¡ya basta lee minho!

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«¡YA VERÁS CUANDO TE ATRAPE, LEE MINHO. ¡PUEDES CORRER PERO NO ESCONDERTE»

- Rápido, por aquí hyung...

Y detengamos todo el ajetreo por un momento y recapitulemos en como-nuevamente-Minho se metió en problemas, llevándose consigo a los catalogados como sus secuaces. O en términos más decentes, las víctimas consientes de que se estén sumergiendo en el repugnante atte del copiar, y que todo estaba fríamente calculado.

- Estás loco si crees que me meteré en ese sucio, inhabitable y desolado salón de estudios intensivos.- reprochó el joven pelinegro, haciendo una mueca de desagrado mostrando su desconformidad.

- Lo siento, Changbin hyung, pero es lo que hay, así que mueve tu trasero y entra.- intervino Seungmin propinando ligeros pero firmes empujones, incitando al omega a entrar.

- Sabes que nos encontrarán de todos modos, ¿verdad? Tengo que admitir que el profesor está en lo cierto...- todos miraron al moreno con horror, como si le hubiera salido un tercer ojo en la frente.- ¿Qué? ¡Es cierto! No podemos ir demasiado lejos, tarde o temprano nos encontrará y...

- Changbin, ¿quieres hacernos el honor de complacernos con tu amada presencia dentro del salón?- interrumpió Jeongin enseguida ante de alguna otra intervención.- Si nos encuentran o no, ¿qué importa? A nosotros no nos van a reprobar, según tengo entendido fue a Minho a quien atraparon copiando.

- No me lo recuerdes.- refunfuñó entre dientes el mencionado con sus brazos cruzados.- La vida es tan miserable conmigo que por casualidades del destino justamente al viejo mugroso se le ocurrió mirar en nuestra dirección.

- Bien, bien. Estoy seguro de que podemos hablar de las conspiraciones que tienen contra de Minho con más tranquilidad dentro del salón.- todos dirigieron sus calculadores ojos al más alto del grupo, dando a relucir con su mutismo la continuación de su pequeño comentario.- Porque por su no lo han notado.- sus facciones se contrajeron en notable enojo.- Estamos a la vista del profesor, no es muy sensato que nos quedemos aquí parados fáciles presas de Don Ramón.

- ¿Don Ramón?- repuso Yang llevándose su mano al mentón.- ¿Qué no es...?

- ¡Ya entren maldita sea!

Y nadie rechistó al mandato del peliazul y automáticamente en fila como los indios ingresaron obedientemente al salón.

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- ¿Entonces cuál es el plan?

Eco, la voz de Changbin solo resonó y rebotó en cada rincón de la estancia, que ante la repetición solo atinaron a mirar la condición estándar del espacio en general.

Deplorable.

- No tengo ni idea, pero por ahora estaremos aquí.- respondió Minho, mirando con sus felinas orbes algunas cosas con genuina curiosidad. Changbin solo bufó cruzándose de brazos.

- ¿Entonces nos quedaremos aquí acoplándonos al polvo?- espetó con irritación.- ¿Esperando?

- Es lo que podemos hacer ahora...- intervino Jeongin antes de que Lee pudiera reprocharle.

- ¿¡QUÉ!?- la voz de Felix se escuchó grave y horrorizada.- ¡De ninguna manera me quedaré aquí con ustedes!

Seungmin iba a interrumpir pero repentinamente un golpe seco se escuchó claramente. Todos giraron sus cabeza a la puerta, sobresaltándose en conjunto al escuchar otro golpe proveniente de ese lugar.

- ¿Estás seguro? No creo que hayan sido capaces de meterse allí...

Era el profesor Jihoon, reconocerían esa voz donde fuera. Eso significa que no había otro golpeando la puerta que...

- Esos pequeños roedores, son capaces de todo por evadirme. No me sorprendería que lo hicieran con esto también.

Era el viejo insufrible, ya no estaban muy seguros allí. Debían moverse y rápido.

El juego del ratón y el gato había iniciado.