Cap 20 - NO HAY NADA

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- Mmm, oye Zim, otra vez, gracias por prestarme tu ropa... Y dejarme quedar en tu casa - dijo T/N saliendo del baño.

Apenas la chica termino de hablar, Zim rápidamente la volteo a ver, viéndola asombrado, en si, ella llevaba puesto uno de sus sacos, lo utilisaria para dormir, su saco era morado con el signo irken en el centro, le quedaba tan bien, Zim había aprendido a poder camuflarse y vestir como un humano desde hace tiempo, pero no pudo evitar ponerle el signo de su armada en todo.

Su saco, que tanto al el como a ella le quedaban algo grande, ya que descubrió hace años que la gravedad hacia que el creciera aumentando su altura, a ella le quedaba mejor, aún así el era un poquito más bajo que ella... Solo un poco.

No pudo evitar darle una pequeña sonrisa antes de responderle, claro no iba a dejar que ella supiera lo que causaba en el, no por ahora.

- Emm si, no pasa nada. - dijo tratando de no hacer notar su felicidad.

Bueno, después de llegar a la casa de Zim, un maratón de películas y comida a montón por parte de Gir, la chica lo acostó a dormir, como si fuera un perrito de verdad, lo cual molestaba a Zim.

Esos dos se empezaron a llevar muy bien, bastante para su gusto, no sabía si no le gustaba la idea de que la chica hablara tan feliz con alguien más o era el hecho de que aún le ponía alerta que un humano se le acercara a Gir de nuevo.

Lo peor era que a T/N le parecía extremadamente lindo el pequeño robot, por lo cual Zim nunca llegó a imaginarse que querría ser ese robot, almenos por unos segundos.

Fue así que después de que la chica bostesara, Zim se preocupo alarmantemente, pensando que por su culpa la humana estaba perdiendo sus horas de sueño requeridas para la salud de la misma.

Y le dijo que se fueran a dormir, aunque él no lo hiciera, por qué ya tenía todo preparado, había practicado como "fingir dormir" y lo sabía a la perfección, también puso un cuarto en su casa que contenía baño con acueducto, y una cama, parecía una habitación humana normal, la instalo precisa y únicamente para cuando ella se quedara.

- Bueno, que descanses Zim - le dijo la chica cerrando sus ojos para dormir luego de acostarse en la cama junto a el.

¿Que si estaba incomodo? Si lo estaba, ella estaba justo a su lado durmiendo, ¿Debería abrazarla? El quería hacerlo pero también quería respetar su espacio, quería que ella se sintiera cómoda y no quería ser grosero ni que pensará mal de el, por lo que se alejo un poco.

Y mientras pensaba todo esto viendo al techo, T/N estando dormida, se acercó a él y lo abrazo poniendo su cabeza en su pecho, cosa que sorprendió al de tez verde, que poco a poco se fue relajando, al sentir el cálido aroma de la chica en sus brazos.

- Que descanses, T/N...





...






Zim abrió molesto sus ojos al sentir que aquel olor que tanto le gustaba poco a poco se estaba desvaneciendo, era media noche y cuando T/N se levantó para ir al baño el fingió seguir "dormido", pero al pasar el tiempo y ver que ella no regresaba, se empezó a inquietar y más cuando minutos después unos pequeños sonidos de llanto, provenientes de la sala lo hicieron levantarse de inmediato.

Se levantó de golpe, siguiendo el olor de su humana y ahí la vio, en la sala, sentada en el sofá con ganas de llorar y aguantando sus gipidos, con una de sus manos abrazaba sus rodillas y con la otra veía atentamente su celular.

¿Que había pasado?

- Emm T/N, ¿estas bien? - preguntó acercándose a ella y sentándose en el sofá a su lado.

- Nada... - dijo la chica dejando más confundido al pobre alien - ni una llamada, ni siquiera un mensaje, no hay nada... ¿En verdad nadie se ha dado cuenta de que no estoy ahí? - ella quería llorar mientras miraba fijamente el chat que tenía con Dib, ahora Zim entendía todo.

- Pero, ¿No te sientes feliz aquí? Si quieres puedo traerte algo o podemos ver otra película, lo que quieras... - de verdad estaba empezando a preocuparse, pensó que lo había hecho bien, pero ella no quiere estar en esta casa, con el.

- No es eso Zim. Ellos, no saben que me fui, no le avisé a nadie, ya es más de la una de la mañana, y ni siquiera se han preguntado en donde estoy... ¿Y si no estuviera contigo? ¿Y si me hubiera pasado algo? Si me hubieran matado incluso a nadie le importaría, ni se darían cuenta >>

Ya estaba llorando, Zim no sabía que hacer o que decir, solo se mantuvo en silenció, buscando en su mirada algún indicio que le dijera que hacer - << pensé que almenos Dib me hubiera enviado un mensaje preguntándome en donde estoy, pero... no hay nada.

Zim la escucho atentamente y la consoló, hasta que ella se calmo y se quedó dormida de nuevo, si antes odiaba a Dib, ahora lo odiaba más. Para el, era claro que Dib solo se dedicaba a hacer infelices a los demás, lo sabía desde hace ya años.

Cuando lo conoció, no era más que un niño tonto de 12 años que intentaba detener sus planes cada cierto día de la semana. Pero con el tiempo, Zim descubrió que los humanos eran más horribles de lo que el pensaba, no solo destruían el mundo en el que vivían, también se destruían a ellos mismos.

Por un tiempo, llegó a pensar que Dib era lo único que estaba bien en este planeta, era gracioso, ingenioso, inteligente y siempre encontraba la manera de arruinar sus planes, nunca se sentía tan emocionado de perder, que cuando buscaba la forma de destruirlo una vez que era derrotado.

Pero aún así, todo lo bueno en este planeta termina corrompiendose, y Dib, no sería la excepción, no importaba cuan fuerte fuera el lazo que había formado con el a lo largo de el tiempo, este lo arruinó.

Aquella persona con la que paso la mayoría de sus tardes, empezó a ser de su vida un infierno, mostrándole la cruda realidad de lo que realmente era vivir. Los primeros humanos con los que estableció amistad fueron los hermanos Membrana, prometiendo que dejaría de intentar destruir la tierra mientras estos siguieran vivos.

Ahora, quería odiarlo de sobremanera, pero el inquietante olor que aún se posaba en sus recuerdos se lo impedía, odiaba a Dib Membrana, odiaba que lo molestará, odiaba que fuera popular y que tuviera muchos amigos humanos, odiaba que T/N llorara por su culpa y que aún así ella lo prefiriera, odiaba que un día, este simplemente lo abandonó.

Pero lo que más odiaba, era que no podía odiarlo realmente...



















...
Hola a todos

Tengan *les da pañuelos* para que lloremos todos

Zim puede sentir el olor de los humanos pero solo con los que forma un vínculo amistoso puede empezar a reconocer (incluyendo a Dib y a Gaz claro)

Lo que el no sabe, es que también puede sentir los cambios de humor de estos por su olor, el ni siquiera se da cuenta pero aún así le afecta

Por eso anda todo melancólico después de escuchar a te ene llorar, pensando en su primer amigo del planeta 🤧

Para todos los que dicen que odian a Dib, miren a Zim, es el afectado y ni el lo odia

Bueno
Eso es todo por hoy

Nos vemos en la siguiente lectura TT

°Tenias Que Ser Tu...° ◖⁠Bestia AU◗ (invader zim x lectora) CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora