"Las incontenibles lágrimas salían de mis ojos mientras que en mi garganta había un nudo que acompañaba el sentimiento de tristeza que en ese momento era muy notorio, solo pude llorar mientras veía como en los brazos de otra persona se hallaba el am...
— ¡Llegué, cielo! — Escuché desde la sala mientras veía la tele, me pare para saludarlo y posteriormente le di un beso en la mejilla. — ¿Cómo te fue en el trabajo? — Le pregunté, me dijo que al parecer le fue bien y que iba a haber otra reunión, comentó que había una nueva mafia que se unió a la nuestra, al parecer un nuevo jefe y él me dijo que conoció a su esposa, me alegró que logrará interactuar con más animales aunque sean de la misma especie ya que no es tan fácil estando en este bajo mundo, apesar de que es bajo se puede decir que nosotros somos de la familia de la alta sociedad de la mafia pues poseemos una gran riqueza, de vez en cuando ayudo a mi esposo pero normalmente él hace más cosas, estafar, robar y matar no es tanto lo mío, prefiero hacer otras cosas como escribir, practicar deportes y leer, me interesan más a comparación de otras cosas. En fin, luego de que llegará le dije donde estaba la comida para que se sirviera que yo ya comí, no es algo nuevo esta rutina pues él va a cosas del trabajo seguido, lo esperaba para pasar tiempo con él ya que no siempre se podía, parece que este jueves tenía que tener una cena con el jefe y me preguntó si podía ayudarle, aunque sea bueno en la cocina de vez en cuando dice que necesita mi ayuda aunque ya sepa que es una excusa para pasar tiempo juntos, es algo de pareja que disfruto bastante. Al terminar de comer fue a lavar su plato y vi que usaba su celular, noté ese pequeño detalle pues rara vez lo sacaba de su bolsillo, se que sonará algo exagerado pero juro que viendo como es ya se puede considerar muy extraño que lo usé, alcancé a ver cómo abría sus contactos en un nuevo número así que supuse que era el nuevo aliado, continúe con mis cosas diarias hasta que llegó la noche. — Mi patito ¿ya vamos a dormir? — Le había dicho a la vez que reposaba mi cabeza en su hombro cerrando levemente mis ojos, pasó su ala por mi hombro y me agradó bastante la sensación — claro. Contestó, di una leve sonrisa antes de tapar mi cuerpo con las sábanas, lo abracé por detrás y el puso sus manos bajo la almohada, sin duda quisiera repetir esa noche antes de saber lo que iba a venir. A la mañana siguiente me dijo que había una reunión de emergencia, aproximadamente una hora antes pude ver cómo hablaba con una persona y está le mandó un corazón, no es normal que en su trabajo alguien se lo mandé sin embargo creí que pudo haber sido un error, él se fue así que lo esperé durante varias horas, no llegó hasta el día siguiente y me preocupé ya que creí que le había pasado algo malo, al llegar fue directamente a nuestra habitación y me ignoro, puede ser que estaba cansado y lo entendía así que decidí hacer su comida favorita, decidí que no le hablaría para no molestar pero al final no bajó, esperé el resto de la tarde en vano y cuando fui a dormir vi que se quedó dormido por lo que decidí taparlo, así pasó durante varios días hasta que llegó el jueves, le ayude con la cena y todo iba bien, conocí a la esposa y era muy agradable aunque veía de más a mí esposo, cruzaban miradas durante la cena y de seguro creían que no veía pero observaba todo, al jefe se veía que le daba igual así que seguí con lo mío, al terminar todo la esposa hizo discretamente una señal que decía que la llamé. Pasaron los días y mi patito se distanció un poco, él se alejaba así que decidí distraerme saliendo a varios lugares claramente con precaución, durante una tarde le dije que tenía que salir a comprar comida y que tal vez saldría más a ver la ciudad, llegué más temprano de lo que pensé y pude ver un auto que se veía caro algo lejos pero lo suficientemente cerca de nuestra casa, al ser de noche las luces estaban apagadas a excepción de dos que eran la habitación de invitados y la mía, como nuestro hogar tiene dos pisos pues la nuestra está en el segundo piso y decidí acercarme a la habitación de abajo, aprecié como habían dos siluetas en las que se encontraba mi esposo en brazos de otra pata, no creía que él era capaz de hacerme esto pero lo hizo, me traicionó apesar de prometer que nunca lo haría, en silencio las lágrimas bajaban por mi rostro y sollozos salían de mi pico, puse mi espalda contra la pared mientras bajaba sin notarlo, terminé abrazándome llorando en silencio y lo único que pensaba eran todos los momentos que tuve con quién sería mi futuro ex-esposo pronto, no puedo describir como me sentía en ese entonces pero solo puedo decir que era lo peor, no quiero recordarlo pero es necesario y así tenga el valor de enfrentar a quien alguna vez fue la persona que más amé, sin duda hoy lo haré.
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