¿Un Alfa y un Beta? 🔷Ridículo, eso saldrá mal...🔷

Ayúdame a conquistarla

¡Feliz día de la mujer!

Desde que Jericho había estado ayudando a ban, las citas de elaine y él se habían vuelto más frecuentes y duraderas.

Ahora si, el chico notaba que la mujer estaba a gusto.

-¿Crees de ya sea hora? -Después de cada cita, ban la llevaba a la chica a su casa y después volvía al bosque a hablar con Jericho, buscando consejo de ella- se le enota a gusto.

-Ya te lo he dicho -Regaño la beta afilando su espada- espera un poco mas, te diré cuando sea hora.

El chico suspiró.
Y así siguieron durante las siguientes semanas, la misma rutina una y otra ves. Ban había dejado de preguntar si ya era hora de declararse, por lo que solo comenzó a disfrutar cada una de sus salidas.

Elaine cumplía con sus gustos, aparte de que era increíblemente agradable estar con ella, le ponía de buen humor.

Sentía que con ella a su lado, los días brillarian... quizás no era mala idea que la Omega fuera su novia para siempre, era muy agradable.
Lo había decidido, ya no esperaría más, iba a declararse justo en ese momento y-...

Un estornudo por parte de la rubia le saco de sus pensamientos y de la conversión que tenían.

-¿Qué pasa elaine?

-Creo que me voy a enfermar... -Elaine se había quedado con la boca tapada con sus manos.

-.... No es buena idea que estés aquí, vamos, te llevare a casa y no olvides tomar medicinas para que no te enfermes -Elaine se sintió a gusto ante esa propuesta y asintió.

Fue a compañada a casa por el pecado, quien como ya era costumbre, se dirigió al bosque de hace poco para buscar a su amiga beta.
Ban llegó al sitio, extrañamente no sentía el olor de la chica cerca. ¿Donde estaría? Quizás había seguido con su trabajo y abría surgido algo.

-¡¡Perico!! -Grito burlonamente- ¡¿Donde estas? ¿Acaso si te salieron alas?! ¡Perico!

-¿Qué quieres? -Ban miro a la chica que estaba sobre la rama de un árbol.

-¿Y esa frialdad? ¿Ni un abrazo? -Burló el chico antes detener su camino hacia ella- ....¿Perico?

-Jericho. ¿Qué quieres?

-Hoy no hueles como de costumbre -expreso ban con seriedad.

-Olvida mi olor, lo que importa es como te fue con elaine. ¿Sabe-... -Ban no la dejo termina de hablar y de un par de saltos quedó en la misma rama que ella.

-Que extraño, tu olor -el chico se acercó lo más que pudo a ella, oliendo un poco su cuello mientras esquivaba el puñetazo de la chica- casi ha desaparecido.

-..... No es que haya desaparecido. -la beta apartó a ban con una expresión sería- esque como ya se acerca el gran aullido... Los olores de alfa y Omega se hacen cada ves más fuertes, opacando así el de los betas. Listo, ya te dije lo que quieres saber. Ahora, ¿Cómo te fue con elaine esta ves?

-... Bastante bien -por poco olvidaba que la mujer que tenia en frente era beta y no Omega, por poco olvidaba que ese olor a nuez le pertenecía a la beta y por eso tarde o temprano su increíble olor iba a disminuir.

Espera ¿Increíble olor? Si, increíble olor, porque para ser sinceros, al alfa de ban (su lado animal) la parecía algo atractivo y calmante el aroma de la beta. Pero era beta, asique eso la llevaba a irse por el caño.

Pero ahora que se ponía a hablarle sobre su cita con elaine y la veía mejor mientras admiraban la vista que tenían del lugar desde las copas de los árboles, se puso a pensar.... A ban le gustaban las chicas de cabello corto, elaine y jericho lo tenían así. Le gustaba las chicas de baja estatura, elaine era una exageración, mientras que Jericho... Se podría decir que ella era el tamaño perfecto. Que fueran tiernas, elaine cumplía mucho con ello mientras que Jericho... obviamente no. Que fueran bonitas, aquí quedaba en empate según él. Que fuera agradable... elaine era muy muy agradable, mientras que Jericho era agradable para pasar el rato.....Igual A jericho le sumaba puntos su buen cuerpo.

Y en cuanto una chica única... sentía que solo Jericho cumplía con eso...

Ambas tenían sus pros y sus contras pero Bueno, elaine era su mejor opción, aunque quizás Jericho ubieran sido elegida si hubiese sido Omega. Una lástima.

La luna había empezado a salir ya ban observó a jericho. La chica miraba el cielo haciendo brillar sus ojos avellana.

-¿Te quedaras aquí?

-Es mi trabajo, no puedo dejarlo -la joven bajo la cabeza para tomar una pastilla que saco de un pequeño frasco. Esta era de color gris y simplemente se la trago.

-¿Qué era eso?

-Estas muy curioso hoy ¿No crees?

-Sólo dime -Rió un poco el peliblanco.

-buen pues... Esto son pastillas para no dormirme, las fabrican para los betas.

-Ya entiendo, en verdad necesitas un sueño reparador -Burló ban.

-¿Disculpa? Al menos mi cabello No parece una piña pintada. -Gruñó en juego la peliblanca.

-¿Piña pintada? Ya verás

Comenzaron a empujarse desde el árbol Hasta hacerse caer, por suerte sólo ban se hizo un mínimo daño, porque Jericho simplemente salto.

-Ve a tu casa -Rió Jericho al ver cómo el chico reía levantándose.

-Claro, nos vemos mañana -Sonrió antes de despedirse.

Cuando el peliblanco llegó a casa, llego increíblemente positivo. Sus amigos se sorprendieron por eso y esque ni el mismo lo entendía; se sentía feliz sin razón alguna después de molestar un rato a jericho, se sentía más relajado que de costumbre, es mas quería ir a pasar la noche con ella para bromear a cada rato.

No sería tan mala idea, y de echo eso era lo que hubiera hecho de no ser por su celo que recién comenzaba a dar señales de que estaba por llegar. ¿Y cuales eran esas señales? Excitación de la nada y una erección Hasta por respirar.

Tenia que ser precavido si no quería quedar mal frente a elaine en la cita de mañana...

Se sentía extraño, por lo que entro a tomar un baño de agua fría y allí fue donde escucho la voz de su lado animal...

-Ayúdame a conquistarla...

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Continúa