Fusión

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Vamos princesa, muéstrame tu ser;
no tengas miedo, no soy lucifer.

Vamos preciosa, deja en paz tu melena,
no creo que pueda ser más buena.

Ven a mi lado mujer, se avecina una tormenta de placer,
cierra los ojos, deja que la humedad te comience a poseer.

No intentes controlar el terremoto en tu cuerpo,
déjate vencer, déjate enloquecer, déjate desvanecer.

Deja que un beso salvaje sea el asesino de tus miedos,
deja que mi tacto electrizante, recargue tu alma, estremezca tu pecho,
deja que nuestras miradas nos lleven al cielo.

Sí, eso es, abre lentamente las puertas del viñedo,
quiero degustar el néctar divino, salir un momento del infierno.

Quiero provocar un arco de gloria en tu columna,
quiero la brisa de tu centro recorriendo mis papilas,
quiero un estallido atómico, una explosión abrupta,
un gozo magnifico que te estremezca hasta en la tumba.

Pero tranquila, que la función aún no termina,
es tiempo de invadir la fuente de vida,
es tiempo de consumar la fusión advertida,
es tiempo de quitar cadenas a la mente retorcida,
es momento de gritar hasta que todo el mundo muera de envidia.

Escucha bien lo que digo, estoy a punto de quedarme sin cerebro,
en unos segundos ya no podré hablar, mucho menos pensar.

En unos segundos seré pura esencia sin conciencia,
en unos segundos estaremos poseídos por el gozo,
en unos segundos él va y ven de la vida se encargará de nosotros.

Así que escucha bien por favor.

Perfecta es lo que eres,
y más allá de estos placeres,
sin importar si me quieres,
siempre te elegiré entre todos los seres.

Poemas Escritos por un Poeta sin PoesíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora