Just Dance 𖡼 ָ࣪

Capítulo 2

Jungkook estaba camino a casa, él iba y regresaba solo de la escuela, así lo habían acostumbrado ya que su madre siempre estaba ocupada y su padre metido en negocios.

Llegó a casa y entró, no vio a nadie, así que fue directo a su cuarto, allí observó a su mamá, estaba acomodando su ropa, le había apartado unas prendas para cambiarse al llegar a casa.

- Hola mamá! - Dijo con una gran sonrisa en su rostro.

- Hola Kookie, mi pequeño... - Fue y le dio un beso en su mejilla.

- ¿Cómo te fue en la escuela? – Cuestionó Celine.

- Bien, como siempre... - Agachó su cabeza un poco, estaba dudando en si decirle o no sobre el baile ¿lo aceptaría?

- ¿Qué pasó pequeño? - Preguntó con curiosidad y se acercó más a él - ¿Pasa algo? Siempre puedes contarme lo que sea, después de todo, soy la única persona en la que puedes confiar.

- Mamá... Lo que te diga, no se lo digas a mi padre ¿está bien?

- Eso es depende... Tú sigue y dime que pasa...
¿Acaso eres gay? Dijo seria, casi sin expresión.

- ¿Eh? ¿Qué dices, madre? ¡Claro que no! Es algo diferente.

- Oh...menos mal, sospechaba que estabas enfermo y tendría que llevarte al hospital, por suerte no fue así, ahora cuéntame.

- Mamá, me gustaría bailar - dijo no muy fuerte, no quería que todo el mundo lo sepa antes que su madre.

- ¿Qué? Espero haber escuchado mal, dilo un poco más fuerte por favor.

- Mamá, quiero y me gustaría mucho bailar ¿me dejarías hacerlo? - Esta vez lo dijo seguro de sí mismo, como si esperara una buena respuesta.

- No. - Fue lo último que dijo Celine, fría, sin expresiones y decidida.

- Pero... ¿Por qué? -  El pequeño no entendía por qué su mamá se oponía a que pueda hacer algo que en verdad le gustaba.

- Que molesto... - Agarró de la muñeca a Jungkook y lo llevó fuera de la casa.

- ¿Mamá? ¿Qué vas a hacer? – Le preguntó a su progenitora con un notorio miedo en su voz.

- Iremos al médico

- ¡P-pero estoy bien! ¡Mírame! ¡Estoy bien, mamá!

- ¡Pues pareciera que no! – Gritó.

Jungkook no pudo articular palabra alguna

- Ahora estarás castigado, Jeon Jungkook.

- ¿Qué harás?

- Te quedaras aquí afuera hasta que tu padre llegue, no me importa si tienes frío.

- Pero mamá... - Dijo sollozando, su madre lo lastimaba.

- Tal vez así se te quite esa tontería de la cabeza, una vez llegue tu padre, hablaré con él.

- Madre... – Esa palabra fue apenas entendible, no podía hablar bien debido a su llanto.

- Te quedarás a reflexionar todo lo que piensas y dices ¡¿Me escuchaste?!
Celine estaba muy enojada, había gritado tan fuerte como para hacer que los ojos de su hijo se llenasen de lágrimas.

- E-Esta bien, m-me lo merezco ¿no? Es por mi b-bien...

- Eres un buen niño – Cerró la puerta de su casa sin importarle al menos un poco cómo estaría el pequeño.

- ¿Por qué tiene que ser así? ¿Por qué no me explicas que es lo que no debo hacer? ¿Por qué me impides se feliz? – Hablaba para sí mismo.

...

Jungkook estuvo sentado en la puerta sollozando, sin tratar de llamar mucho la atención de los demás, había llorado tanto que terminó dormido

El padre de kook llegó y vio a su pequeño, no llevaba más que una chaqueta delgada, cuando lo tocó, estaba bastante frío, por lo que se sacó su chaqueta y abrigó a su hijo en él.

Abrió la puerta, lo dejó en el sofá y fue camino hacia el cuarto de Celine.

Jungkook despertó, se sintió helado así que se abrigo más con la chaqueta que tenía puesta, sus ojos estaban hinchados y más grandes, se notaba que había estado llorando.
Pero eso no le preocupaba ¿su padre había llegado? De ser así, hubiera sido la única forma de entrar.

En eso, escucha a su madre gritar.

Asustado, fue camino al cuarto de donde provenía la voz aguda, ahí estaba ella y su padre.
Discutían, el señor Jeon estaba por golpearla, pero había llegado él.

- Mejor me voy... – Avisó jungkook, pero en realidad se quedaría ahí, claro que se escondería, estaba curioso por saber que pasaba.

- ¡¿Como te atreves a dejar al pequeño afuera?! – Esta vez el grito lo dio su papá.

- ¡Déjame hablar y te diré todo! – Celine contestó a su esposo, parecía estar más enojada que el hombre.

- ¡Está bien! ¡Dilo fuerte y rápido!

- Tu hijo quiere Bailar! ¡No pensó en algo mejor y más varonil! ¡Deberías de regañarlo a él! Se merecía eso y más. Yo esperaba que fuera un futuro matemático o arquitecto, estoy muy decepcionada de él.

- ¿Qué clase de mentiras son esas, Celine? ¡El aún es pequeño! ¿realmente crees que ese sea su sueño? Sigue siendo ingenuo, no sabe lo que piensa o hace.

- Tienes razón, pero no podía dejarlo así – Fue lo último que salió de la boca de la mujer antes de dirigirse hacia la sala, no deseaba seguir discutiendo.

Jungkook rápidamente salió del cuarto y fue camino a la sala, aguantándose las ganas de llorar... ¿Realmente era algo a lo que le gustaría hacer toda su vida o tal vez un pasatiempo? Se cuestionaba así mismo.

- Ven a comer – Dirigió sus palabras a su hijo sin dejar de mirarlo fijamente.

- Como digas, madre.