Welf se despertó a las 5 am, su familia iba a tener otra expedición a los pisos profundos y el era el encargado de hacer afilar armas para sus compañero pero no quería quedar estancado en el nivel 2 mientras veía crecer a ver de una manera inimaginable el sabe que posiblemente no lo alcanzaría dentro de poco pero el se encargaría de que su equipo sea lo que lo proteja cuando su familia no pudiera.
Algo que welf pensaba es que bell era su hermano menor el no lo dejaría que se arriesgara en el calabozo sin el mejor equipo que pueda crear por eso welf no se iba a quedar en este estúpido nivel de sus habilidades el mejoraría para poder alcanzar el nivel necesario y lograr mantener vivo a bell, su familia y estas con la diosa que ama con todo su corazón, esa hermosa deidad que el deseaba superar para lograr estar a su lado.
El sonrió de manera tonta mirando el techo de su fragua cuando bajo la mirada vio a bell caminando al patio de la mansión para entrenar así que decidió hablar con el.
- Hey bell- el conejo volteo hacia donde escucho la voz de welf -ven- le dijo mientras le hacia una señal para que se acercara el se le acerco.
-hey welf como que sucede- el chico le pregunto a su herrero
-quería preguntarte si ya decidiste cuando decirle a la princesa de la espada lo que sientes por ella- el chico decía esto mientras se recargaba sobre su mesa de trabajo y veía al chico
bell se puso muy nervioso mientras balbuceaba cosas hasta que dijo - welf por favor no diga esas cosas aun no soy lo suficientemente fuerte para estar a su lado- dijo esto ultimo mientras se ponía mas serio welf al ver esto le se le acerco y lo agarro de los hombros y lo vio a los ojos diciéndole.
-Bell yo le confesé mi amor por hefesto y no era lo suficientemente bueno para estar a su lado tu estas mas cerca de poder estar al lado de la princesa de la espada estoy seguro que te aceptara vamos tu puedes-el herrero le dijo esto a su mejor amigo
-Enserio welf tu cres que aiz me aceptaría-
-claro bell estoy seguro-
-si lo are me declare a la señorita aiz-
-si vamos bell te acompañare a declararte-
De esa forma bell salio emocionado de la fragua y welf emocionado de poder ayudar a bell de con su problema de seguridad en si mismo y reanudo su trabajo de hacer los pedidos que tenia de su grupo de expedición y tarde se dio cuenta en el problema que se iba a meter con la mayoría de mujer de su familia y rezo a hefesto que no le fuera tan mal como pensaba.
-en que problema me metí-
En la tarde bell, mikoto y welf fueron a calabozo a conseguir un poco de valis y calentar antes de la expedición mientras haruhime y lily se quedaron en casa por diferentes cosas.
mientras los chicos despejaban el 15 piso a welf se le ocurrió preguntar cuando le diría a la princesa de la espada que esta enamorado de ella cosa que también mikoto escucho esto y se acerco a los chicos.
-bell-dono se va a confesar a kenki-sama?-
-no puedo- dijo el chico con apariencia de conejo se sonrojo mientras mataba mas monstruos
-o vamos bell como no vas a poder si sobreviviste a los pisos inferiores- dijo el herrero mientras terminaba de matar el ultimo monstruo que los había estado rodeando y continuo diciendo - mikoto tu me apoyas verdad que debería confesarse a la princesa-
la joven chica pensó en su amiga de la infancia que estaba enamorada del chico de cabello blanco ella no quería ver a su amiga triste pero ella tampoco podía obligar a su capitán de enamorase de su amiga así que dijo.