete en las mejillas en ese momento.
El auto por dentro era de cuero, aunque, el asiento del conductor tenía unas pequeñas gotas de sangre derramadas, de seguro es por lo que pasó. En los asientos traseros del auto, había una montaña de libros, aproximadamente unos doce amontonados desordenadamente en la parte de atrás.
-Oye... ¿Tienes hambre?-preguntó.
-Pues, sí. No he comido nada.-respondí.
-¿Qué quieres comer?-preguntó.
-Solo quiero desayunar. Con tal que sea comida está bien.-aclaré.
Drake no respondió solo mantenía la vista firme al frente sin pronunciar ninguna palabra.
-Cam, baja la cabeza.- Dijo Drake de repente.
-¿Qué?-respondí viéndolo confuso.
-¡Solo hazlo!-Gritó.
Bajé la cabeza, tres segundos después una bala atraviesa el vidrio delantero, por suerte estaba agachada, porque si no, la bala me daba en la cabeza.
Subí la cabeza para ver quién lo hizo, cuando veo, unos chicos en moto venían hacia nosotros...
-¡Para el auto!- Gritó uno. Drake solo miraba hacia el frente manejando a toda velocidad.
-¡Para el auto o les caemos a balazos hasta que no quede rastro de ustedes!-Gritó el otro. Drake solo hizo que yo bajara la cabeza tras otro disparo.
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En un viaje a París...
Novela JuvenilDos cosas; 1. Tener mala suerte. 2. Nada es lo que parece. Piensa en algo, ¿Qué crees que pase? -Ten en cuenta que lo que digas no vale. ¿Mucho cliché? -Pues, la típica chica va a parís y se enamora. ¿Eso es todo? -Bueno, agreguemos a siete cri...