Disclaimer: Los personajes de este fanfic le pertenecen a la Mangaka Rumiko Takahashi, en cambio la trama salió exclusivamente de mi mente loca e inspirativa.
Summary: Aquella pregunta lo heló por completo, no es que para él fuera inesperada o confusa, simplemente no estaba preparado para responder porque ni él mismo sabía la respuesta "Oye Inuyasha ¿Cómo crees que será nuestro bebé?"
Primera parte
"En camino"
Aun no se creía las palabras que brotaron de los labios de la anciana Kaede, mucho menos su compañera quien quedó ensimismada ante la noticia.
La pulga Myoga terminó por confirmar aquel hecho, cuando de la nada brincó a su mejilla y comenzó a absorber su sangre, volviéndose más y más grande. Lo aplastó inmediatamente y observó como caía como imitando ser una hoja en otoño.
Una vez se recompuso del golpe, brincó a la palma de su compañera y relató todo lo que sabía sobre el tema.
En el aroma de Kagome comenzó a destacarse la felicidad y estaba seguro de que fue producto del momento, su momento. El hanyou también se encontraba igual, su corazón latió más fuerte y una cálida sensación comenzó a recorrer su cuerpo, De pronto, se sintió completo.
No dudó en abrazar a Kagome fuertemente escuchando sus suaves sollozos, ella se aferró a sus brazos y reposó su cabeza en su amplio pecho, su refugio favorito.
Al fin lograron lo que siempre quisieron.
La sacerdotisa se separó unos centímetros de él y llevó su mano a su vientre plano acariciándolo con ternura, él posó su mano sobre la femenina y a sonrisa se dibujó en sus labios.
—Por fin seremos padres, Inuyasha — sollozó felizmente imaginando todo el proceso de estos próximos 8 meses en camino.
—Tendremos nuestro cachorro — contestó el peliplata reteniendo las lágrimas que deseaban caer por sus mejillas.
Después de tantos meses, luego de ambos manifestar su deseo de ser padres, de querer formar una familia y de intentar cada vez que Kagome se encontraba en sus días fértiles, por fin se convertirían en lo que siempre soñaron.
Y sus corazones vibraron al compás de sus emociones.
.-.-.
Las primeras semanas de gestación eran difíciles. En especial por los cambios de humor constantes de la sacerdotisa.
Muchas mañanas se despertaba con una sonrisa pintada en el rostro, que luego de unos minutos u horas se transformaban en puros berrinches y reproches dirigidos al hanyou. A veces tenían justificación, pues el muy desconsiderado y con poco tacto de Inuyasha no medía sus palabras o acciones y terminaba de arruinar la tranquilidad de su compañera. Otras veces, simplemente lo sentaba por puro placer ganándose las quejas del hanyou.
Pero aún así la amaba, ella llevaba el fruto de su amor en su vientre y eso lo enardecía de felicidad.
Ella era su compañera, su mujer o esposa según las leyes del mundo de Kagome, y nada ni nadie podía cambiar eso. Mucho menos después de haber sufrido los 3 años más largos de su vida por la ausencia femenina.
Ahora que la tenía a su lado no la soltaría y ella se mostraba complacida ante su decisión.
Los antojos también se manifestaron en esta primera etapa. Algunos fáciles de conseguir y otros imposibles.
A veces Kagome se acostumbraba a pedirle a su compañero un puñado de fresas en la mitad del alba. Él complacido se las iba a buscar, aunque en muchas ocasiones ya tenían algunas de reserva guardadas en la cabaña.
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Milagro en Camino
RomanceAquella pregunta lo heló por completo, no es que para él fuera inesperada o confusa, simplemente no estaba preparado para responder porque ni él mismo sabía la respuesta "Oye Inuyasha ¿Cómo crees que será nuestro bebé?" Fanfic previo a los sucesos d...